“Toda dictadura, sea de un hombre o de un partido, desemboca en las dos formas de esquizofrenia: el monólogo y el mausoleo. México y Moscú están llenos de gente con mordaza y de monumentos a la Revolución”.
-Octavio Paz, Posdata.
En la actual Cámara de Senadores y Diputados, algunos son parte del crimen organizado. Han ido de un partido a otro, corrompiendo magistrados, jueces, instituciones. Y esa es la condición humana en la historia de la humanidad no sólo de México.
Quien sale perdiendo siempre es la gente sencilla, el pueblo, los ignorantes. No porque lo quieran; en el mundo muchas tragedias como el nazismo alemán ocurrieron gracias al analfabetismo e ignorancia popular, común en todo fanatismo.
Millones de personas se conforman con resolver las necesidades básicas humanas. En estos días en el contexto de otro terremoto político comunitario en California, como el de 1997 con el crimen de Rodney King, que incendió la ciudad de Los Ángeles, California, por primera vez en la historia de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA); ha sido nombrado el Dr. Julio Frenk como rector de esa institución pública y prestigiada. Él es un médico mexicano que fue, entre 2000-2006, secretario de Salud de México. Un admirable reconocimiento sobre todo en la situación que vive ahora mismo la comunidad de L.A.
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“México es una nación que, dentro de la civilización occidental, ocupa una posición excéntrica: castellana rayada de azteca”, diría el poeta López Velarde.
Los ocurrentes monólogos que desde 2018 se impusieron en las Mañaneras, y que continúan hoy; bien se dice que no dicen nada, y la prueba está en la ineficacia de esa comunicación pseudosocial, si vemos los resultados no sólo de la Reforma Judicial, sino de los resultados electorales en Durango y Veracruz del domingo 1 de Junio de 2025.
Carlos Salinas de Gortari, cuyo lema de campaña fue Que hable México, y muchas reformas y fenómenos sociales sí fueron efectivas, hay que reconocerle la alternancia en el poder en Baja California en agosto de 1989. No es el caso actual, cuyo personaje se doctoraba en la Universidad de Stanford en California, y su pareja en Berkeley. Y aprovechando la democracia californiana y norteamericana, le permitían protestar incluso en el campus universitario contra el Presidente Salinas en 1989, exigiendo justicia en el TLC.
Pseudomarxistas del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) en el Pedregal de San Ángel, son como el régimen comunista chino y ruso; lo explica Octavio Paz en Posdata: “Los jóvenes fanáticos que recitan el catecismo de Mao –de paso: mediocre poeta académico- cometen no sólo una falta estética e intelectual sino un error moral. No se puede sacrificar el pensamiento crítico en las aras del desarrollo económico acelerado, la idea revolucionaria, el prestigio y la infalibilidad de un jefe o cualquier otro espejismo análogo”.
Lourdes Maldonado recibió sentencia favorable sobre su despido injustificado y fue sacrificada la misma semana en que defendía al fotoperiodista Margarito Martínez Esquivel. En la democracia se intenta silenciar a la disidencia y resistencia, para vivir en la simulación; tal es el caso de la mal llamada por la mayoría de los mexicanos, Reforma cosmética, que no tiene legitimidad popular, incluso por los que supuestamente votaron el año pasado para continuar una transformación inexistente.
Cuando Carlos Granés, participó en la Academia Colombiana de la Lengua (5 de Mayo de 2025), evocando a don Mario Vargas Llosa, expresaba: “Nuestra imaginación nos ha llevado a idealizar las comunidades primarias, ese Macondo en donde no había cementerio ni noticias de la muerte, que vivía en perfecta armonía al margen del Estado, del mundo exterior, y por eso mismo de la vida moderna. Ese pueblo puro e indiferenciado, no contaminado por ninguna plaga, vicio o enfermedad extranjera, sigue pareciendo un lugar más propenso para la vida, que la convulsa sociedad moderna”.
¡Por mucho que el engaño se cubre, él mismo se descubre!
Germán Orozco Mora reside en Mexicali.