Desde hace tres meses, maestros federales de educación básica protestaron por dejar de recibir su pago salarial; casi a la par, se unieron más de mil 200 docentes que tienen más de 30 años de servicio y que ya no quieren o pueden estar frente a un grupo. Sin embargo, la Secretaría de Educación afirmó que no cederá a las presiones del Magisterio.
“Yo entré en octubre -2022- al sistema educativo y en abril -2023- yo cumplí mis seis meses más uno; ahí es cuando me hicieron el cambio de código y es donde me cortaron mi pago. Entonces yo no he recibido mi pago desde el 30 de marzo… Ya fuimos al Sindicato -Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE sección 2)- y no nos está apoyando mucho”, comentó a ZETA Blanca, maestra de preescolar en el fraccionamiento Villa del Campo.
Con el mismo problema, hay otras dos docentes de base en el mismo prescolar, así como una más de un kínder en Villa del Álamo; para apoyarlas, padres de familia de ambos planteles bloquearon el acceso a las escuelas.
“Los padres de familia han visto cómo hemos batallados para que nos paguen, y han querido ser solidarios con nosotros, porque no hemos dejado de dar clases. Este lunes -19 de junio- llegué y ya lo tenían bloqueado, al parecer desde la mañana… nosotros igual tuvimos que estar ahí toda la jornada, para que no lo tomaran como falta”, afirmó una de las maestras, e informaron que a pesar de no tener el mismo fin, se unieron al Frente Estatal Magisterial porque no se sintieron apoyadas por su sindicato.
Los afectados son muchos, y han trabajado sin pago durante meses en escuelas federales, algunos desde octubre o noviembre de 2022. Tal es el caso del profesor Rogelio García Sánchez, secretario general de la delegación 003 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) sección 2, quien advirtió que ellos “no comen con el corazón por delante”, frase usada por el Gobierno del Estado para todos los programas de la administración.
Ante la evidente explotación de maestros trabajando sin sueldo, el secretario de Educación de Baja California, Gerardo Solís Benavides no ofreció una solución concreta y responsabilizó a los docentes.
Refirió que la figura del “6+1” ya no existe, aunque reconoció que hasta el 2019, si un maestro cubría un interinato y cumplía con los requisitos, podía obtener una basificación, y hay algunos docentes que aún se quieren regir por esa medida.
El titular de Educación invitó a los maestros que estén con este esquema, a acercarse a la Secretaría y buscar alternativas; de lo contrario, continuarán en la misma situación.
Docentes enfermos con más de 70 años, y no los sacan del salón
El pasado 20 de junio, un grupo de maestros jubilados del Frente Estatal Magisterial se manifestó en las instalaciones del Sistema Educativo en Tijuana, para que se cumplan los acuerdos de la minuta celebrada el 12 de mayo.
Rigoberto Castillo García, coordinador estatal del Frente, dijo a ZETA que tienen en lista, al menos, a cuatro maestros con enfermedades de salud crónicas y que no los quieren quitar del salón de clases.
Recordó que el pasado 8 de mayo hicieron un plantón en el Centro Cívico de Mexicali, y lograron llamar la atención del Presidente Andrés Manuel López Obrador, quien afirmó que ya estaba enterado de la situación y enviaría al secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, a arreglar el problema.
Tras su visita, llegaron a un acuerdo con la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, y el secretario de Educación, Gerardo Solís Benavides, en el que se comprometieron a tramitar 100 jubilaciones por mes de los mil 285 maestros que están en espera, y por mientras, “liberarían” a los docentes de las aulas; lo primero sí lo están cumpliendo, pero lo otro no, dijo Castillo García.
“Nos están haciendo trabajar en contra de nuestra voluntad, y no se vale que un maestro que ya tiene 31, 34 años… incluso tenemos casos de maestros que tienen más de 41 años de servicio; entonces no es posible que transcurra tanto tiempo y que el gobierno del Estado no cumpla”, dijo.
Tal es el caso del profesor Rafael Almanza, de 74 años de edad y 41 de servicio, quien ahora se limita a dar clases de forma virtual, pues ya no puede con la carga de estar frente a un grupo.
El coordinador del Frente Estatal también mencionó el caso de un maestro con cáncer terminal, al cual le piden que se pensione en lugar de darle su jubilación, a sabiendas que recibirá menos dinero del que le corresponde, a pesar de su enfermedad y de que ya cumplió con más de 30 años de carrera.
La noche del 4 de julio, Catalino Zavala Márquez, secretario de Gobierno del Estado, se reunió con los maestros protestantes y se comprometió a realizar una mesa de trabajo el lunes 10 de julio, con el fin de negociar las liberaciones; sin embargo, los docentes advirtieron que continuarán con el plantón para garantizar que se cumplan los acuerdos. De no hacerlo, no regresarán a las aulas en agosto.
No nos vamos a dejar presionar: Solís Benavides
Al respecto, Gerardo Solís Benavides, secretario de Educación, dijo tajante en entrevista con este Semanario, que el Gobierno del Estado no se dejará presionar por los maestros inconformes, pues están cumpliendo con lo acordado.
“Lo que quieren es no regresar, y eso no podemos permitirlo porque no está en mis facultades decirle a esos mil 200 maestros ‘ya no regreses’, se tienen que esperar a que en noviembre o diciembre les llegue su oficio”.
“No existe la palabra ‘liberado’. O eres maestro, o eres jubilado, o eres pensionado; y la pensión es por una situación médica… De estos mil 200 maestros, hay algunos que tienen situaciones médicas, pero no se quieren pensionar, porque si se pensionan por situación médica ellos no reciben lo que quieren recibir si se jubilan”, precisó.
Solís Benavides puntualizó que se está cumpliendo con lo de la minuta firmada por la gobernadora, Educación, miembros del frente y por los representantes de los distintos sindicatos.
Asimismo, recalcó que en la minuta jamás se acordó “liberar” a los maestros de dar clases, sino que se analizaría cada caso en donde hubiera una situación médica: “Dicen ‘es que ya no veo’ o ‘es que no puedo caminar’; está bien, no regresen, pero yo no puedo decir que ya no regresen mil 285 maestros. Puedo decir que no regresen por una situación de humanidad, pero no todos”, finalizó.