Los nuevos libros de texto gratuitos para los tres grados de secundarias generales y técnicas llegarán a Baja California a partir del 21 de agosto, a siete días de comenzar el ciclo escolar 2023-2024. Entretanto, una parte de los libros de primero y segundo grado de telesecundaria ya se encontraban en la entidad al cierre de edición, 9 de agosto de 2023.
El secretario de Educación, Gerardo Solís Benavides, informó que se recibieron un millón 958 mil libros de texto para preescolar y primaria. Del total de libros de preescolar se distribuyeron 92.3% y está cubierta la matrícula.
En Primaria, los libros de primero a cuarto grado llegaron en su totalidad, y más de 91% de fue distribuido. Mientras que los libros de quinto y sexto grado serán entregados en próximos días.
El funcionario reiteró que el gobierno estatal se ha pronunciado por apoyar la instrumentación de los libros de texto que es la política nacional, de modo que el próximo 28 de agosto estos contenidos estarán en las más de 2 mil 200 escuelas de educación básica, para ser entregados a más de 640 mil estudiantes, pues negó que se esté infringiendo la Ley.
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Incluso el miércoles 9 de agosto, la juez Tercero de Distrito en Materia Administrativa, Yadira Elizabeth Medina Alcántara, señaló que la Comisión Nacional de Libros de Texto (Conaliteg) y la SEP no han acreditado que los libros se realizaron conforme a los planes y programas educativos aprobados para el ciclo 2023-2024.
Señalamiento que evadió la secretaria de Educación federal en la conferencia vespertina de ese día. Desde Palacio Nacional reiteró que los programas sintéticos se publicarán antes del inicio del ciclo escolar, pero no aclaró por qué no han sido publicados, pese a ser interrogada al respecto.
Ante esta situación, autoridades de Chihuahua, Guanajuato, Coahuila, Yucatán, Colima, Jalisco y Nuevo León anunciaron que no distribuirán los nuevos libros de texto a las escuelas hasta que no sean publicados en el Diario Oficial de la Federación (DOF), como lo establece la Ley General de Educación y/o se resuelva el amparo de la UNPF.
El Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, anunció que en esos estados planteará que la gente sea quien decida mediante consultas populares. Por otro lado, el Consejo Coordinador Empresarial se sumó a la demanda de que sean revisados los libros de texto conforme al marco legal vigente. El material educativo “promueve, sin razón, la violencia y animadversión en contra de las empresas y empresarios que operan en el marco de la Ley”.
RECONOCEN REZAGO EDUCATIVO EN BC
Representantes de la Coalición para la Participación Social en la Educación, AC (Copase), la UNPF Capítulo Baja California y la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) hicieron un “llamado enérgico” a la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda a que respete la Ley, en referencia a la suspensión otorgada a la UNPF a nivel federal, y no distribuir el material educativo.
Lamentaron la postura de la funcionaria, pues consideraron que los contenidos están “plagados de errores e imprecisiones” y tienen un sesgo ideológico “en detrimento de los conocimientos técnicos y científicos necesarios”, lo cual impactará negativamente en el mercado laboral y en la movilidad social.
El presidente de Copase, Alfredo Postlethwaite Duhagón, dijo que antes de la pandemia de COVID-19, 30% de los niños en Baja California que egresaban de Primaria no debieron hacerlo, al no tener los conocimientos básicos. En Secundaria el porcentaje llegaba a 40.
Anualmente, 29 mil jóvenes entre 15 y 18 años, desertan de la Preparatoria debido a que “arrastran” deficiencias “muy graves” de la educación básica y el rezago será mayor con el nuevo plan de la SEP.
El secretario de Educación atribuyó las declaraciones de los dirigentes de Coparmex y Copase a un asunto “meramente político”, y negó que la dependencia que encabeza haya sido notificada sobre algún juicio de amparo.
No obstante, reconoció el rezago educativo. El modelo educativo de los últimos años “no ha funcionado”, ya que ni México ni BC tienen los mejores niveles. “Los escenarios de evaluación que hemos tenido siempre han arrojado que 7 de cada 10 niños no aprenden matemáticas, 6 de cada 10 no aprenden comprensión lectora. Es una situación que te pone en un escenario que tienes que modificar, y las grandes modificaciones se están dando a través de capacitar a los maestros, aprovechar su autonomía curricular, fortalecer esa parte humana”, mencionó el funcionario, sin precisar cuánto rezago educativo se reducirá con los nuevos libros.
INSPECTORES VIGILARÁN QUE SE USEN NUEVOS LIBROS
El secretario de Educación, Gerardo Solís Benavides, aseguró que las escuelas privadas están obligadas a utilizar los libros de texto oficiales y hay escenarios para supervisar que cumplan con la política educativa.
“Todas las escuelas son públicas porque tienen un registro oficial, también las privadas. Al momento que tú le das un Registro de Validez Oficial es pública. Que tenga participación privada, sus terrenos, sus escuelas, es otro escenario, por lo que ellos cobran una colegiatura. Ellos están sujetos a reglamentos, consejos técnicos escolares, supervisores”, reveló el funcionario.
Por su parte, la Asociación de Escuelas Privadas de Tijuana indicó a ZETA que estaba revisando el material, pero no podía dar una opinión hasta no ser publicado el programa de estudios.
IDEALIZAN COMUNIDAD
“Son libros pobres, para construir una educación pobre, que le va a tocar a los pobres. Son libros que en ese sentido dejan a los pobres al último”, afirmó Gibrán Ramírez Reyes, especialista en política y administración pública.
Los nuevos materiales para Primaria y Secundaria debilitan la enseñanza del pensamiento lógico matemático y la lectoescritura. Sin estas habilidades aumentará la diferencia entre la escuela pública y privada. Incluso, incrementará la desigualdad al interior de la escuela pública, ya que habrá estudiantes con recursos intelectuales o materiales y quienes no, lo cual dependerá mucho de la configuración de las familias.
El 8 de agosto, el director de Materiales Educativos de la SEP, Marx Arriaga Navarro, argumentó que en los nuevos libros “se incluyen las matemáticas de manera práctica”, a la vez de minimizar los errores detectados en los materiales, al considerarlos “áreas de oportunidad”, aunque admitió 20 erratas. Cantidad menor a los 117 errores registrados cuando Emilio Chuayffet Chemor (2012-2015) fue secretario de Educación, en la administración de Enrique Peña Nieto.
En opinión de Ramírez Reyes, Marx Arriaga “aprovecha los señalamientos de descuido más evidente para no contestar a las críticas de fondo” que se centran en que los nuevos libros tienen problemas pedagógicos de secuencia didáctica y pertinencia con los programas educativos.
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El principal problema de los libros es la secuencia didáctica, ya que su contenido está organizado de una manera enciclopédica y la SEP supone una formación de los padres, y que los alumnos tendrán condiciones materiales, con internet.
En los libros de Secundaria se agudiza este problema: “Son materiales mal redactados y, para un lector mínimamente preparatoriano, y en muchos casos para un lector universitario y con mucha jerga especializada”. Los nuevos libros de texto “parten de una concepción romantizada e irreal de lo comunitario”, explicó Gibrán Ramírez.
En su opinión, en el libro para maestros se observa “mucho más claramente el rollo ideológico”, y afirmó no estar en contra de que se aborden las guerrillas en los libros, pero sí de que se cuente “mal la historia y de eso que han llamado democracia”.
Y remató:
SNTE, OFICIALISTA
A decir de Marx Arriaga Navarro, de febrero a marzo de 2022, un millón 35 mil 121 maestros que participaron en 32 asambleas a nivel nacional fueron consultados sobre el proceso de elaboración de los libros. De estos, mil 998 docentes -que fueron capacitados- elaboraron los materiales educativos. Mientras que hubo más de 900 revisiones, todas de personal de dependencias del Gobierno Federal.
Un día después, López Obrador presumió el apoyo del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) a los libros de texto. Vía comunicado, la organización magisterial estableció que el debate en torno a los libros de texto crece “porque hay sectores de opinión, grupos políticos y facciones ideológicas que pretenden usar la coyuntura para atacar al Gobierno Federal y posicionarse con miras a las próxima elecciones”.
Para el politólogo Gibrán Ramírez Reyes, el apoyo del SNTE no sorprende, pues dicho sindicato “siempre ha sido gobernista” y actualmente la mayor parte de su estructura y sus dirigentes operan para Morena en los diversos estados de la República Mexicana.