Durante la toma de compromiso del nuevo presidente del consejo directivo de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Ensenada, dirigentes empresariales aprovecharon la tarima para hablar sobre el problema de inseguridad en el puerto, donde cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública reflejan un incremento en las carpetas de investigación por el delito de robo a los negocios en 2024.
Sólo en enero y febrero, los fiscales abrieron 28 carpetas de investigación por ese delito, mientras que en 2023 cerraron con 227. “No podemos permitir que estas cifras se repitan este año”, recalcó el vicepresidente nacional de Coparmex, Juan José Sierra Álvarez.
Asimismo, extendió un reconocimiento porque en el año en curso no hay denuncias por extorsión, lo que significa un avance, al ser el segundo delito que más reportan los socios de Coparmex a nivel nacional, e insistió en la necesidad de aplicar las máximas medidas de seguridad porque ningún inversionista quiere instalar una empresa en una entidad violenta.
En el mismo sentido, el dirigente de Compañías Mexicanas de la Industria de la Construcción de Ensenada (Comice), lanzó un llamado a las autoridades por el repunte en el índice de la violencia en el municipio.
Luego de que en 2023 se produjera una disminución en los homicidios de alto impacto, al registrase sólo 124 frente a los 158 de 2022, en 2024 se ha notado un repunte importante al sumar 36 crímenes, de los cuales 26 fueron en febrero.
“Los empresarios nos encontramos muy preocupados, ya que la violencia ha escalado al dejar de ser sólo enfrentamientos entre bandas criminales, sino que ahora los ataques mortales se han enfocado en policías, de los cuales han muerto 3 en febrero y contra litigantes que se sabe, han fallecido dos de manera violenta”, precisó el dirigente y asociados al organismo.
Indicó que están consternados por las víctimas colaterales, como es el caso de dos niños en la colonia Gómez Morín y un prestigiado catedrático universitario, “personas que nada tenían que ver con el crimen organizado”, exaltó la membresía de Comice.
Los empresarios señalaron el aumento de asesinatos en las delegaciones El Porvenir, Francisco Zarco y San Antonio de Las Minas, donde se afecta la tranquilidad de las familias y la imagen de la industria vitivinícola y turística, lo que podría inhibir el flujo de visitantes.
A ello se suman los delitos de alto impacto, la desaparición de personas, la presencia cada vez mayor de extorsiones, cobros de piso o de cuotas a sectores como el pesquero, quema de locales y de vehículos que se enmarcan en esta escalada criminal.
La situación podría ahuyentar las inversiones y con ello golpear a la economía, como ya ocurrió a finales de la década de 2010, lo que impactaría negativamente al sector empresarial, en particular a la construcción, por la suspensión de obras. En ese tenor, constructores destacaron la necesidad de mejorar las estrategias policiacas para que haya resultados en el corto plazo y devolver la tranquilidad a los sectores productivos y a la ciudadanía en general. Corresponde a ellos velar por la tranquilidad y la paz de los ciudadanos para que sea posible la normalización de las actividades familiares, económicas y el flujo de visitantes sin ninguna preocupación, consideraron los empresarios.