Carente de un plan integral socializado con grupos civiles y académicos, choferes y sin coordinación con el Ayuntamiento de Tijuana, la gobernadora Marina del Pilar Ávila impulsa reordenamiento del transporte público. La nueva estrategia se sumará a proyectos como el SITT que prometieron reordenar el transporte público, pero fracasaron
Para que el Corredor Agua Caliente inicie en marzo de 2023 “ya tendrían que estar presentando” el proyecto ejecutivo del BRT (Bus Rapid Transit) al gobierno municipal, indicó Obed Silva Sánchez, secretario de Movilidad de Tijuana, quien dudó que lleguen los camiones que circularán por la vialidad, pues hay déficit de unidades en el mercado.
Afirmó que aun cuando se tiene “una relación fluida cotidiana con IMOS (Instituto de Movilidad Sustentable)” y “comunicación instantánea” con su director, Jorge Alberto Gutiérrez Topete, el gobierno municipal desconoce éste y otras “ideas” anunciadas por el Estado para mejorar la movilidad, como parte del programa “Respira”
Ello, pese a que “se les ha solicitado en varias ocasiones que nos hagan parte de esos proyectos, a la fecha no se ha tenido respuesta”, aseguró. No obstante, “vemos con agrado que el gobierno del Estado esté planteando propuestas de solución en materia de transporte masivo. Coincidimos en que es favorable incentivarlo por encima de autos particulares”.
Rosa Sánchez Martínez, Presidenta de la Sociedad de Urbanismo de la Zona Metropolitana de Tijuana, A.C., consideró que “si las autoridades no trabajan de manera coordinada, de la mano, difícilmente vamos a poder ver materializados los esfuerzos de una sola parte”.
Si existe falta de coordinación entre Estado y municipio posiblemente “haga falta hacer a un lado otras cuestiones” y ver por el beneficio de Tijuana y del Estado. “No olvidemos que los Ayuntamientos tienen autonomía propia y la misma importancia que el Estado”.
Empero, en los proyectos como este corredor y el tren elevado eléctrico recientemente anunciados, el gobierno municipal no puede argüir desconocimiento, puesto que las modalidades planteadas se encuentran consideradas en el Programa Sectorial para la Movilidad “Plan Integral de Movilidad Urbana Sustentable de Tijuana” 2019-2040, publicado el 13 de septiembre de 2019 en el Periódico Oficial. Un documento público, que debería regir la movilidad de la metrópoli.
Respecto a la posibilidad de que el Corredor Agua Caliente tenga la misma suerte que el Sistema Integral de Transporte de Tijuana (SITT), o hubiese sido mejor echar a andar cabalmente éste antes del nuevo proyecto, la especialista indicó que “son dos proyectos completamente distintos, que pueden ser exitosos. La cantidad de población nos da para esas dos alternativas y posiblemente hasta más, solamente que sí debe quedar bien definida cuál es la ruta de acción de cada uno, porque si destinamos los mismos recursos para las dos estaríamos duplicando las acciones, los recursos y el resultado no sería tan exitoso”.
Incluso, el reordenamiento del Corredor Agua Caliente podría dar paso a que los transportistas que se reubiquen puedan tener una ruta alimentadora del SITT.
ESTADO PODRÍA INVERTIR 30 MDP
Jorge Alberto Gutiérrez Topete, director del Instituto de Movilidad Sustentable (IMOS), dijo que el proyecto fue presentado por la ruta de transporte masivo Verde y Crema. Contempla dar servicio a alrededor de 100 mil personas al día, en un recorrido de 16.6 kilómetros por el bulevar Agua Caliente.
Tendrá dos estaciones terminales (una en la calle Quinta en Zona Centro y la otra en el Centro de Salud de La Presa). Habrá cinco estaciones de transferencia donde cruzan bulevares perpendiculares, como el Fundadores, Cuauhtémoc Sur y Lázaro Cárdenas 5y10. En total serán 34 estaciones, aproximadamente.
En la mayoría de los casos se trata de paradas ya contempladas en el bulevar y requiere modificaciones geométricas de cordones y banquetas. “Todas son al nivel, no son grandes estructuras”, y no requieren una gran inversión, aseveró.
En el caso de las estaciones terminales “estamos viendo con el Ayuntamiento si va a ser necesario que ellos las construyan. Sabemos que hay dos concesiones otorgadas por el Ayuntamiento para paraderos vigentes. No sé, que el Ayuntamiento platicara con esas empresas. Son cosas que estamos observando. O nosotros hacer unos paraderos más simples, pagados por el gobierno del “Estado”, con una inversión de poco más de 30 millones de pesos, que “pudiera ser tan barata como poner unos postes con el logotipo de parada”, aseguró Gutiérrez Topete.
TARIFA PREFERENTE CON TARJETA; HASTA 20 MINUTOS TARDARÁ EN PASAR
La empresa Transporte Masivo Sustentable de Tijuana S.A. de C.V. -que opera Verde y Crema-, invertirá alrededor de 390 millones de pesos en 105 autobuses y la tecnología que permitirá un cobro con tarjeta de prepago, cuya tarifa preferencial tentativamente será de 14 pesos. Mientras que la tarifa en efectivo sería de hasta 20 pesos, recaudada en alcancía, por lo que el chofer ya no dará cambio.
A decir de Gutiérrez Topete, los camiones fueron pedidos “hace dos meses” y llegarán en marzo próximo. En una primera fase, circularán 70 camiones -con cámaras de vigilancia, contadores de personas, GPS y lector de tarjetas- para cerca de 100 pasajeros. Posteriormente, la flota crecerá a 100 vehículos circulando y el resto será de reserva. Del total de unidades, 20% va a tener piso bajo y adaptaciones para personas con discapacidad.
El proyecto contempla un servicio ordinario diario de 5:00 am a 11:00 pm. El tiempo del recorrido de la ruta por el carril derecho de la vialidad (que será preferente, pero no confinado) será de 40 minutos. En hora pico la frecuencia de los camiones será de 5 minutos, y en las horas valle (no pico) de hasta 20 minutos.
Le estamos pidiendo a Verde y Crema que diseñe una ruta nocturna, y rutas exprés en ciertos horarios y días. En las estaciones no habrá máquinas para adquirir las tarjetas o depositarles dinero, sino que la empresa concesionaria hará un convenio con farmacias y tiendas de conveniencia para que el usuario pueda hacer la recarga, aclaró.
La especialista en urbanismo, Rosa Sánchez Martínez, opinó que si hay las personas para que cada 5 minutos pase un camión, aunque no vaya al 100% de su capacidad, pero sí medio a lleno, sería un tiempo muy bueno.
“Lo que se me hace un poquito desplazado es el lapso de 20 minutos, porque si por alguna razón no te trasladas en hora pico -que es donde la mayor cantidad de personas se mueve- esperar 20 minutos podría orillar a que se tome alguna alternativa de transporte distinta”.
Consideró que debe haber un estudio que valide las 34 paradas contempladas en el proyecto. Lo que se ve es que “en cada esquina hay personas que quieren abordar transporte”. No obstante, es vital que haya un reordenamiento con rutas alimentadoras de transporte, reiteró.
Lizbeth Trujillo, usuaria frecuente de transporte público del bulevar Agua Caliente, calificó como un “servicio muy deficiente” el que brindan los taxis Rojo y Negro, “porque son muchos, pasan uno detrás de otro, y los conductores no respetan los semáforos. Manejan a exceso de velocidad, juegan carreritas y se pelean el pasaje”.
Se mostró a favor de que circulen camiones, porque caben más pasajeros, son más limpios y seguros, pero estuvo en desacuerdo con las paradas fijas. “Supongamos que quieres bajar una cuadra antes de la estación fija, no te va a quedar otra que bajarte en la estación fija y regresar caminando. No es muy agradable esa idea”.
Consideró que 20 minutos es mucho tiempo para esperar el camión, porque podría propiciar que se llegue tarde al destino. “Hay mucha gente que toma un segundo transporte y dejan de pasar a ciertas horas. A lo mejor si fueran cada 10 minutos podría funcionar (…) Ojalá el cambio en el transporte sea para bien, no que luego estemos batallando los ciudadanos”.
ROJO Y NEGRO ACUSA IMPOSICIÓN
Actualmente existen registrados (en papel) 800 permisos personales de la ruta Rojo y Negro, pero sólo 443 con vehículo circulando, según el IMOS. Estos 443 podrán incorporarse al proyecto, como socios de la empresa Transporte Masivo Sustentable de Tijuana S.A. de C.V. Recibirán 3 mil 800 pesos mensuales el primer año, con la “expectative” de que al sexto sean 9 mil pesos. Dichos recursos serán pagados mediante cuatro fideicomisos, para igual número de agrupaciones que actualmente concentran los permisos.
Además, podrán sumarse a una de las otras 19 rutas ya concesionadas a Verde y Crema en la ciudad, y que alimentarán el corredor. Con ello, en una gran parte del bulevar Agua Caliente sólo circularán los nuevos camiones y los de la red Violeta. Aunque en otros tramos seguirán transitando otras rutas que ya convergen, reconoció Gutiérrez Topete.
El pasado 4 de septiembre, aseguró que 55% de los transportistas “ya se acogieron al proyecto” y se están entablando pláticas con CTM con los otros dos grupos “que han estado un poquito rezagados”.
Es “totalmente falso”, declaró Joaquín Beltrán, secretario general de Taxi Rojo y Negro Círculo Blanco. Las agrupaciones (Rojo y Negro franjas blancas y Rojo y Negro Estrella Blanca) firmaron el documento del IMOS, pero son las agrupaciones con menos permisos.
A decir de Beltrán, no firmó el documento presentado por IMOS porque no conocen al 100% el proyecto, y al hacerlo renunciarían irrevocablemente a cualquier acto que defienda los intereses de los permisionarios. Además, la autoridad no permitió que los transportistas fueran asesorados legalmente, indicó Víctor Manuel Sánchez, secretario general de Taxis Rojo y Negro CTM.
“A raíz de que no quisimos adherirnos empezó el hostigamiento, empezaron con infracciones, a remolcar unidades”, acusaron ambos líderes transportistas. Denunciaron que la autoridad ha tenido una actitud amenazante e impositiva, que pretende “despojarlos” dándoles “planteamientos de palabra”, pero nada escrito.
Manifestaron su desacuerdo con el proyecto porque su permiso se convertiría en una acción de la empresa pero no les permitirá adquirir vehículos para el Corredor Agua Caliente, ni les concesionarán una nueva ruta, por lo que tendrán que rentarle las placas a Verde y Crema. “Por un lado me vas a dar 3 mil 800, y por el otro me quitarás eso o 5 mil pesos”.
Según Beltrán en otras ciudades, como Guadalajara, se han implantado proyectos similares. Después de tres años desaparecieron a los transportistas que estaban antes, “porque entre los pagos de camiones, nómina y mantenimiento, les decían a los socios que no había recursos”.
Los dirigentes consideraron que existe “corresponsabilidad” entre autoridades y transportistas en la calidad del servicio brindado actualmente. En la red alimentadora del Corredor “dicen que se realizarán acciones de semaforización, paradas exclusivas” y un carril semiconfinado para mayor velocidad y seguridad para los usuarios. “Ellos van a meter su empresa, con algún beneficio para alguien. Aquí sí ya están hablando de eso, por qué no antes, cuando nosotros prestamos el servicio”, cuestionó Sánchez.