Un grupo de hombres que se encontraban en un convivio la tarde del miércoles 18 de octubre, fueron atacados con armas largas por gente allegada a los Mayos, en unas de las comunidades de Ensenada con mayor índice de trasiego de droga.
Entre los lesionados se encontraba un sujeto identificado como Juan Carlos Almazán Almazán y/o Juan Carlos Almazán Armenta alias el Guacho, quien fue dado de alta y escoltado hasta su domicilio en Tijuana; mientras que un segundo lesionado se encuentra en grave estado de salud, informaría la Fiscalía General del Estado (FGE).
En su historial delictivo, El Guacho no tiene orden de aprehensión, sólo las autoridades de investigación reportan una detención en la colonia Francisco Villa del 17 de mayo de 2011 por robo vehicular.
A un segundo hombre, identificado sólo con fotografías del momento en que ingresó a la clínica con una herida en la mano, lo dejaron ir sin siquiera tomarle declaración.
El Guacho ha sido mencionado por la FGE en las Mesas de Coordinación en materia de seguridad como un integrante de Los Chapitos.
Esa tarde, Carlos Olea fue trasladado al hospital Velmar en Ensenada con apenas una lesión por arma de fuego en la mano, por lo que fue dado de alta de inmediato; autoridades afirmaron que se trataba de una víctima del atentado.
Los primeros datos indican que los lesionados fueron trasladados a hospitales públicos en Ensenada en calidad de detenidos y escoltados por elementos federales, por las armas que tenían en su poder al momento de la embestida.
La Unidad de Delitos contra la Vida de la FGE respondió que, en el caso del Guacho, lo dejaron en libertad al ser considerado víctima, incluso recibió custodia policial hasta su domicilio en Tijuana.
El índice de homicidios dolosos en Ensenada se encuentra en 102 casos, de los cuales seis han ocurrido en Valle de la Trinidad. De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Baja California, se han registrado al menos cuatro atentados armados.
Valle de la Trinidad es una pequeña comunidad casi despoblada con poco más de 2 mil habitantes que conviven en apenas 70 manzanas, pero con una ubicación estratégica a 268 kilómetros de la frontera con Estados Unidos.
La zona es una ruta para el trasiego con conexiones a través de brechas en el triángulo entre los municipios de San Quintín, Ensenada y Mexicali.
Justo la Sierra de Juárez que se ha caracterizado por la presencia de criminales que se da entre los mayores operadores de droga, el territorio se extiende hasta la salada en Mexicali, y son trabajadores al servicio de Los Chapitos, organización dirigida por los hermanos Iván Archivaldo y Alfredo Guzmán Salazar, además de Ovidio Guzmán López el Ratón, hijos del ex líder del Cártel de Sinaloa, Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, preso con cadena perpetua en una cárcel de máxima seguridad de Estados Unidos.
La violencia en el perímetro es tal, que bajo oficio DRPBCPN/PNC-081/2023, en septiembre la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), instruyó al director de Seguridad Pública Municipal (DSPM) de Ensenada, David Armando Sánchez González, el cierre indefinido y precautorio del Parque Nacional Constitución de 1857 por la situación de inseguridad en el área.
EL HOMICIDIO MÚLTIPLE EN VALLE DE LA TRINIDAD
El ataque en Valle de la Trinidad ocurrió a las 18:00 horas del 18 de octubre, cuando un grupo de personas se encontraba en una reunión en el patio de una vivienda en Calzada de las Águilas, los tiroteos se extendieron por varias calles hasta cerca de Avenida Pericúes.
Conforme a testimonios de pobladores, sólo un vehículo llegó y los ocupantes dispararon contra las personas frente a una casa cercana a la gasolinera.
“A un lado de un carro guinda estaban tiradas las personas, había varios vehículos abandonados, entre éstos una Tahoe color negro con las puertas abiertas, una Cherokee color rojo con el motor encendido y una Pathfinder color oscuro”, describieron testigos en el lugar.
También, en las inmediaciones a una cuadra del lugar, cerca de la entrada principal sobre la carretera, abandonaron un vehículo Nissan Altima color gris en la calle.
Entre los primeros informes emitidos por el Departamento de Bomberos del poblado, tres personas lesionadas fueron trasladas a hospitales en un vehículo particular a la delegación Ojos Negros.
Una hora después, a las 18:28 horas se levantó otro incidente por tres personas fallecidas por disparo de arma de fuego: lzuachan Anel Mavarez, Alejandro Espinoza Alcaraz y Jesús Francisco Bañuelos Ramírez.
Agentes de la FGE y personal de Servicios Periciales adscritos al área de Criminalística, encontraron una perturbadora escena que abarcaba tres predios con fallecidos, lesionados y vehículos incendiados en distintos puntos.
Uno de los cadáveres fue identificado por un tatuaje con la imagen de un rosario, circundando muñeca derecha. Tenía heridas por arma de fuego en mentón, cuatro heridas de bala en brazos, dos en el torso, tres en tórax, tres en abdomen y una en un glúteo.
El segundo cuerpo recibió dos lesiones por arma en axila y dos en los brazos.
Un tercer fallecido, identificado como Bañuelos Ramírez, recibió un impacto de bala en pectoral y dos en clavícula.
Alrededor de la zona de los disturbios, fiscales recolectaron una pistola calibre 9 milímetros, un cargador abastecido con 25 cartuchos útiles y dos armas tipo fusil, una de estas con cargador abastecido con 22 cartuchos.
De la zona del ataque los agentes marcaron y recolectaron al menos 49 casquillos de armas larga y corta que indican la magnitud del enfrentamiento, además de vehículos abandonados: dos Chevrolet Tahoe tipo camioneta color verde y cinco puertas; y un Jeep Grand Cherokee, ambos sin placas de circulación.
El segundo día de septiembre, también en Valle de la Trinidad, se registró un enfrentamiento entre hombres armados y agentes de la Policía Municipal sobre un camino vecinal, en el área conocida como La Calentura.
Los oficiales se encontraban en un recorrido de vigilancia, sobre una brecha que conecta el Valle de la Trinidad con San Vicente, cuando interceptaron a varios hombres armados que huyeron al ver la presencia de unidades policiales.
Uno de los atacantes resultó lesionado y se le trasladó a un hospital en Ensenada.
En cuanto a decomisos en Valle de la Trinidad, uno de los más importantes en Ensenada se registró en mayo, cuando elementos del 67 Batallón de Infantería decomisaron y destruyeron poco más de 600 kilogramos de marihuana en el lugar.
Los militares llegaron a pie a las inmediaciones del Rancho La Tinaja, donde localizaron un secadero de marihuana; no hubo personas arrestadas por ese delito.
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