El empresario de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Alfredo Gómez Ramírez, se deslindó de la vivienda ubicada en Cerrada Arcángeles 1275 del Fraccionamiento Privada San Miguel, donde autoridades mexicanas y estadounidenses consideran que es uno de los inmuebles donde -por medio de terceras personas- podría ser propiedad del Ruso.
En una conversación para ZETA donde solicitó además la publicación de una carta aclaratoria, el ex Presidente de la CMIC, comentó que en el año 2007 se hizo de la vivienda antes marcada, pero que vendió el inmueble 10 años después, para posteriormente mudarse a otro domicilio en un residencial privado, el cual fue adquirido de manera formal.
En la pasada edición de ZETA se publicó un reportaje sobre la forma en que operan los presuntos criminales de la célula de los Rusos, donde se develaron además imágenes, nombres, la protección oficial con la que cuentan para delinquir y trasladarse, particularmente el brazo operativo de los Rusos, dirigido por Jesús Alexander Sánchez Félix o José Ponce Félix -inocente en tanto no se determine su responsabilidad, según el artículo 13 del CNPP-.
En la investigación del semanario, participaron como fuente de información, investigadores estatales, federales y de los Estados Unidos, contactos que coincidieron con la ubicación de dos domicilios desde donde, presuntamente, operan los criminales. Uno de los bienes inmuebles referidos por los investigadores se ubica en la Cerrada San Arcángeles, en el residencial San Miguel, cuya propiedad, de acuerdo a la seguridad pública estatal, era del empresario de la construcción, según les contaba en expedientes administrativos. Sin embargo, Gómez Ramírez demostró con documentos oficiales que dicha propiedad fue vendida, a través de una inmobiliaria en 2017.
El empresario también mostró la legalidad de las propiedades que adquirió junto con su familia en años posteriores, dando por sentado que no tiene involucramiento de ningún tipo con alguna agrupación criminal de Mexicali.