Durante una estancia de dos días en Tijuana, Julión Álvarez y Alfredo Olivas ofrecieron un par de presentaciones en el Estadio de Béisbol del Cerro Colorado, ambas con “sold out”, reuniendo a más de 20 mil personas en cada una.
Tanto en el concierto del sábado 29 como en el del domingo 30 de marzo, los cantantes conquistaron a su público con su show, derrochando energía y talento vocal a lo largo de un amplio repertorio musical.
A las 10:30 de la noche del domingo dio inicio la velada musical cuando, de manera sorpresiva, ambos artistas aparecieron sobre el templete simulando estar montados en la parte trasera de la caja de un pick-up clásico con la frase “Prófugos del Anexo”, mientras sonaban los acordes de “La Frontera”.
Los intérpretes salieron vestidos de negro, acompañados por unos 40 músicos en un escenario adornado con tres pantallas gigantes.
“Estamos muy contentos de estar aquí para cantarles en esta noche hermosa y maravillosa. Vamos a tratar de echarle todos los kilos y de cantarles toda nuestra música. La fiesta aquí la hacen ustedes. ¡Que la pasen bonito!”, comentó Julión al comenzar su show.
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Ya juntos en el escenario, Álvarez y Olivas interpretaron algunos de sus éxitos, como “Pongámonos de acuerdo” y “Seguramente”.
A lo largo del concierto, hubo momentos en los que ambos artistas cantaron por separado, deleitando a su público con sus melodías.
En el caso del cantante originario de Chiapas, hizo vibrar el escenario con “Regalo de Dios”, “Y fue así”, “Terrenal”, “El amor de su vida” y “Te hubieras ido antes”, siendo estas las más coreadas por el público.
Por su parte, “Alfredito”, acompañado de su inseparable acordeón, puso a bailar a los asistentes con “El problema”, “El precio de la soledad” y “En definitiva”.
Justo a la mitad del show, pasada la medianoche, los cantantes se trasladaron a un segundo escenario ubicado en medio del terreno del parque de pelota.
Una vez sobre dicho templete, el sonorense y el chiapaneco se dieron tiempo para interpretar canciones de Los Tucanes de Tijuana, como “Secuestro de Amor”.
“No recuerdo la colonia, pero me acuerdo que iba a ver ensayar a Los Tucanes de Tijuana. Con un respeto enorme al maestro, con mucho gusto y admiración”, recordó Olivas.
Después de unos minutos, ambos artistas regresaron al escenario principal para continuar con la fiesta musical.
Ya pasadas las 2 de la mañana, el show terminó entre aplausos y gritos del público, luego de un repertorio de más de 30 canciones y casi cuatro horas de música y baile con los “Prófugos del Anexo”.