Hablar de Milton Emilio Castellanos Gout no puede comprenderse sin la imagen de su padre, el ex gobernador, a quien el priismo de Baja California considera el mandatario que trasformó al Estado.
Aun así, el político, académico, escritor y erudito en materia de derecho, era muy diferente y tejió su propia historia, llegando a ocupar varios cargos públicos, hasta que dirigió la Presidencia Municipal de Mexicali.
El estudioso del Derecho vivió un escenario completamente diferente a su padre: mientras Castellanos Everardo contaba con la confianza y amistad del Presidente Luis Echeverría Álvarez, lo cual le abrió grandes puertas para inversión en infraestructura en la entidad, Castellanos Gout tuvo que gobernar con una pesada losa panista llamada Ernesto Ruffo Apple, convirtiéndose en el primer alcalde priista (1989-1992) gobernado por el PAN.
Anécdotas referidas por conocidos y correligionarios recuerdan que durante su mandato era común caminar hacia la oficina de Presidencia en el Ayuntamiento de Mexicali y verlo desde la distancia.
Milton escribía en su oficina o sostenía reuniones de trabajo, pero en todos los casos presumía una política de “puertas abiertas”: no como un argumento demagógico, sino en un sentido literal, en el que cualquier persona podía ingresar o verlo trabajar desde afuera. Esto no ocurre hoy en día, dado que se colocaron tres puertas y una antesala que se debe cruzar para alcanzar al alcalde en turno.
Su padre fue quien erigió las instalaciones del Centro Cívico de Mexicali, para centralizar la sede de los Poderes del Estado; de manera paralela, cedió las oficinas de gobierno a la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) para que ahí fuera colocada la Rectoría de la Máxima Casa de Estudios.
Por ello, era natural que los pasajes construidos en el mandato de su padre, fueran recorridos por Castellanos Gout, el cual siguió sus pasos y se enarboló con la bandera tricolor para participar en política y la administración pública. Castellanos Gout no fue disciplinado, como reza el manifiesto priista; por el contrario, abandonó el partido en medio de las turbulencias políticas del PRI y el parteaguas del salinismo, con el que discrepaba (al igual que su padre).
Pese a nacer en una familia favorecida, su visión estaba alejada del furor tecnócrata que se apoderó del partido hegemónico en esa época; eran considerados el “ala izquierda” del tricolor.
Su gobierno se caracterizó por endurecer la política sancionatoria hacia los ciudadanos, con el objetivo de hacer cumplir los reglamentos de limpieza y ordenamiento, bajo el argumento de que todos debían hacerse responsables de su entorno. Policías e inspectores tenían la instrucción de ser rígidos y de emitir multas a quienes incumplían, lo que provocó el mote de “Multón” Castellanos.
El apodo ideado por la oposición -el PAN- lo persiguió durante sus tres años de gobierno, pues afirmaban que dichas medidas afectaban a los que menos tienen. Lejos de sucumbir a las críticas, Castellanos Gout promovió la campaña al grado de crear una historieta llamada “Súper Multón”, publicada de manera habitual en el periódico La Voz de la Frontera, donde compraba espacio publicitario para promover al personaje y sus “hazañas”.
Originario de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, pero radicado en Mexicali desde el año 1954, cumplió sus estudios en las históricas escuelas Leona Vicario y Secundaria 18, pues ambas se ubicaban cerca de su domicilio localizado sobre la calle Madero, en la Primera Sección de Mexicali, donde comúnmente nacen los alcaldes de la ciudad. Tanto la preparatoria como la universidad las cursó en Sonora.
El mismo año en que se graduó de la escuela de derecho en la UNISON, su padre fue nombrado gobernador constitucional de Baja California, en los años 70. Así, sin más, se convirtió en el hijo del mandatario estatal, justo cuando empezaba su carrera como litigante en Baja California.
Su experiencia en la administración pública fue nutrida, pues además de ser presidente municipal, ocupó una diputación local por el PRI. También fue procurador de la Defensa del Menor, un proyecto originado por él y su madre; de manera anecdótica se dice que le presentaron al Presidente Echeverría -amigo de su padre- como parte de un plan estratégico, que finalmente fue replicado en otras entidades del país.
También fue director de Issstecali -institución de la que posteriormente fue crítico- y encabezó la Oficialía Mayor del Poder Ejecutivo, en los gobiernos priistas. Empero, también fue simpatizante del PRD y candidato a la Gubernatura de Baja California por el naciente partido Convergencia, donde perdió abrumadoramente pese a su prolongada carrera política.
En esa segunda contienda focalizó su campaña hacia la basura generada por la propaganda electoral, una posición poco comprendida y analizada en el marco del fin del milenio.
Tras retirarse de la política de forma activa en el año 2000, Milton Castellanos Gout, caminó por los senderos de la academia; hizo una maestría en la Universidad Iberoamericana y posteriormente se hermanó de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), donde obtuvo becas que le permitieron estudiar fuera del país.
Fue reconocido como Maestro en Derecho con Mención Honorífica y reconocimiento al Mérito Escolar, por la UABC (2003), con una especialidad en la Universidad de Castilla-La Mancha, con un título de posgrado en Derecho Constitucional (2006).
Su gran carrera académica se extendió hasta el año 2016, al concluir los estudios de posgrado relacionados con el derecho constitucional; Argentina, Italia y España, fueron algunos de los países donde se especializó.
Durante este tiempo impartió clases en la Facultad de Derecho y en otras instituciones a nivel nacional como profesor invitado.
Como escritor publicó el libro Del Estado de Derecho al Estado de Justicia, en 2004 por editorial Porrúa; además de participar en la elaboración del texto “La evolución del Derecho en BC”.
En su participación refiere la importancia del municipalismo, donde, incluso en sus últimas apariciones públicas, encabezó conferencias de prensa donde promovía la municipalización del servicio de agua, como una necesidad y mandato constitucional.
Milton Emilio Castellanos Gout falleció el 28 de julio a las 9:15 horas, debido a problemas de salud generados por un problema cardiovascular que padecía desde hace tiempo, y que había diezmado su condición física. Su padre murió a los 91 años.
Tras su deceso, diversos sectores políticos -principalmente- lamentaron la pérdida.
“Con gran pesar y profunda tristeza, nos unimos a la dolorosa partida del señor Milton Castellanos Gout, quien fuera un líder ejemplar y un valioso miembro de nuestra comunidad”, refirió Guadalupe Gutiérrez Fregozo, presidenta estatal del PRI, quien agregó que “Con el corazón en luto, recordamos y honramos la vida y el legado del ex presidente municipal de Mexicali; un hombre que dedicó su vida al servicio público y a la mejora constante de nuestro amado municipio”.
Al pésame se sumó la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, quien recordó sus charlas relacionadas con la administración municipal; el ex alcalde panista, Gustavo Sánchez Vázquez, quien presumió ser su amigo personal, además de reconocerlo como catedrático de la máxima casa de estudios.
El pasado 1 de agosto, el Congreso del Estado dedicó un minuto de silencio por la muerte del ex alcalde de Mexicali y diputado local, donde reconocieron su amplia trayectoria en el ámbito político, académico e intelectual.
Su familia, sus cuatro hijos y amigos adolecen su partida anticipada a los 75 años de edad. Descanse en paz.