Ocho décadas en la música popular estadounidense quedan plasmados con el legado del gran vocalista Tony Bennet, el cual se despidió de este plano la mañana de este viernes 21 de julio, a la edad 96 años, en la ciudad de Nueva York. La voz de uno de los mejores crooners del mundo se apagó, pero su legado será recordado gracias a su aportación en géneros como el jazz, baladas con títulos como “Blue Velvet” y “I Left My Heart In San Francisco”.
Nombrado el cantante popular más grande del mundo por su compañero Frank Sinatra, Bennet estuvo lidiando con la enfermedad del Alzheimer al ser diagnosticado en 2016. Su efervescencia musical se tornó arte hasta en 2021, año en el que dejó de grabar. Alrededor de 150 éxitos sonoros firman la carrera del cantante de salón que abogaban a una suave tonalidad, sumado a su soltura emocional arriba del escenario.
Elogiado comúnmente por la crítica, el intérprete fue premiado con 19 Premios Grammy, nombrado NEA Jazz Master y Kennedy Center Honoree por su inmaculado trabajo, consiguiendo más de 50 millones de discos vendidos en todo el mundo, agregando colaboraciones con artistas como Lady Gaga, Elton John, Gloria Estefan, Amy Winehouse, Alejandro Sanz, así como con los cantantes mexicanos, Thalía y el gran Vicente Fernández.
El artista de origen italiano hizo su debut a la temprana edad de 10 años, llegando a su etapa de apogeo artística en 1951 convertido en un crooner de melodías comerciales, siendo reconocido por su primer éxito “Because of you”, para después sumar los sencillos “Cold, cold heart”, “Stranger in Paradise” y “Blue Velvet”. Para 1957, Bennet conseguiría uno de sus mayores logros musicales con el lanzamiento del álbum “The Beat of My Heart”.
“En mi opinión, Tonny Bennet es el mejor cantante que hay en el negocio (del espectáculo). Me emociona cuando lo veo, me conmueve. Él es el cantante que ve lo que el compositor tenía en su mente, y posiblemente un poco más”, mencionaba Frank Sinatra, con quien constantemente era comparado.
Firmado por Columbia, Tonny desplegó memorables actuaciones que hasta la fecha siguen permeando en la música popular de Estados Unidos, así como en el resto del mundo. “Boulevard of Broken Dreams” tomó partida gracias a un sensual y melodioso espectáculo en 1952, a dicha pista se suman los temas “Rags to Riches” (1953), “Lost in the Stars” (1959), “The Party’s Over” (1959), “Once Upon a Time” (1962, “Dond’t Worry Bout Me” (1992), entre otras piezas musicales con las efectuaría legendarias presentaciones en vivo.
La elegancia, furor emocional y tenor brillante vivirán en la memoria de aquellos siguieron su música, a la que dedicó sus sobrados dotes interpretativos, siendo “Love for Sale” junto a Lady Gaga su último trabajo en la música. Que en paz descanse.
