El incremento al salario mínimo para 2024 podría ser de hasta 25% en la zona fronteriza norte de México, con lo que la percepción diaria de un trabajador formal sería de 390 pesos, prevé el sector manufacturero de exportación.
Alicia Palma, directora de Capital Humano de Index Zona Costa de Baja California, mencionó que las proyecciones sobre el salario mínimo abarcan desde la postura de Coparmex de que aumente 6.5% (inflación más dos puntos porcentuales) en la zona fronteriza al haber llegado a la línea de bienestar, y 12.8% para el resto del país a un rango de incremento de entre 20 y 25%
Desde 2018 a 2023 el salario mínimo en la zona fronteriza norte ha aumentado 354%, al pasar de 88.3 pesos a 312 pesos.
En Baja California el salario de cotización promedio es de 592 pesos, cifra superior en 89% al salario mínimo, indicó la ejecutiva durante su participación en la Reunión Mensual de Index Zona Costa.
Por otro lado, Palma mencionó que mañana 13 de noviembre de 2023 será la última sesión del Parlamento Abierto en el Congreso de la Unión para revisar el dictamen sobre la reducción de 48 a 40 horas de trabajo.
De concretarse la reforma constitucional, las empresas tendrían tres opciones: contratar nuevo personal hasta 20% de su plantilla. O bien, abrir nuevos turnos, pagar tiempo extra o abrir turnos días de descanso o pagar día de descanso. Todas incrementarían los costos de las empresas. Así como revisar cómo aumentar la productividad para poder absorber las 8 horas adicionales.
En el Congreso federal también está a discusión el incremento del 15 a 30 días de aguinaldo, así como la iniciativa para aumentar 88 la tabla de enfermedades laborales, apuntó.
La cual incluye enfermedades del tipo psico-social que le afectan al empleado por tanta carga de trabajo, que “nunca antes habían sido consideradas en la Ley Federal del Trabajo, como estrés, ansiedad”, indicó Elisa Ibáñez, consejera de Index Zona Costa.
En estas nuevas 88 enfermedades también “aumentan varios tipos de cáncer que están relacionados con el trabajo y que a raíz de esta tabla ya van a poder ser reconocidas como enfermedades de trabajo”, pues serán sujetos a una pensión por riesgo de trabajo, con lo que tendrán 100% de su salario.
En tanto los trabajadores van a tener que implantar medidas para prevenir esas enfermedades, apuntó Ibáñez, quien añadió que entre las nuevas enfermedades hay las producidas por virus, como COVID-19 e influenza.
“La diferencia básica entre una pensión por enfermedad general y una por enfermedad de trabajo es que te tienen que pagar el 100% del salario y no un porcentaje”, puntualizó.
