Miguel Ángel Mora Marrufo, quien el próximo lunes 18 de septiembre culmina su gestión como presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), cargo que ostentó desde septiembre de 2019, define que su sello frente al organismo fue defender los derechos de los menores y las mujeres.
Le tocó transitar por una gestión sui generis, al ser el único ombudsman que caminó con tres titulares del Poder Ejecutivo: el último trimestre del panista Francisco Vega de Lamadrid, el ahora petista Jaime Bonilla y la morenista Marina del Pila Ávila Olmeda, lo que implicó proteger al organismo de confrontaciones políticas que a la fecha se siguen dando.
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Los desafíos llegaron a los seis meses de su encargo, cuando afrontó la pandemia de COVID-19, que además de implementar estrategias, le costó una disminución en el presupuesto por 5 millones de pesos, pasando de 39 a 34 millones de pesos.
Enfatizó que el organismo mínimo debe tener un presupuesto de entre 70 y 80 millones de pesos. Aunque recibió críticas cuando no cabildeó un incremento en el recurso, actualmente tiene un presupuesto de 48 millones de pesos.
En su encargo emitió 31 recomendaciones; sin embargo, de 2018 a la fecha hay por lo menos 25 que tienen por debajo del 50% del cumplimiento, por lo que será el primer ombudsman en emitir una notificación al Congreso para que se llamen a cuentas a las dependencias incumplidas.
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Miguel Mora fue tajante al señalar que los posicionamientos del organismo pueden incidir directamente en la justicia: “No son llamados a misa”.
Dijo irse contento de la CEDH a la que perteneció en los últimos 15 años, ya que “se asentaron precedentes históricos”, y aconsejó a su sucesor, Jorge Álvaro Ochoa Montaño, ver por la autonomía constitucional del organismo, “que no se permita jamás que un Poder intervenga en las decisiones de la CEDH”.
A su vez, exhortó a tener un vínculo cercano con la sociedad civil, las víctimas, la academia y los medios de comunicación.
Mora Marrufo, de 38 años de edad, dice no ser afín a partido político alguno, y aunque no ha llegado ninguna invitación, “tampoco estoy negando a ello”. Hay algunas propuestas sobre la mesa, sobre todo en la Secretaría de Gobernación.
— Durante su gestión transitó con tres gobernadores y una pandemia, ¿cuál es su balance?
“A la Comisión la tuvimos que proteger en una transición política muy compleja, donde hubo situaciones de confrontación política. Lo más importante era cuidar la esencia y naturaleza de la institución, llegaron muchos asuntos al organismo que tenían justamente una connotación política, cuando no está pensado para eso, sino para atención de grupos de atención prioritaria. Mientras que con COVID se tuvo que hacer una serie de estrategias y redireccionar el organismo, a pesar de este contexto pudimos incidir en distintos temas que hoy todavía son parte de la agenda prioritaria del Estado, como es la Alerta de Violencia de Género, la materialización de la seguridad social de las policías.
“Se hicieron recomendaciones históricas y sin precedentes. Hay que recalcar que las quejas que siguen llegando a la institución responden a deficiencias estructurales de los distintos sistemas de protección a los Derechos Humanos, como el sistema penitenciario, el educativo, el de salud y el Sistema DIF. En el sistema educativo, hay cuatro recomendaciones que acreditan a más de 25 víctimas de abusos sexual infantil, se lograron procedimientos que culminaron en una privación de la libertad de maestros, que gracias a estos posicionamientos, están procesados, incluido el caso del conserje de Rosarito que violentó sexualmente a más de seis niñas y que la fiscalía tenía una orden de aprehensión que no había cumplimentado, porque supuestamente no estaba localizable el victimario.
“Cuando sacamos la recomendación a los dos meses se da la captura, esto incide en uno de los estigmas que tiene todavía el sistema de Derechos Humanos, que las recomendaciones son llamados a misa o que no tienen un impacto verdadero. Con esta recomendación les pudimos comprobar que pueden incidir directamente en la justicia de quienes han sido víctimas de violaciones a derechos humanos”, argumentó.
El sello que identificará su gestión fue el trabajo por la niñez y la adolescencia, al cual “dedicamos mucho tiempo, mucho esfuerzo, no solamente estos expedientes, sino al litigio estratégico ante el Sistema de Naciones Unidas, donde se evidenció la falta de protección a los menores”.
Otra causa es la violencia que tiene que ver con razón de género, específicamente el feminicidio, delito que la CEDH ha documentado desde 2018.
“Antes de que se emitiera la Alerta de Género, nosotros teníamos un par de años, incluso antes de que yo fuera titular, documentando esta situación y que se pudo traducir en la Recomendación Número 4 de 2022, es la muerte de Lucero Rubí en San Quintín, que tuvo impacto internacional; evidenciamos una serie de omisiones que, por cierto, esa recomendación no está siendo atendida. Estas recomendaciones son trascendentales porque es la primera vez que el organismo se posiciona en estos temas”.
Señaló que se va contento, pero preocupado porque los indicadores están a la luz del día para prevenir, contener y erradicar la violencia contra las mujeres, por lo que hay que dar cumplimiento a las 39 medidas de la alerta. Hay avances, pero cuando se contrastan los indicadores, “seguimos en una media de alrededor de 300 muertes violentas de mujeres en Baja California, desde 2018”.
El presidente de la CEDH refirió que sigue habiendo una resistencia por parte de la Fiscalía General del Estado para tipificar el delito de feminicidio, “cualquier muerte violenta de mujer tiene que ser tipificada como feminicidio, si el protocolo te da que los causales que no son en razón de género, pues reclasificas, pero lo están haciendo al revés”, observó.
Otras deficiencias que se evidenciaron durante su presidencia se dieron en el sistema educativo, sistema penitenciario y DIF:
“Documentamos no sólo violencia entre los alumnos, sino de la agresión que hay de las autoridades educativas hacia los adolescentes, como fueron los llamados cuartos de reflexión. También se señalaron deficiencias en los albergues temporales de DIF, donde la niñez y adolescencia manifestaron malos tratos, falta de integración familiar, condiciones de dignidad, fugas. Todo eso quedó plasmado en la Recomendación 6 de 2023, conforme íbamos avanzado, iban llegando más casos y no pudimos concretar en la investigación, igual que el sistema penitenciario; quien quiera resolver esa problemática tendría que echarse un clavado, que quede claro que no sólo es una señalización y una crítica, sino es la incidencia para resolver lo que sucede. Así entiendo yo el sistema de Derechos Humanos”.
El titular saliente de la CEDH bajacaliforniana dio a conocer que el organismo analizó más de 70 sentencias, detectando muchos procedimientos abreviados, lo que significa que el imputado se declara culpable, implicando que los juzgadores no aborden el contexto de violencia de género.
“Debe haber un combate frontal y una reducción de la impunidad, más investigación con perspectiva de género y mucha sensibilidad para atender a las víctimas”, indicó Mora Marrufo.
LAS MÁS SEÑALADAS
Las dependencias más señaladas durante la gestión de Miguel Mora Marrufo en la CEDH han sido las policías, FGE, sistema penitenciario, así como el de salud y el educativo.
“El 10 por ciento de las quejas que recibimos tiene que ver con una detención arbitraria, con el uso indebido de la fuerza pública, por imputar indebidamente hechos, y algunos casos como tortura. Esta última semana emitimos tres recomendaciones contra la Policía Municipal de Tijuana, por torturas sexuales. No me gusta presumir estas cosas porque acreditan una gravedad profunda, pero lo hicimos desde la Recomendación 1 en 2021”, reveló.
En total se emitieron 31 recomendaciones y dos recomendaciones generales.
PENDIENTES: AUTONOMÍA FINANCIERA
“Fui muy celoso de la autonomía constitucional de la institución, incluso hubo quien me criticó porque no hice los cabildeos profundos para fortalecer el presupuesto, porque sabía que esa medida de exigir, podía venir las peticiones de vuelta. Preferí celosamente con lo que teníamos proteger a la institución, debo reconocer que en este tiempo jamás hubo alguna intervención de esta institución para que me callara, dejara de posicionarme, fue lo que más protegí del organismo: la autonomía de la institución te da libertad de alzar la voz, ser celosos de nuestros posicionamientos”, declaró Mora Marrufo.
VISITADORES
“Tenemos visitadores con más de 100 expedientes en integración y es uno de los retos que nos posicionó más rápido, una autocrítica que hago con toda responsabilidad. La recomendación de Educación nos tomó como dos años posicionarnos y tiene que haber un fortalecimiento del presupuesto y una apertura de distintos programas”.
La CEDH cuenta con más de 120 personas en todo el Estado. Aproximadamente el 50% están destinados al área sustantiva y el otro 50% son visitadores.
“Recibí el organismo con 4 mil expedientes en integración, en 2022 lo abatimos casi 90 por ciento. Voy a entregar una gestión con menos de mil 500 expedientes en integración”, dijo el ombudsman.
TRES ADMINISTRACIONES
“En algún momento llegamos a tener 15 expedientes de ex candidatos contra gobernantes, de síndicos contra presidentes municipales. Súbete al tema de los cinco años, al de la fiscalía, al del agua. Lo que más traté de proteger fue al organismo, nos quisieron agarrar como costal y no lo permití. La institución no está pensada ni hecha para eso, está pensada para proteger los grupos de atención prioritaria, y cuando no te subes a ese barco, tienes toda la legitimidad para solicitar la alerta de violencia de género, para decir que a Lucero Rubí la mató el Estado, para decir que a los niños y las niñas los están matando en nuestro país, para decir que el Sistema Educativo tiene retos, que al DIF hay que fortalecerlo. Cuando no se compromete uno con una agenda política, tiene toda la autonomía de manifestar lo que verdaderamente es la agenda de la CEDH”, declaró el ombudsman saliente.
15 AÑOS EN LA CEDH
Después de formar parte de la CEDH por 15 años, Miguel Mora Marrufo tiene algunas invitaciones de carácter nacional, de la academia y de la iniciativa privada que se encuentra evaluando.
“Lo único que sé hacer es defender Derechos Humanos. Viene un contexto complejo de transición política. También viene el cambio en la CNDH, está acéfala la Comisión Nacional de Búsqueda; le debo a mis hijos mucho. El perfil de Derechos Humanos es y será uno de los más cotizados en la administración pública, estoy convencido y presumo que el perfil de Derechos Humanos es la solución a mucho de los males que tenemos. Quien tenga un perfil de Derecho humanista pueda darle solución a un montón de broncas que tenemos, porque conoce las entrañas, los fenómenos de las problemáticas, porque vas a las causas y no las consecuencias, y tienes un atractivo que es un mandato constitucional”, consideró.
NUEVO PRESIDENTE
El lunes 18 de septiembre, Jorge Álvaro Montaño tomará protesta como presidente de la CEDH, por lo que Miguel Mora Marrufo aconsejó ver por la autonomía constitucional del organismo “para que no se permita jamás que un Poder intervenga en las decisiones de la Comisión, además tener un vínculo cercano con la sociedad civil, las víctimas, la academia y los medios de comunicación.
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“Jorge es parte de mi equipo, estamos en diálogo constante. Fue secretario ejecutivo de toda mi gestión, me voy contento por mi equipo, hay gente muy valiosa. Se asentaron precedentes históricos, se brindaron cursos de capacitación, se firmaron convenios de colaboración, se dictaron recomendaciones donde se acreditaron más víctimas: en DIF fueron 57, el Sistema Educativo 25 niños, en Sistema Penitenciario, cientos de víctimas. Estoy seguro que estas recomendaciones tendrán un impacto en el futuro para que disminuyan los indicadores, el sistema tiene que ser entendido sin tiempo de caducidad, es un sistema extraordinario que su chamba es señalar las deficiencias de las autoridades; ojalá desaparezca esta institución”, puntualizó Mora
