Marco Antonio Corona Bolaños fue de esos diputados del PRI que, aliados con panistas como el entonces diputado Carlos Torres, aprobaron la Ley Bonilla para darle, de forma que resultaría inconstitucional, cinco años de gobierno en lugar de los dos para los cuales fue electo el entonces morenista Jaime Bonilla Valdez. Algunos años después, los tres personajes van por más, desde otras trincheras políticas. Torres está en el gobierno de Morena que encabeza su esposa, Marina del Pilar Ávila; Bonilla es candidato del PT y Corona quiere regresar al Congreso del Estado, pero ya no por su partido que fue el PRI, sino por el PVEM, donde lo inscribieron para contender por el Distrito 15. Lo que más destacó de Corona Bolaños, fue aquella vez que cargó a la Legislatura, en dos ocasiones, una habitación en el motel Jabaloyas de Tijuana, cuando su residencia estaba en esta ciudad. Ahora el ex priista va por más… o por lo menos eso quiere.