Investigadores del Colegio de la Frontera a Norte (Colef) advirtieron que se podrían presentar más huracanes como Otis, que atacó el estado de Guerrero, y con más frecuencia.
En el conversatorio “Impactos y reconstrucción de Acapulco, Guerrero por el huracán Otis”, participaron investigadores en ciencias sociales y geográficas para analizar lo sucedido el pasado 24 de octubre.
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En él participaron los investigadores María de Lourdes Romo Aguilar, Roberto Sánchez Rodríguez, Gabriela Muñoz Meléndez y Juan Manuel Rodríguez Esteves.
Al respecto, Sánchez Rodríguez mencionó que los huracanes son más comunes en los océanos Pacífico y Atlántico, debido a la presencia de agua cálida, razón por la que siempre se ve afectado nuestro País.
Sin embargo, Otis fue un meteoro extraordinario debido la velocidad con la que pasó de ser una tormenta tropical con vientos de 64 kilómetros por hora, a un huracán categoría 5.
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“Sí fue un evento extraordinario, los huracanes se degradan al tocar tierra, pero Otis no, al contrario”, dijo, además fue en una temporada atípica para el desarrollo de huracanes, ya que el agua debió estar a 24 grados y por el cambio climático subió a 31, lo que dio las condiciones para que Otis creciera.
Agregó que se continuar el aumento de temperatura en los océanos, los huracanes de tal magnitud serán más comunes y con mayor frecuencia, y aunque se tomaran medidas radicales para combatir el cambio climático, México no está preparado para afrontar las consecuencias.
Ante esto, la investigadora Lourdes Romo Aguilar, comentó que es necesario enfatizar los programas de prevención e informativos, así como armar un plan de reconstrucción para que cuando pasen los fenómenos meteorológicos, utilizar los mismos escombros para reedificar.
Por su parte, todos coincidieron en que el presupuesto para desastres se utiliza de forma reactiva en un 94 por ciento, y sólo el 6 restante se usa en prevención, además de arte la ayuda de concentra en una sola zona.
“Fueron los 81 municipios de Guerrero los afectados por Otis, pero toda la ayuda se enfocó en Acapulco, sobre todo en la zona turística”, dijo Romo Aguilar.
Desde 1986, que se formó la Coordinación Nacional de Protección Civil, no ha cambiado ni han mejorado las estrategias ante los distintos desastres, se reacciona ante una tragedia, pero no no hay planes a futuro en reconstrucción, prevención, educación, ni mucho menos sanciones para funcionarios omisos, por lo que promueve que todo siga igual, se dijo en el conversatorio.
Los especialistas coincidieron en que es necesario replantear las estrategias ante contingencias como las de Otis, de lo contrario, seguirán ocurriendo situaciones similares en otras ciudades de la república.
