Familiares y amigos de 500 personas reportadas como desaparecidos en Tecate entre 2019 y noviembre de 2023, buscan algún indicio o dato que los lleve a conocer el paradero de sus seres queridos que conforman la cifra de víctimas de desaparición forzada en el llamado Pueblo Mágico.
El 4 de octubre de 2019, Mónica Mariscal Rodríguez conformó el colectivo de búsqueda de personas desaparecidas Madres hasta Encontrarte, logrando encontrar más de un centenar de cuerpos.
Su objetivo es dar con el paradero de su hijo David Alberto Minjarez Mariscal, reportado como desaparecido el 1 de julio de 2019 mientras se transportaba sobre la carretera Tecate- Ensenada. A pesar de las investigaciones realizadas por la Fiscalía General del Estado, cuatro años después no se ha podido concretar una línea de investigación que ayude a dar con el paradero de David, ni de 500 personas más desaparecidas a lo largo de estos años sólo en ese municipio.
“Por datos que hemos podido recabar creo que, en algún lugar cercano al Cañón Manteca, ubicado en la zona montañosa de Cerro Azul, está mi hijo, pero aún no lo hemos encontrado, pero sé que va regresar a casa tarde o temprano”, ha señalado la líder del colectivo de búsqueda.
Mientras que la fiscalía advierte que, por ser una carpeta con una investigación abierta, no se pueden proporcionar mayores datos.
“Mi hijo salió de casa con unos amigos, recuerdo haberle dicho ‘Regresa temprano’ y me dijo: ‘Amá, no se preocupe, al rato regreso’, han pasado tres años y no ha regresado, como madre no se pierde la esperanza de verlos entrar por la puerta y poder abrazarlos, eso tampoco me permite llorarlo y cerrar mi duelo, porque todos tienen a donde ir a llorar, saben que su ser querido se ha ido, ¿pero nosotras? Qué hace una madre si no tiene un cuerpo que enterrar, el día que se llevaron a mi hijo, se llevaron mi vida con él”, compartió Mónica.
Otra de las madres de desaparecidos expuso: “He buscado a mi hijo en cerros, en el río, en predios, bajo el sol, la lluvia y el frío, lo iría a buscar al mismito infierno si me dicen que ahí lo voy a encontrar porque anhelo verlo de nuevo, abrazarlo, no saber qué pasó me carcome todas las noches, todos los días, se queda una muerta en vida”.
A veces el resultado no es el esperado y muchos padres que de manera desesperada han dedicado años a buscar a sus hijos, fallecen sin dar con el paradero. Así ocurrió con Patricia Fernández, madre buscadora integrante del colectivo de búsqueda Unión y Fuerza por Nuestros Desaparecidos Tecate, BC. Desde 2020 se integró para localizar a su hijo Alejandro Abarca Fernández, de entonces 20 años, quien fue privado de su libertad por hombres armados al exterior de su domicilio en Cerro Azul el 17 de diciembre.
En enero de 2022 fue acribillado Dany Ortiz Covarrubias el Moreno, su muerte no sólo significó un reacomodo en la estructura criminal en Tecate, también el término de la esperanza de familiares de personas desaparecidas que esperaban su captura y señalara dónde habían sido abandonados los restos de más de un centenar de personas asesinadas bajo sus órdenes. Autoridades le atribuyen alrededor de 150 asesinatos, de los cuales presumen que más de 100 habrían sido colocados en fosas clandestinas operadas por el entonces cabecilla del Cártel Jalisco Nueva Generación.
En Tecate, el nivel más alto de personas reportadas como desaparecidas se registró durante 2019 y 2020, cifra que calculan se repetirá en 2023.
A pesar de la estrategia de militarización en el municipio, en lo que va del año se han registrado 112 homicidios, además del centenar de desaparecidos.
A la lucha constante que viven los integrantes de los colectivos para dar con el paradero de sus familiares, se suma la falta de capacitación en perspectiva de género para atender los reportes por parte de agentes del Ministerio Público, la burocracia y el lento proceso para formalizar la denuncia y funcionarios que revictimizan e incluso criminalizan a las personas desaparecidas.
Las autoridades, consideran familiares de los desaparecidos, han normalizado los hechos y no dan seguimiento a las carpetas de investigación ni generan indicios para la búsqueda o para judicializar a los sospechosos de la desaparición de algún ciudadano.
A un mes de que integrantes de colectivos de búsqueda marcharan por la principal avenida de Tecate de nombre Benito Juárez, siguen exigiendo a las autoridades una respuesta sobre las desapariciones y mayor celeridad en la identificación de cuerpos; ese día caminaron con pancartas en silencio, colgaron fotografías de sus familiares en el Parque Miguel Hidalgo y encendieron velas para pedir por el descanso de aquellos que esperan ser encontrados.
“Sabemos que están ahí, en algún lugar, y queremos decirles que estamos haciendo todo por irlos a encontrar, estoy aquí, mi niño, no sé dónde te dejaron, pero mamá encontrará el camino para traerte de nuevo a casa y puedas descansar”, susurraban con fotografías en mano las integrantes de Madres hasta Encontrarte.
Cuatro personas más han desaparecido en Tecate en la última semana, tres en zona urbana y uno más en la zona rural, entre ellos Cristian Iván Acuña Millán, visto por última vez el sábado 18 de noviembre en Nueva Colonia Hindú y Juan Manuel Cárdenas Lomelí, desaparecido el miércoles 15 de noviembre en la Zona Centro de Tecate.
Familiares de las víctimas se han unido al colectivo de búsqueda y han interpuesto denuncia ante la Fiscalía General del Estado.
