Un hombre de 35 años fue asesinado a las seis de la tarde de este sábado ocho de abril en el Cañón del Padre de la ciudad de Tijuana. Servicios médicos acudieron a la escena del crimen para atender el llamado de emergencia pero solo dieron fe y reporte al Servicio Médico Forense (Semefo) sobre el deceso provocado por lesiones de arma de fuego en el cráneo de la víctima.
Extraoficialmente a la víctima se le reconoció como Elvis Ramírez de 36 años, que trabajaba como velador o cuidador de la zona. Su cuerpo sin vida se encontró a un costado de equipo de construcción resguardado en un predio industrial entre equipo de construcción como máquinas de volteo y retroexcavadoras.
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La policía atendió el reporte en el Cañón del Padre, cerca del Boulevard Terán Terán, de la delegación Centenario de la ciudad de Tijuana. En el reporte solo quedaron los indicios balísticos de las lesiones en la cabeza que le quitaron la vida a la joven víctima, sin que al momento haya señales de testigos sobre los datos generales del homicida.
En las primeras indagatorias, solo se reconoce que el ataque contra el velador fue directo, aunque descartar si fue asalto será trabajo de las investigaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE) en Baja California.
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