Luego de la publicación de Semanario ZETA donde se exhibió un esquema de invasión de viviendas y de “robo” de casas en Mexicali, una de las inmobiliarias señaladas por afectados se deslindó de las acusaciones y el propietario se dijo uno más de los afectados.
Héctor Urbea Peña. propietario de la empresa Inmobiliaria Titán, acudió a este Semanario para brindar detalles sobre los señalamientos en su contra por parte de los ofendidos, y refirió que la verdadera responsable del intento de “robo” de viviendas es Iraíz Yazmin Solorio Garibay.
En entrevista, Urbea Peña solicitó deslindar a la empresa inmobiliaria Titán de las acusaciones referidas y reconoció que intentó hacer negocio con la adquisición de viviendas, pero no se identificó como artífice de un fraude. Por el contrario, se dijo afectado pues invirtió una fuerte suma de dinero para adquirir casas que resultaron tener propietarios.
Y es que refirió que tiene una larga trayectoria dedicada a la venta de inmuebles y tras conversar con Iraíz, quien era una persona cercana a él, comentó que le ofreció participar en una oportunidad de negocio adquiriendo procesos civiles a bajo costo, con la posibilidad de hacerse de viviendas que habían sido abandonadas.
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Aseguró que le ofreció un listado de viviendas en zonas residenciales y públicas, donde tendría que invertir una fuerte suma de dinero, pero que en comparación con el valor real de las casas, era un movimiento financiero que valía la pena.
La misma acusada, quien cuenta ya con un prolongado historial delictivo relacionado con fraudes y que incluso ya fue internada en el Centro de Reinserción Social (CERESO) por la misma actividad, le mostró algunas viviendas y le pidió que firmara algunos documentos para ingresar los procesos en los juzgados.
Sí bien reconoció que le pareció raro que pudiera inscribirse en varios procesos de prescripción de manera simultánea, la abogada le comentó que no había problemas y que era algo perfectamente legal.
Al ver que tanto en los juzgados como en el Registro Público de la Propiedad y el Comercio (RPPC) se inscribieron los documentos de prescripción, sintió que había certeza en los juicios.
Fue durante diligencias de prescripción en Toledo Residencial donde se dio cuenta que algunas de las viviendas que le “vendió” tenían dueños, a lo que la acusada respondió que pudiera tratarse de un error, pero que le cambiaría las propiedades para evitar problemas.
De esa manera comenzó a involucrarse en otros problemas, pues algunas de las casas se encontraban abandonadas, pero otras tenían a personas habitando.
Tras varios episodios de esta naturaleza se dio cuenta del fraude y solicitó que le devolvieran su dinero, pero la fémina intentó darle largas para no cubrir su deuda.
Urbea Peña mostró a ZETA una denuncia por escrito ante la Fiscalía General del Estado (FGE) que presentará en los próximos días, para exigir el pago del dinero que invirtó en el negocio de Iraíz, el cual resultó ser una estafa.
Comentó que algunos de los procesos judiciales inscritos ni siquiera tuvo conocidmiento de que se realizaron, por lo que invitó a la ciudadanía que se ha visto afectada por esta situación, que se comuniquen con él para desistirse de los juicios civiles en los que se haya involucrado y causado afectaciones a los propietarios originales.
Del mismo modo, le comentó a los clientes de la empresa Inmobiliaria Titán, que tengan certeza de que las viviendas que se encuentran en venta o renta, no forman parte de este paquete de viviendas, al que calificó como un mal negocio y un fraude en el que a la fecha se une a la búsqueda de justicia.
