Consolidada como histrión de teatro, cine, y televisión, además de productora, Rebecca Anne Jones Fuentes, murió la madrugada de este 22 de marzo, y aunque no se han otorgado detalles sobre su fallecimiento, la famosa actriz mexicana fue diagnosticada con cáncer de ovario en etapa 3B (2019), por lo que recibió quimioterapias y cirugías; y apenas en 2022, su exesposo Alejandro Camacho aseguró que este mal regresó, volvió a ser internada por una grave deficiencia pulmonar que derivó en una neumonía, lo que la obligó a dejar las filmaciones de su último trabajo en la telenovela Cabo.
Semanas después de terapia intensiva durante diciembre y enero en los que se solicitó donadores de sangre, se reportó estable y con mejoras progresivas, sin embargo la actriz de “Cuna de Lobos”, “Para volver a amar”, quien se consolido como una de las intérpretes más importantes de la televisión mexicana, se fue con su energía a otro universo. Fue a través de la cuenta de la publirrelacionista Danna Vázquez que se informó la lamentable noticia: “Con profunda tristeza queremos informar el fallecimiento de nuestra querida y admirada Rebecca Anne Jones Fuentes…, se fue en paz y con un profundo agradecimiento a su público para el que trabajo toda su vida. En próximos días nos uniremos a despedirla tal como fue su deseo”, enfatiza el comunicado.
Luego de un retiro temporal de la actuación, Jones reapareció el pasado 7 de marzo en redes sociales con una fotografía a lado de compañeros de Televisa: “Como no pude asistir a la premier de ‘NADA QUE VER’, Jacobo Nazar @jaynazar y @videocine me organizaron mi propia premiere privada con palomitas y todo…, Créanme, 8 días en terapia intensiva, adelgazan a cualquiera, ya los recuperaré, pero esa es la menor de mis preocupaciones, ahora sólo se que cada día estoy más fuerte y sana”, y recalcó estar disfrutando “cada segundo de vida, probando manjares, momentos agridulces, aprendiendo de las cosas bellas y no tan bellas. Pensando cosas lindas”, refirió.
Cabe señalar que Jones ganó múltiples galardones por sus trabajos en la pantalla chica, como Premios TvyNovelas, primero como mejor villana por “El ángel caído” (1986), y mejor actriz protagonista por “Imperio de cristal” (1995), además del Premio El Heraldo de México como mejor actriz, por el mismo melodrama. A Rebecca Jones le sobrevive su hijo Maximiliano Camacho Jones, engendrado en su matrimonio con Alejandro Camacho.
Con una carrera consolidada, Jones pasó de Televisa a TV Azteca en 1999 para protagonizar “La vida en el espejo” a lado del fallecido Gonzalo Vega y Sasha Sokol, la cual fue comparada como la versión masculina de “Mirada de Mujer”, y fue hace 12 años cuando recibió el Galardón a los Grandes, por su trayectoria.