Después más de cuatro meses de negociaciones que terminaron en un paro laboral de 148 días, el Sindicato de Guionistas de Estados Unidos finalmente han encontrado la luz hacia un acuerdo más justo y completo con la Alianza de Productores de Cine y Televisión, el pasado 24 de septiembre.
Apoyados Chris Keyser y David Goodman, copresidentes del comité de negociaciones de la WGA, el sindicado de guionistas tuvo un avance significativo en cuanto al acuerdo en donde buscaban mejores remuneraciones y contratos laborales más justos, llegando a un contrato provisional de tres años. Nombres pesados de la industria incluyeron al director ejecutivo de Sony Pictures Entertainment, Tony Vinciquerra, al codirector ejecutivo de Netflix, Ted Sarandos, David Zaslav, director ejecutivo de Warner Bros, y Bob Iger, director ejecutivo de Disney, dentro de las pláticas para canalizar los acuerdos importantes.
Dentro de las negociaciones, algunas cuestiones claves que se han resuelto conforme a la demanda del sindicato de guionistas son: Tener un mínimo de seis escritores para una serie que haya dado el sí a su producción para al menos seis capítulos. Las series que tengan entre 7 y 12 episodios por temporada tendrá que contratar a cinco guionistas; Mientras que las series que sean mayor a 13 capítulos o más, deberán tener seis escritores, dando oportunidad a jóvenes escritores durante 20 semanas de producción, así como 10 semanas consecutivas de empleo garantizadas en las producciones previas a luz verde.
Otros de los puntos incluyeron un “bono basado en el éxito” para los programas de televisión y películas para streaming como Netflix, Amazon Prime Video, HBO Max, Apple TV+, entre otros servicios de suscripción. En resumen, los títulos hechos para transmisión que sean vistos por el 20% o más de los suscriptores nacionales de dicho servicio, durante los primeros 90 días de su estreno, los escritores recibirán una bonificación establecida entre los 9 mil y 16 mil 400 dólares para un episodio de televisión, y 40 mil 500 dólares para una película con un presupuesto mayor a los 30 millones de dólares. Dicho acuerdo entra en vigor a partir del 1 de enero del 2024.
En cuanto al tema generado por la IA (Inteligencia Artificial), su uso generativo en el proceso creativo, se otorgó al gremio el poder de desafiar el uso del trabajo existente de los escritores para entrenar programas de software de IA; afirmando el contrato que “El material generado por IA no pude utilizarse para socavar el crédito de un escritor o sus derechos separados”, estableciendo los puntos:
La inteligencia artificial no puede escribir ni reescribir material literario, sumado a que el material generado por esta no se considera material fuente según la MBA; Un escritor puede utilizar IA al realizar servicio de redacción, si la empresa otorga el consentimiento, sumado a que siempre y cuando el escritor siga las políticas aplicables de la empresa, pero la empresa no puede exigirle que utilice software IA para realizar sus servicios de redacción.
La compañía debe notificar al escritor si algún material entregado al escritor ha sido generado por IA o incorpora material generado por IA. Finalmente, la asociación de guionistas de Estados Unidos se reserva el derecho de afirmar que la MBA u otra ley prohíbe la explotación del material de los escritores para entrenar IA. Contrato de guionistas y equipos de escritores también fueron resueltos en los puntos de negociación.
Fue el pasado mayo del presente año que la industria cinematográfica y audiovisual en Estados Unidos se pronunció a los acuerdos injustos y desproporcionados en cuanto a salarios por parte de las productoras. A partir de esto, el Sindicato de Actores de Cine-Federación Estadounidense de Artistas de Radio y Televisión (SAG-AFTRA), manifestaron una doble huelga, provocando que Hollywood entre a una nueva crisis que apuntaba a complicar el futuro inmediato del entretenimiento parando cualquier promoción, rodaje, guiones y todo referente a la producción de títulos.
