Siete de las 12 obras de infraestructura financiadas este año con recurso federal (Ramo 33) quedarán inconclusas en Playas de Rosarito al término del gobierno de Araceli Brown Figueredo. Así, poco más de 16 millones de pesos estarán en proceso de ejecución cuando inicie la próxima administración, de la también morenista Rocío Adame Muñoz.
Si bien, tal cantidad es prácticamente la mitad del recurso federal que llegará a Rosarito en 2024, a la gestión de Adame Muñoz sólo le tocará dar seguimiento a la ejecución y liquidación de los contratos, habida cuenta que ya fueron establecidas todas las obras y están en proceso de fallo los procedimientos de adquisición.
Este año, Rosarito contará con 38.7 millones de pesos del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS), una reducción de 5.8 millones menos respecto a 2023.
María Ana Medina Pérez, regidora panista del IX Ayuntamiento, atribuye tal disminución a la centralización del Gobierno Federal, el cual “no conoce la necesidad del municipio y decide recortar”, ya que cada vez se ejercen más recursos en programas sociales “populares” en detrimento de proyectos para obra que al final repercuten en la calidad de vida de la población, así como a un posible efecto de regresar el remanente a la Federación por subejercicio de años anteriores.
Por su parte, Abraham Gómez Álvarez, director de Promotora de Desarrollo Urbano (Prodeur), desconoce la razón del recorte presupuestal, pero coincidió en que el recurso del FAIS es “insuficiente” para atender las necesidades de Rosarito “e inequitativo, porque a otros municipios les llega entre 200, 300, 400 (millones) y a nosotros nos llegan 38 millones este año; Rosarito tiene muchas necesidades y carencias para el lado Sur y Este también, y ése es uno de los principales motivos de que no podemos avanzar como quisiéramos como Ayuntamiento, los recursos son muy limitados”, aseveró.
EL SUR ESTÁ “OLVIDADO”
Ninguna de las cinco obras viales ya contratadas y en construcción, se ubican en la delegación Primo Tapia, pese a que el FAIS tiene como objetivo financiar obras para beneficiar directamente a la población en pobreza extrema, localidades con alto o muy alto grado de rezago social.
Las obras tampoco están en áreas de bajo acceso a carretera pavimentada con asfalto o concreto (calles, carretera y/o autopista) señaladas por del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) con datos que datan de 2020 para mostrar que la ausencia o mala condición de infraestructura de este tipo genera aislamiento geográfico en menoscabo del bienestar de las personas, ya que dificulta el intercambio de mercancías, el abastecimiento de productos básicos y el acceso a servicios públicos de salud y educación, entre otros.
Desafortunadamente la zona de Primo Tapia está “olvidada”, señaló la regidora Medina Pérez, quien indicó que igualmente son mínimas las obras en esa demarcación con recurso propio.
“Son casi 200 millones de pesos” del recurso propio, y aunque parte de éste sí ha beneficiado a Primo Tapia, todavía no como quisieran los ciudadanos.
Tampoco ha habido apertura en el gobierno municipal para las opiniones de los regidores de oposición referente a la designación de obras, a la par de denunciar que la concentración de obras en algunas colonias se debe a que tienen “una afinidad al partido que gobierna” y no necesariamente a las peticiones de la comunidad, puesto que no han sido conformados todos los comités vecinales, fundamentales para conocer las carencias.
“Ese trabajo no se ha hecho al 100%, como debe ser, conforme al reglamento. Hay muchas omisiones, muchas comunidades donde no se han acercado las autoridades”, expuso.
Se está viendo pavimentación en la colonia Plan Libertador, en una zona de Cumbres o Los Ramos, “donde hay mucha necesidad y mucho rezago”, pero también en algunas comunidades con otro nivel socioeconómico.
En cuanto al recurso propio, “vemos que todo se está ejecutando donde la gente puede pagar, porque se le va a cobrar dicha obra, entonces ese recurso federal debería ejecutarse en otro lugar donde la gente no puede pagar”, manifestó en entrevista con ZETA.
Sobre cómo se eligen las obras a pavimentarse con recurso del Ramo 33, la encargada de programas especiales de la Secretaría del Bienestar, Ana Clara Sánchez, señaló que cada año llegan peticiones ciudadanas y se determina su prioridad con base en una investigación que se hace en conjunto con la Prodeur y otras dependencias. Este año, la Secretaría de Bienestar ha recibido16 solicitudes.
En un recorrido de ZETA por las cinco obras del Ramo 33 (todas contratadas por invitación restringida), se constató que la mayoría tiene un avance físico visible. En algunos casos la construcción ya fue terminada, aunque persisten montones de tierra al inicio y fin del tramo pavimentado con concreto hidráulico en espera, al parecer, de ser pintadas para su apertura. En promedio, el avance físico de estas obras es del 85%, según la Prodeur.
Entre las obras construidas donde podrían considerarse zonas menos vulnerables, se encuentra la pavimentación de las calles Mina Constancia y Mina la Quebradilla en la colonia La Mina, asignada a Construcciones del Pacífico AYC de RL de CV por 5 millones 726 mil 508 pesos, la de mayor monto.
Otro caso es la pavimentación con concreto hidráulico de la calle Ignacio Altamirano y Acacias en la colonia Magisterial, contratada con Live Baja Building, S de RL de CV por 5 millones 215 mil 521 pesos. Se trata de una rehabilitación, ya que la vialidad donde se ubica la sede del SNTE ya contaba con asfalto, aunque en muy mal estado, a decir de los residentes.
En la zona norte del municipio y cerca de la Carretera Libre Tijuana-Rosarito fue pavimentado un vado en la calle Lázaro Cárdenas de la colonia Plan Libertador. Obra asignada a una persona física por 2 millones 596 mil 273 pesos.
En esa área, pero distante a la Carretera Libre Tijuana-Rosarito, fue pavimentada la calle Ruta Aztlán de la colonia Aztlán, con un costo de 3 millones 949 mil 643 pesos y ejecutada por Vive Inversión y Desarrollos, S de RL de CV. La obra, situada frente a la Escuela Primaria Federal Aztlán, se terminará esta semana, afirmaron trabajadores de la misma.
Otra pavimentación fue la de la calle Guadalajara en la parte más al Este de la colonia Constitución, contratada con Desarrollos Urbanos Catenaria, S de RL de CV por 4 millones 591 mil 159 pesos. Ésta es la que tiene el menor avance físico (50%). En el lugar no se ha colocado el concreto, aunque residentes señalaron que se está trabajando en la obra y dijeron desconocer cuándo podrá terminarse.
En casi todas las áreas donde se llevan a cabo las obras del Ramo 33 también se están pavimentando otras calles, mayormente con recursos propios.
OBRAS INCONCLUSAS
El director de Prodeur, Abraham Gómez Álvarez, dijo que después de las elecciones del 2 de junio comenzó el proceso de contratación de un paquete de siete obras que comenzarán a construirse en próximos días, pero no serán concluida antes del 1 de octubre.
“Todas se pasan a la siguiente administración”, debido a que la última ministración del recurso federal llega en diciembre, “entonces estaríamos prácticamente mintiéndonos nosotros mismos si dijéramos que terminaríamos en octubre”, afirmó.
Las obras que quedarán pendientes consisten en la construcción de cuartos dormitorios para 15 beneficiarios en las colonias Ejido Mazatlán, Reforma, Colinas del Sol, Cumbres de Rosarito, Aztlán, Villas Costa Rica, Constitución, Villa Bonita y Los Ramos. Estas tres últimas concentran 7 beneficiarios. En contraste, en este rubro de obra directa sólo se considera un beneficiario en el sur del municipio, en Santa Anita.
Otras obras que quedarán pendientes son la construcción de baños para diez beneficiarios en las colonias Ampliación Plan Libertador (1), Reforma (1), Cumbres de Rosarito (2), Villa Bonita (3) y Lucio Blanco (3), así como la construcción de techos por una superficie total aproximada de 600 metros cuadrados que beneficiarán a cinco personas en Lucio Blanco, Constitución, Los Ramos, Vista Marina y Villa Bonita.
Ana Clara Sánchez, encargada de programas especiales de la Secretaría del Bienestar, Sánchez, comentó que cada año llegan entre 100 y 150 solicitudes para la construcción de dormitorio, baño y techo, pero alrededor del 40% es factible técnicamente, “ya que casi todos los solicitantes son en zonas alejadas, en terrenos con pendientes y a desnivel”
De ese 40% factible, “la gran mayoría no puede acceder (al beneficio), porque hay un límite presupuestal para hacer obras de baño, techo y dormitorio”.
De las obras que no se pudieron hacer el año pasado de personas que entregaron su documentación y a las que se les hizo la inspección y un estudio socioeconómico, este año “lo que hicimos es llamarles a las personas para que nos actualizaran su Predial y su constancia de situación fiscal” para que entraran al programa, agregó la funcionaria.
Explicó que entre las limitaciones técnicas de dormitorio y baño se encuentra el que el predio tenga espacio para dichas construcciones, ya que se deben hacer prototipos marcados por la Federación. Las dimensiones del baño son 2.5×1.5 metros; y de los dormitorios, de 3×4 metros.
“En algunos casos el cuarto o el baño no cabe, la vivienda no va a sostener el techo nuevo, entonces la Prodeur da la factibilidad si el terreno cumple con las dimensiones”, dijo. Tampoco puede construirse un baño o un relleno cuando las casas son rellenos o ya tuvieron un deslave.
El resto de las obras a heredar, consisten en tres cubiertas para la explanada del Jardín de Niños José Vasconcelos en la colonia Echeverría; para la Escuela Primaria Constitución de 1917 y en la Adolfo López Mateos en Plan Libertador. Esta última, recientemente aprobada por el Cabildo.
A lo anterior se suma la construcción de un aula de usos múltiples en el Centro de Atención Múltiple de la colonia Lucio Blanco, petición de hace nueve años.
Medina Pérez consideró que la asignación de los recursos federales a atender las necesidades de las escuelas refleja el rezago en que las tienen los gobiernos estatal y federal. Existe una obligación por parte de Estado y Federación para atender las escuelas, “pero también vemos que hay muchas escuelas que siempre han padecido ese rezago, donde no los atiende el Estado, la Federación y muchas veces el Municipio tiene que entrarle”, argumentó.
En su opinión, la alcaldesa de Rosarito siempre “presume” de un Gobierno Federal que atiende todos los temas, pero hay contradicción, “porque aquí vemos cómo llegan infinidad de peticiones por parte de las escuelas que no son atendidas ni por el Estado, ni por la Federación”.
Por último, estimó que del recurso propio que se están ejecutando para obra, un estimado a 40% quedará pendiente para la siguiente administración.