El presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó, el 7 de mayo de 2024, que México participará en la prueba PISA 2025, luego de que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) confirmara en una carta que el país no había cumplido con los requisitos para participar en la evaluación del próximo año.
“Sí, participamos sin ningún problema, o sea, todo lo que tenga que ver con la educación se apoya, he estado viendo esto de que hablan de que no vamos a participar, pero sí”, dijo el político tabasqueño, durante la conferencia de prensa matutina, llevada a cabo desde el Salón Tesorería del Palacio Nacional.
Sin embargo, el titular del Poder Ejecutivo Federal dijo desconocer los motivos por los que se pensó que México no participaría. “Un evaluador dijo que no correspondía al nuevo sistema educativo, entonces no van a poder evaluar, pero están en eso”, intervino Jesús Ramírez Cuevas, Coordinador General de Comunicación Social y Vocero del Gobierno de la República, minimizando las advertencias de la OCDE.
En una carta fechada el 26 de abril de 2024, Andreas Schleicher, director de Educación y Competencias de la OCDE, pidió a Silvia Valle Tépatl, presidenta de la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (MEJOREDU), aconsejar para fomentar la participación mexicana en la prueba internacional PISA, dirigida a los alumnos de 15 años de edad.
“Espero que nos puedan aconsejar sobre cómo avanzar la participación de México en la prueba de campo de PISA este año, que se ha vuelto urgente. La participación en la prueba de campo es un paso necesario hacia la participación en PISA 2025, pero no implica un compromiso vinculante por parte de México de participar en la implementación final de PISA 2025”, expuso Schleicher.
En dicho documento, fechado desde París, Francia, el funcionario de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos reconoció la urgencia de fomentar pruebas como la referida, teniendo en cuenta el rezago educativo que México tenía en comparación con otros países.
“La participación de México en la próxima ronda PISA 2025 está actualmente en riesgo, ya que tengo entendido que los preparativos necesarios para implementar el estudio se han suspendido”, alertó el director de Educación y Competencias de la OCDE.
El funcionario de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos detalló que aunque México debía anunciar definitivamente si llevaría a cabo la prueba o no a finales del presente año, los preparativos deben iniciar desde antes.
“La prueba de campo es una parte esencial de los preparativos y asegura que México tenga lista una versión nacional de los instrumentos para el próximo año […] Es fundamental que los preparativos para la prueba de campo comiencen en las próximas semanas, y que esta se lleve a cabo en alrededor de 50 escuelas a más tardar en septiembre de 2024. Los resultados de la prueba de campo no se publican”, acotó el director de Educación y Competencias de la OCDE.
“Es fundamental que los preparativos para la prueba de campo comiencen en las próximas semanas, y que esta se lleve a cabo en alrededor de 50 escuelas a más tardar en septiembre de 2024. Los resultados de la prueba de campo no se publican”, señaló Schleicher, en su misiva.
“Y el respeto que los estudiantes tienen por las diversas perspectivas cuando buscan soluciones para los desafíos ambientales actuales. La evaluación de ciencias también explorará la capacidad de los estudiantes para abordar una gama más amplia de cuestiones relacionadas con las ciencias en su vida cotidiana, como ciudadanos reflexivos”, añadió el funcionario de la OCDE.
Según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, para la evaluación que se tiene prevista para el 2025, se había confirmado la participación de 91 naciones participantes, incluidos 13 países latinoamericanos (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay).
La próxima edición se centraría en las competencias de estudiantes en ciencias, incluido un nuevo componente para ciencias ambientales. Respecto a dicho aspecto, se evaluaría la comprensión de los educandos que terminaban la educación básica y pasarían a la media superior, acerca del impacto que las interacciones humanas tenían sobre el medio ambiente.
En respuesta, la MEJOREDU indicó al director de Educación y Competencias de la OCDE, que su cargo no lo facultaba para “la coordinación y aplicación de pruebas internacionales a gran escala como la de PISA”.