Israel Ávila, supuesto contador del narcotraficante guerrerense Mario Pineda Villa, alias “MP” o “Gordo Malo”, testificó, el 31 de enero de 2023, en la Sala 8D-Sur, de la Corte Federal del Distrito Este de Nueva York, en el juicio contra Genaro García Luna -ex titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) Federal, durante el Gobierno de Felipe Calderón Hinojosa-, asegurando que registró en sus libros de contabilidad más de 10 millones de dólares en supuestos pagos al entonces funcionario, a cambio de seguridad e información.
Mario Pineda Villa fue uno de los fundadores y ex líder de los Guerreros Unidos, además de hermano de María de los Ángeles Pineda Villa, esposa de José Luis Abarca Velázquez, ex alcalde de Iguala, Guerrero, acusado de ser uno de los autores intelectuales de la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, ocurrida el 26 de septiembre de 2014.
Ávila -de quien la Fiscalía neoyorquina pidió específicamente no hacer ni siquiera ilustraciones, para supuestamente proteger su identidad-, se describió como agente de bienes raíces y contador para líderes del narcotráfico. Detalló que compró propiedades en Santa Fe para narcotraficantes como Arturo y Héctor Beltrán Leyva, alias “El Barbas” y “El H”, respectivamente.
Vestido con un uniforme de presidiario verde claro, Ávila testificó que como contador de Pineda Villa, registraba los ingresos obtenidos del narcotráfico, así como los gastos y los pagos por los servicios de seguridad estatales, federales y municipales, además de los sueldos de los trabajadores o los alquileres de casas y almacenes.
“Le ayudé a hacer unas hojas de contabilidad en Excel”, en lugar de registrarlo todo en libros, con la intención de que pudieran llevar su contabilidad de una manera “más clara”, dijo Ávila ante el jurado presente en la Sala 8D-Sur de la Corte neoyorquina.
Cuestionado por la Fiscalía del Distrito Este de Nueva York, el contador precisó que esos pagos no eran directos a García Luna, sino que se hacían a través de otros narcotraficantes, entre los que citó a “El Barbas”, así como Jesús Reynaldo Zambada García -mejor conocido como “El Rey Zambada” y hermano de “El Mayo”-, además de Sergio Villarreal Barragán, alias “El Grande”, y Édgar Valdez Villarreal, “La Barbie”.
Ávila indicó que el mayor pago que registró para García Luna, fue de cinco millones de dólares, pero que también recuerda pagos de tres millones, un millón y de 1.8 mdd. Asimismo, dijo que en lugar de registrar el nombre del entonces funcionario federal, junto a los pagos se escribía “El Tartamudo” y “El Metralleta”, sobrenombres con los que algunos narcos se referían al entonces titular de la SSP.
Además, el contador recordó un pago de 500 mil dólares que supuestamente realizó en persona a Luis Ángel Cabeza de Vaca Rodríguez, entonces titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Morelos, que en los libros de cuentas se identificaba con el sobrenombre de “El de los Cuernos”, “El Cabeza” o “Vaca”.
Ávila también contó que tras la muerte de “MP” y de su hermano Alberto Pineda Villa, alias “El Borrado”, en 2009, trabajó, entre otros, para el Cártel de los Beltrán Leyva y para “El Grande”, además de que fue detenido durante un viaje a Texas, en 2012. Asimismo, el contador reconoció que realizó otras labores para sus jefes, como la participación en secuestros y torturas, por lo que fue condenado en una Corte Federal de Illinois, a 15 años de prisión y espera ser liberado a finales de 2025.
El contador también indicó que en un momento dado pensó que estaba trabajando para la Agencia Federal de Investigación (AFI) -dependiente de la extinta Procuraduría General de la República (PGR), que García Luna dirigió entre 2001 y hasta noviembre de 2006-, pero que tras un asesinato en un domilicio particular que rentó para los Pineda Villa, le preguntó a “El MP” si trabajaban para funcionario federal, a lo que el capo guerrerense le respondió que “él trabaja para nosotros” y para el Cártel de Sinaloa.
Ávila confirmó lo que “El Grande” dijo durante su testimonio, respecto al operativo contra “El Rey” Zambada García, en el sentido de que participaron miembros de los Beltrán Leyva, entre ellos Villarreal Barragán y los hermanos Pineda Villa, disfrazados de elementos de la AFI.
El contador también avaló lo que dijo Villarreal Barragán, de que los Beltrán Leyva temían que los agentes de las fuerzas de seguridad mexicanas quisieran “cambiar” al hermano de “El Mayo” por otro. Pero dio un dato adicional a lo que informó “El Grande”, que los Beltrán Leyva le pidieron contactar a un “periodista que trabajaba para el cártel”, para filtrar la noticia y la fotografía, que ellos tomaron para prevenirse, de “El Rey Zambada”, lo cual supuestamente hizo el comunicador, de quien se omitió el nombre.