La Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) consideró de “suma importancia” que haya coordinación entre el Ayuntamiento de Tijuana y el gobierno estatal para ejecutar el proyecto de pavimentación con concreto hidráulico de la zona industrial de Otay. El cual es impulsado por la Asociación de Industriales de la Mesa de Otay (AIMO).
Gabriel Vizcaíno, presidente de la CMIC delegación Tijuana, Tecate y Rosarito, se pronunció a favor de “dejar que AIMO siga siendo el líder en el mismo, y donde nosotros podemos ser el brazo técnico, ya que aquí tenemos a los especialistas”.
El proyecto de pavimentación en Otay contempla alrededor de 45 mil metros cuadrados y sería una oportunidad para los constructores de la Cámara, pues CMIC agrupa a ingenieros, topógrafos, constructores, especialistas en agua, drenaje, pavimentos, y en geotecnia, entre otros.
“El transporte de carga debe de transitar sobre vialidades de concreto hidráulico, como lo que se hizo en la Calle 12, y aquí en Cámara también tenemos a los proveedores de los materiales necesarios para llevar a cabo este gran proyecto”, afirmó Vizcaíno en un encuentro con Jesús Roberto Molina Acedo, director asociado de Organización y Financiamiento de Infraestructura Ambiental del Banco de Desarrollo de América del Norte (NADBank).
En su oportunidad, Molina Acedo detalló que el Nadbank cuenta con el programa “Bono Sostenible”, que puede financiar no sólo proyectos de agua y descargas, sino también de movilidad, como de parques industriales, hospitales, energía, y cruces fronterizos, entre otros.
Al mencionar este 22 de octubre de 2024 el proyecto de pavimentación con concreto hidráulico planteado por la AIMO, el directivo consideró que éste podría formar parte de la cartera de proyectos de la institución financiera y resaltó que “tendría un gran impacto en el crecimiento industrial y económico de la ciudad y el estado”.
En abril pasado, José Luis Contreras Valenzuela, presidente de la AIMO, señaló la falta de “voluntad política” por parte del gobierno municipal (entonces encabezado por Montserrat Caballero) para concretar el proyecto. El cual requiere una inversión de alrededor de 700 millones de pesos, mediante un crédito que tomaría el municipio, a pagarse en 15 años.
En ese entonces se comentó que el crédito se amortizaría con el 30% de la captación del impuesto predial; para lo cual se requiere la venia del Ayuntamiento, la aprobación del Cabildo y del Congreso del Estado.
