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En pleno octubre, la “Jefa”
anda acá por la baja.
Vino en plan proselitista
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esta regente corcholata.
La elegante Catrina
supo vendría a Tijuana.
Dijo la Huesos:
“ni te quieren en los congresos”.
Apadrinada por Andrés Manuel,
también al tal Adán aquel
se vio por el norte
con Marina, comiendo postre.
Pero dice la Dientona:
“dejas la capital,
problemas, plantones, marchas”,
y ella acá a sus anchas.
La Chirriona piensa de Claudia:
“esta señora jefa de Gobierno,
su política es de infierno;
problemas, robos y muertes al día”.
“¿Y así quieres ser Presidenta?
Ya Morena se vició, la neta.
Lo mismo que hacía el PAN,
tanto como el PRI, ustedes lo imitan”.
“Te llevaré mejor al más allá”.
Doña Claudia enmudece y calla;
pela los ojos grandes
al ver la Muerte mucho antes.
Todos los morenistas lloran
por la muerte de Sheinbaum.
La Huesos ya la lleva al panteón
de la delegación Álvaro Obregón.
Grita la Muerte: “¡Mujer de Presidenta!
Lejos en México esa meta”.
La Claudia no llegaría a tal puesto,
por eso me la llevo al pozo, directo”.
* * *
Calavera a Marina del Pilar
Esta glamurosa señora, pues no está.
Anda allá por la Europa
buscando inversión extranjera,
pues cree vendrán a la frontera.
Pero la Huesos es astuta.
“Mira Marinita, no vayas lejos.
Quita trabas al empresario ya,
y verás, así llega moneda y trabajo”.
“AMLO y tu esposo
te tienen de títere en uso;
tú eres pura risa, foto y pasarela,
y el Estado crisis muerte y violencia”.
Le dice la Chirriona a la mandataria:
“Ya están llenas las funerarias.
Por tu ineptitud siguen las muertes,
así que te pepenaré porque no sirves”.
La del velo negro ya la lleva;
va temblando y asustada,
su tumba ya cava
para amortajarla en su cripta helada.
* * *
Calavera a Montserrat
Esta joven alcaldesa
va de acá a la mesa;
donde quiera se la pasa
aunque no les plazca.
El día de los incendios
el corazón de más le latió;
titubeó al hablar en público,
cuando a Tijuana en estado crítico vio.
Dijo le cobren la factura
a los malandros;
es su obligación dar la cara,
pero tuvo miedo a incendios y caos.
Va la edil al municipio,
pero la Huesos le pone trampa.
“¡Montse!, hoy llegará tu muerte,
te llevaré conmigo para siempre”.
Dice la del velo negro:
“No sabes ser alcaldesa;
ya pasó un año
y la ciudad sufre daños”.
“La alcaldesa no da una”,
dice la Flaca, “de mañana
te llevaré mejor a la tumba fría;
Tijuana merece gobierno y señoría”.
“¡Ay, mis hijos!”,
canta la Chirriona,
“estos del partido Morena
engaño, líos y mentiras dejan”.
La Catrina se lleva a la Montse,
pasó por el forense;
mejor la lleva al panteón trece.
Mortaja, solo y de epitafio carece.
* * *
Calavera a AMLO
Sale Andrés Manuel a su mañanera,
pero quien así lo dijera
es su última presentación
en público y para la nación.
Empieza a decir a los conservadores:
“Al pueblo dañaron y fueron traidores,
todo se robaron
y así por años gobernaron”.
Pero la Huesos está en Palacio Nacional;
mira, analiza, se hartó de Andrés Manuel,
Prometió erradicar la violencia,
ya van cuatro años y no se manifiesta.
Abrazos, no balazos, Manuelito,
eso no es mérito político;
es falta de productos de gallina, yeah,
el haber liberado a Ovidio en Sinaloa.
Gobiernan a la derecha
y el pueblo necesita ir de frente.
Se está muriendo la gente
con este gobierno indolente.
La Huesos ve que va de regreso
a su casa, al reposo;
la Parca ya lo caza a éste
para ponerlo frío e inerte.
Ha muerto AMLO Presidente.
Le lloran los del Bienestar,
no supo gobernar a la gente
y en el panteón debe terminar.
Leopoldo Durán Ramírez.
Tijuana, B.C.
