Posterior a las evaluaciones de daños por el huracán Hilary en el norte de Baja California Sur, el gobernador del estado, Víctor Castro Cosío, declaró que las condiciones actuales de la ciudad de Santa Rosalía permiten adelantar que ya no es suficiente con un muro de contención para proteger a la población de las corrientes por las lluvias, por lo que prevé que es necesario plantear la construcción de infraestructura pluvial más compleja.
Santa Rosalía fue una de las comunidades más afectadas por los vientos y lluvias que dejó el ciclón, en su paso por tierras sudcalifornianas.
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El arroyo de la ciudad creció a tal punto que elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) se vieron obligados a activar protocolos de desalojo en zonas del centro de Santa Rosalía.
En este contexto, el gobernador mencionó que, en lugar de contar con un muro de contención, sería necesaria una presa que almacene el agua pluvial y que, además, dé reservas de recurso hídrico a sus habitantes.
“Hay un planteamiento de fondo, la gente entiende que ese muro ya no puede volver a colocarse ahí, va a volver a pasar lo mismo; el agua es mucha. Hay que pensar, la Conagua los técnicos, y convoco a todos a hacer un proyecto de un represo arriba de Santa Rosalía, que garantice acumulación de agua y protección para el pueblo de Santa Rosalía”, comentó.
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En declaraciones con medios de comunicación, el gobernador aseguró que le pedirá al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, la construcción de esta obra para la cabecera municipal.
“Tengo que planteárselo al señor Presidente para un represo de mayor nivel de fortaleza, una represa de mayor costo, que no tengo idea, pero en estos cuatro años tendríamos que invertirle nosotros paso a paso para ir dejando una obra que proteja a Santa Rosalía”, señaló.
Cabe recordar que tras el paso de Hilary, un ciudadano denunció en redes sociales que el gobierno del Estado hizo caso omiso a peticiones de reparación del muro de contención de Santa Rosalía, que se hicieron desde el año pasado y que no fueron atendidas.
En consecuencia, el arrastre de las precipitaciones del fenómeno embistió a la ciudad con alto riesgo para la población.
De acuerdo con la alcaldesa de Mulegé, Edith Aguilar Villavicencio, el ciclón dejó a 86 familias sin vivienda, la mayoría en Santa Rosalía.
Asimismo, el gobernador constató que el monto por las afectaciones ascendió a los 250 millones de pesos.
