Por segunda ocasión tuve el interés de ver el debate que estos tres personajes del vituperio público y en redes, nos quieren gobernar. Por desgracia, uno o una llevará las riendas de este país bronco.
En este segundo debate nadie tocó o habló sobre el crimen organizado, matazones ni violencia en la endeble república y frágil patria mancillada. Parecían cobras o hienas atacándose; magos faquires de circo, aventándose espadas por salida y enviados de la vista al contrincante a atacar. Fueron dos horas de ver a una tercia de gladiadores peleando en un ring o encordada nacional, que a final de cuentas salieron abucheados y sin ganador o vencidos.
La masa poblacional de mexicanos fueron los derrotados, porque no se habló sobre el cáncer de la violencia, cómo eliminarlo, planes, ideas, métodos… México conoció propuestas, más no convencen; están fuera de la realidad, sino en el mundo ficticio de Walt Disney, las cuales no se llevarán a cabo por quien gane el 2 de junio de 2024. Seguirá el miedo; nadie habló sobre el terror que cunde desde Tijuana hasta Tapachula.
Ya me enteré y voy ideando sobre lo que nos gobernará de 2024 a 2030. Espero ver e invertir dos horas para el tercer y último debate, y suspiro por este México asfixiante, que es como un caballo bronco sin domar.
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Atentamente,
Leopoldo Durán Ramírez.
Tijuana, B.C.
