El presidente Andrés Manuel López Obrador insistió, el 11 de junio de 2024, en la necesidad de que en México se llevara a cabo una reforma al Poder Judicial de la Federación (PJF), considerando que la misma podría estar lista para septiembre del presente año.
“Necesitamos esta reforma. Sí, urge […] En septiembre, mes de la patria, podría hacerse [la reforma al Poder Judicial de la Federación]”, indicó el titular del Poder Ejecutivo Federal, durante su conferencia de prensa matutina, llevada a cabo desde el Salón Tesorería del Palacio Nacional.
El político tabasqueño retomó el caso de dos jueces que fueron expuestos en la sección “Cero Impunidad”, por supuestamente favorecer a presuntos delincuentes, entre ellos José Fernando García Quiroz, titular del Juzgado Octavo de Distrito en Materia de Amparo y Juicios Federales del Estado de México, quien, según dijo, le otorgó un amparo al capo sinaloense Rafael Caro Quintero y un plazo de 24 horas para que se cumpliera su resolución.
Además, el mandatario nacional criticó el caso de Hortensia García Rodríguez, Jueza de Control del Distrito Judicial Morelos, de Chihuahua, determinó, el 5 de junio de 2024, que César Horacio Duarte Jáquez, ex gobernador chihuahuense -del 4 de octubre del 2010 a 3 de octubre del 2016- y ex militante del Partido Revolucionario Institucional (PRI), del cual fue expulsado en enero del 2019- ya no fuera reingresado al Centro de Readaptación Social (CERESO) Número 1 de Aquiles Serdán -ubicado en la capital chihuahuense-, tras dejar sin efecto la prisión preventiva y ordenar el cambio de medida cautelar por prisión domiciliaria.
El presidente expuso también el caso del ministro Luis María Aguilar Morales, a quien en meses pasados señaló de guardar un proyecto por 10 meses para, según dijo, proteger a una empresa que tenía que pagar un monto superior a los 30 millones de pesos.
López Obrador dejó ver como un proceso sencillo el que se elijan a mil 500 o 2 mil jueces en un proceso electoral, el cual se encargaría al Instituto Nacional electoral (INE), un organismo que ya funciona con recortes presupuestales.
“No está el Poder Judicial al servicio del pueblo, no imparte justicia, aunque hay honrosas excepciones, en general está mal”, enfatizó el mandatario nacional, quien también insistió en que los opositores a la reforma del PJF “son los beneficiados de la corrupción, pero eso no es el pueblo, son los de arriba, que se sentían los dueños de México”.
López Obrador agregó que la reforma al PJF ayudaría a la independencia de poderes en México y dijo que “desde hoy ya está el debate, pero hay que hacerlo público, porque ya están actuando los que no quieren la reforma, están moviéndose como siempre lo hacen”.
“Que los jueces, magistrados y ministros sepan que son servidores públicos y su misión es impartir justicia, no representar los intereses de minorías, del poder económico, del político”, abundó el presidente de la República, quien detalló el proceso para reformar al Poder Judicial de la Federación y cómo se elegirían los ministros.
El político tabasqueño explicó que estaba “convencido de que hace falta para lograr una sociedad mejor en la que haya un Poder Judicial íntegro, honesto, que represente al pueblo de México”, por lo que impulsaría la reforma. Sin embargo, el proceso podría quedar pendiente para la siguiente Administración, encabezada por Claudia Sheinbaum Pardo, “aunque la reforma constitucional podría quedar en septiembre, no hay problema, realmente”.
Asimismo, el titular del Poder Ejecutivo Federal criticó, de nueva cuenta, a la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Lucía Piña Hernández, a quien acusó de reunirse “en la noche en una residencia con el presidente de un partido. O sea, ¿qué es eso? En lo oscurito”.
Después de que enfatizó que se buscaría tener jueces, magistrados y ministros íntegros, honestos, elegidos por el pueblo, defendió la fortaleza del peso mexicano frente al dólar, a pesar del “nerviosismo” por las reformas.
“A 18.37 pesos por dólar es un fortalecimiento del 10 por ciento desde que llegamos”, dijo López Obrador, atribuyéndole al combate a la corrupción. “No hay problema, ellos estaban acostumbrados al chantaje: ‘me mantienes mis privilegios porque si no va a haber fuga de capitales, devaluación'”, insistió, para luego recordar cuando le pedían “entregar el petróleo” en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), por temor a turbulencias económicas.
“Yo quiero cumplir mi responsabilidad, si estoy convencido de que hace falta un Poder Judicial íntegro que represente al pueblo, no a mafias económicas o del crimen”, aseveró el mandatario nacional, quien insistió en que se debe reformar un Poder Judicial de la Federación “secuestrado por la delincuencia” y que, según él, representaba a minorías.
El político tabasqueño confió en que septiembre de 2024 era tiempo suficiente para realizar foros públicos, donde se “escuche a todos, a los de arriba y a todos los ciudadanos”. No obstante, rechazó que se corriera el riesgo de que la reforma se intentara aprobar con el nuevo Gobierno. “No, yo quiero cumplir con mi responsabilidad”, aseveró.
Respecto a las críticas del sector financiero por una posible falta de separación de poderes, el presidente de la República respondió que, “al contrario, si ahora el Poder Judicial depende de una minoría, no del pueblo, está al servicio de esa minoría”.
“Entiendo muy bien que no les guste y empiezan algunos a presionar para ver si hay nerviosismo en los mercados. Nuestra economía está muy fuerte, afortunadamente. ¿Entonces cuánto tiempo les va a durar estar promoviendo ese nerviosismo?”, comentó el mandatario nacional
Además, López Obrador acusó que, según él, predominaban monopolios con “más agarraderas e influencias en el Poder Judicial”, que se suponía que era autónomo e independiente, “pero en los hechos no es así, es autónomo e independiente del pueblo, no de los potentados”.