Tres cuerpos arrojados por el mar, denuncias de negligencia y maltrato a los reclutas, y hermetismo por parte de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) han sido parte de los hechos desde que hace más de una semana un grupo de 11 militares fue arrastrado por el oleaje en una playa del municipio de Ensenada.
De los hechos registrados el 20 de febrero de 2024, en Playa Corona, en la zona de Chapultepec, solamente cuatro reclutas lograron salvarse: Alan Santiago Pérez Ríos, Jesús Andrés Portillo Calderón, Mauricio Alberto Cabrera y Saúl Alejandro Matlacala Pérez.
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De los siete restantes, las corrientes marinas únicamente han devuelto a Arturo Esteban Sarmiento Gaxiola (27 de febrero) y Carlos Omar Frías Lanfard (25 de febrero), además de que el jueves 29 apareció un tercer cuerpo, encontrado por un buque pesquero.
La extracción del cuerpo estuvo a cargo de la Marina-Armada de México, pero hasta el cierre de edición se desconocía la identidad del joven, quien podría ser Óscar Abraham Sánchez Reyna, Fernando Isaías Pérez López, Luis Manuel Vilchis Díaz, Michael Arellano Wilkinson o Brandon Francisco Gastélum Ayala.
Ante el hermetismo de la Sedena, familiares y amistades de los militares se han trasladado por sus propios medios a Ensenada y convocaron a rueda de prensa frente a las instalaciones militares de El Ciprés, el viernes 23 de febrero, para denunciar la negligencia y acusar al teniente coronel de zapadores David López Ordaz, quien al parecer dio la orden de que se metieran al mar.
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Por la escasez de información, las madres, padres y tías, crearon un grupo de WhatsApp para compartir datos, además de que impulsaron el sitio “Soldados Desaparecidos Ensenada”, en la red social Facebook, donde han compartido fotografías y videos, confirmado identidades o presentado testimoniales de otros militares.
Destaca la divulgación de dos videos en los que se aprecia a un pelotón entrar al mar, con botas y uniformes.
“Gracias a Dios nos enviaron la evidencia principal. Aquí les da la orden el teniente coronel. Se aprecian todos. No fue un accidente, gobernadora Marina del Pilar (Ávila Olmeda). Esto fue un asesinato, queremos justicia”, señala el mensaje que acompaña la publicación.
María del Consuelo López Rico, madre de Fernando Isaías Pérez López, viajó desde Veracruz a la costa ensenadense para buscar a su hijo. Para ella estaba muy claro que, si el joven no obedecía, sería arrestado o tendría maltrato físico. “Por obedecer ellos se tuvieron que meter al mar. Entre ellos está mi hijo”, declaró.
