El percance ocurrió el 30 de julio, sin embargo, el perito presentó el reporte hasta el 12 de agosto; tanto el oficial como el ajustador le exigieron el pago en efectivo a Regino Galindo, sin revisar los autos ni presentar identificación alguna
Regino Galindo Lizardo denunció irregularidades en el peritaje de tránsito tras un accidente automovilístico ocurrido en el 30 de julio de 2022 sobre el bulevar El Rosario, en el fraccionamiento Santa Fe, en Tijuana.
Detalló que al circular sobre el mencionado bulevar a la altura de un conocido sobreruedas, presuntamente se impactó con una unidad conducida por una mujer de nombre Giovana Carolina Rodríguez Macías. Aunque el auto de la supuesta afectada no tuvo “ningún rasguño”, la mujer le exigía el pago de 12 mil pesos.
“El automóvil no tenía ningún daño. Sin embargo, la mujer metió una denuncia por daños en propiedad ajena, que de 12 mil pesos ha incrementado a 13 mil; pero el carro está intacto”, manifestó el señor Galindo.
“El carro que me tocó estaba parado enfrente, yo no supe si el carro se vino poquito para atrás o yo le di tantito al mío, pero se pegaron las defensas. Cuando me bajé a verificar la situación y pedir disculpas, se bajaron dos muchachas molestas y me dijeron: ‘esto te va a salir caro’”.
El ciudadano sospecha irregularidades en su caso, ya que el supuesto perito que atendió el accidente no entregó el reporte de los hechos hasta el 12 de agosto y no el 30 de julio, cuando ocurrió el incidente.
“Yo he estado dando vueltas a la Fiscalía General del Estado desde el día siguiente del accidente y a la de la Central Camionera, a ver si aparecían mis documentos para que me dieran la salida de mi carro, pero no había nada, sino hasta el 12 de este mes. El perito debió mediar la situación, pero en lugar de eso me exigió junto con ellas el pago de los supuestos daños”, comentó el señor Lizardo.
Según Regino, el oficial de tránsito junto a las mujeres con las que chocó, lo llevaron a un parque cercano a la estación de Bomberos de Santa Fe, en lugar de trasladarse a la delegación.
“Me llevaron ahí porque algo tenían planeado; y sí, le hablaron a las Grúas Castro para que se llevara mi carro al corralón como ‘garantía’, o eso dijo el oficial”, acusó el señor.
Otra irregularidad que mencionó Regino, es que el supuesto ajustador del seguro de la mujer, quien no traía ninguna identificación o logotipo distintivo de su empresa, le pidió en el momento el pago de 12 mil pesos en efectivo.
“El muchacho llegó y dijo ‘yo soy el ajustador, esto te va salir caro: son 12 mil pesos’, a lo que le pregunté: ‘¿cuáles daños?’. Él solo me respondió que tenía que cambiar la defensa y portaequipajes -del auto de la mujer-. Yo le dije al muchacho: ‘oye, si hay un daño tengo que pagarlo en algún lugar, que me hagan una estimación’, pero él me dijo: ‘no te preocupes, tú págame a mí ahorita en efectivo y te doy un recibo’”, relató el hombre.
Según información proporcionada por el Fiscal Regional de Tijuana, Edgar Mendoza Razo, el caso de Regino, cuyo número es el 0204-2022-22091/RAC, ya ha sido turnado al Sistema Estatal de Justicia Alternativa Penal (SEJAP) para que las partes involucradas lleguen a un acuerdo; de no ser así, el caso regresaría a la Fiscalía Regional, donde de haber datos que acrediten el hecho y la probable responsabilidad, se judicializará la carpeta ante el Juez de Control.
ZETA solicitó a la Secretaría de Seguridad Pública el reporte del accidente, pero éste no fue proporcionado debido a que el caso se encuentra en tutela de la Fiscalía del Estado y bajo investigación.
Cabe mencionar que fue el pasado 20 de mayo del presente año que la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana Municipal (SSPCM), informó sobre la nueva modalidad de extorsión, llamada montachoque, que consiste en que algunos conductores, al ir circulando, intempestivamente detienen la marcha para que el que va atrás les choque.
Una vez provocado el accidente, los “montachoques” acorralan a su víctima y le hacen creer que son los culpables, por lo que piden un arreglo monetario a su favor.