Ante conductas agresivas de las personas en situación de calle que habitan el malecón de Playas de Tijuana, comerciantes se han visto afectados, luego de que los indigentes logran incomodar o ahuyentar a los clientes.
Fernando Sánchez González, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana Municipal, refirió que se contabilizan alrededor de 60 indigentes en la zona “a pesar de contar con personal en el área y (que) se realizan operativos especiales para retirarlos continúan regresando”.
Comentó que no se trata únicamente de un tema de seguridad, pues “van y se duermen ahí, pero consumen droga, piden dinero y a veces andan cometiendo robos pequeños”.
Sánchez González consideró que una de las soluciones sería modificar la estructura del malecón de forma que no duerman debajo de él, sin embargo, resaltó que se moverían a otro lugar, al no tener hogar.
Cabe destacar que, ante el aumento en el nivel de las mareas en la costa de Playas de Tijuana, se ha observado un retroceso hacia las calles, pues principalmente instalan sus campamentos debajo del malecón o entre las grietas.
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Daniela Sánchez, propietaria de Limón Coffee & Restaurant, compartió que anteriormente cuando contaba con un jardín en la entrada de su negocio, uno de los transeúntes le advirtió que una persona había llegado a enterrar jeringas en la tierra.
“Tuvimos un problema con uno de los indigentes; él antes a todos nos ayudaba a sacar basura, pero últimamente anda muy mal y quebró cámaras de diferentes negocios. Una vez, otra persona lanzó una piedra grande a un señor, pero alcanzó a quitar a su niño”, explicó.
Mientras que Alexa “N”, barista en Café Aquamarino, manifestó que las personas en situación de calle entran al establecimiento conversando de mal humor e incomodando a los clientes; destacó el caso de una mujer que rondaba por el lugar sin ropa, sin embargo, las autoridades actuaron al respecto.
Accesibilidad a tratamientos de rehabilitación
De acuerdo a Luz Vianey Robles, directora del Instituto Municipal Contra las Adicciones (IMCAD), alrededor del 70 por ciento de las dos comunidades que se encuentran a su cargo, son personas dirigidas de la situación de calle, por lo que consideró alto el índice en acceder a tratamientos de recuperación.
Explicó que se cuenta con un área de adecuación donde el usuario se deshabitúa de la sustancia en el lapso de uno o cinco días; en el caso de fentanilo o heroína, puede prolongarse hasta casi dos semanas.
“La droga de impacto es la metanfetamina, conocida como el cristal; sabemos que el cristal es una sustancia psicoactiva que efectivamente sus conductas son eufóricas”, informó.
Sin embargo, explicó que actualmente es difícil conocer el consumo del usuario, pues ha incrementado el uso de fentanilo en alrededor de un 40 por ciento con respecto al año anterior, sustancia que se puede mezclar con otras como la heroína o metanfetamina.
El pasado 7 de marzo, el programa Integrando Vidas visitó Playas de Tijuana brindando alimento, asesorías y atención médica. Sin embargo, señaló que los vecinos pueden coadyuvar a las personas que presentan esta condición acercándolos a los programas como la Comunidad de Rehabilitación y Reinserción del Adicto (COTRRSA).
