La noche del 13 de mayo, Alejandra Ayala subió al ring sin saber que sería la última ocasión que pelearía en su carrera.
La boxeadora de 33 años sufrió un derrame cerebral tras caer por nocaut en el décimo round ante Hannah Rankin, en una batalla de campeonato mundial disputada en Glasgow, Escocia. Ayala fue inducida en coma por diez días y estuvo hospitalizada por dos meses, en los que fue sometida a tres cirugías cerebrales.
Ahora, luego de tres meses, ha vuelto a su casa en Tijuana, donde se recupera satisfactoriamente.
“Estoy muy feliz por estar aquí, el doctor que me atendió en Glasgow me recomendó regresar al lugar donde estuviera más feliz, y aquí estoy, recuperándome. Gracias a Dios y a todos los que apoyan, mi familia, mis amigos del Boxeo, estamos bien”, confesó la pugilista.
“Los doctores me recomendaron que puedo hacer de todo, pero poco a poco, obviamente no puedo cargar peso, pero puedo caminar y, conforme pase el tiempo, aumentar la actividad. Sé que ya no podré pelear, pero mi vida es el Boxeo, es algo que amo, si puedo ser entrenadora o promotora, lo haré, mi intención es regresar al Box”, detalló Ayala, consciente de que no podrá volver a los encordados.
Cual ave fénix, Alejandra está recabando fondos para solventar sus terapias, por lo que cualquier donativo es bien recibido. Para mayor información, visitar la página de Facebook de Alejandra Ayala.