Las y los maestros sudcalifornianos continúan con manifestaciones contra la reforma a la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en La Paz y otros rincones de Baja California Sur.
Aunque no han determinado unirse al paro nacional, el magisterio sudcaliforniano dejó en claro que están dispuestos a irse a medidas más extremas si las autoridades no ceden ante la primera demanda: detener la reforma que ya está en el Congreso de la Unión.
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Con una marcha por las calles de la ciudad Capital hacia el Palacio de Gobierno, reiteraron el rechazo hacia la iniciativa, con el objetivo de que tanto las autoridades como la sociedad se den cuenta del punto decisivo en que se encuentra la futura vida laboral del profesorado.
A través de un pliego petitorio, enfatizaron que la demanda principal es la abrogación de la reforma de 2007, concebida durante el sexenio del ex Presidente de México, Felipe Calderón.
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Con esto se cumpliría la propuesta de los 28 y 30 años de servicio en el sector educativo, logrando una jubilación y pensión digna pagadas en salarios mínimos y no tomando en consideración la Unidad de Medida Actualizada (UMA), como ocurre hoy en día.
“Tenemos que seguir empujando, luchando por algo que a todos nos afecta, que es la Ley del ISSSTE”, se escuchó entre las manifestaciones de la marcha.
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Recalcaron que no sólo son los trabajadores de la Educación están en riesgo, sino todo burócrata al servicio del Estado.
“Esperamos el cumplimiento a que sea una reforma integral que se aplique y se ponga en ella jubilación y pensiones de 28 y 30 años, como siempre lo hemos solicitado. Aquella lesiva ley de 2007, que obviamente ellos aceptan que es lesiva para el trabajador, bueno, hoy está en sus manos, ¿por qué no hacerlo?, ¿por qué hacerlo en partes?”, cuestionó Manuel Acevedo, uno de los docentes voceros del movimiento.
Otro aspecto que abordaron fue que los fondos de retiro ya no deberán ser manejados por empresas particulares, recalcando que no bajarán la guardia hasta que haya garantía de que la reforma a la Ley del ISSSTE sea una iniciativa integral que beneficie al personal, “sin descuidar también los temas que tenemos pendientes como las plazas, la federalización del quinquenio y el pago al personal de apoyo y asistencia a la educación en lo proporcional a las gratificaciones de fin de año, aguinaldo y primas vacacionales”, advirtieron.
