Hundimientos en la carretera a San Felipe y la calzada de Río Nuevo, daños a vehículos y domicilios, e incluso un encharcamiento inusual de la Laguna Salada, es parte de lo que dejó a su paso la tormenta tropical “Kay” que este viernes 9 de septiembre, azotó a Baja California, generando intensas lluvias y caos en prácticamente todos los municipios.
Desde la madrugada del viernes inició la lluvia en Mexicali, causando ligeros problemas viales durante las primeras horas del día.
Sin embargo, la lluvia torrencial no se detuvo con el pasar de las horas y poco a poco los drenajes de las diversas vialidades comenzaron a sucumbir ante el desmedido flujo de agua.
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Las primeras alertas se generaron cuando los puentes y pasos a desnivel comenzaron a llenarse; el agua de la parte superior asemejaba cascadas que caían hasta la parte inferior de las vialidades, como en la glorieta a Lázaro Cárdenas, donde -como en prácticamente todos los distribuidores viales- se volvió imposible el tránsito.
La lluvia continuó en todo el municipio; en kilómetro 43, en el valle de Mexicali, se generaron apagones e inundaciones que afectaron el interior de las viviendas.
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Este mismo fenómeno ocurrido en varias comunidades de la Zona Oriente, como e Villa Verde, Villaflor, Bugambilias, pero también Independencia e Industrial, donde prácticamente se volvió imposible el flujo vehicular.
Dentro de los principales problemas se suscitó un socavón a la altura del kilómetro 80 de la carretera a San Felipe, y otro en la colonia Baja California, según reportaron vecinos.
Dos de los puntos más delicados en la zona urbana se encontraron en el Periférico Oriente, donde el agua provocó que vehículos quedaran atrapados; también en la calzada de Río Nuevo, en la zona de Agualeguas, se tuvo el mismo problema con vehículos particulares que tuvieron que ser rescatados por la propia ciudadanía.
Personal de la Secretaria de la Defensa Nacional (SEDENA) implementaron el plan DN-III, para atender la emergencia, principalmente en el valle de Mexicali.
Imágenes también captaron un flujo inusual de agua en la Laguna Salada, debido a las intensas lluvias, lo que generó que varias personas descendieran de sus automóviles para videograbar el fenómeno.
La gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, aseveró que hasta el momento hay saldo blanco. Sin embargo, los daños materiales se dieron prácticamente en todo el municipio.
El Ayuntamiento de Mexicali también habilitó los albergues de Ciudad Guadalupe Victoria, y del Delta; así como el Albergue Peregrino, el de la colonia Bellavista y la Casa de la Alegria.
Alrededor de 500 elementos de la CESPM y elementos de la Dirección de Bomberos, se encuentran trabajando en todo el municipio en busca de reducir el flujo de agua, mediante la atención a drenajes en las zonas periféricas de la ciudad
El pronóstico de lluvias continúa para los próximos días, por lo que se invita a que tomen precauciones.
