A los jornaleros indígenas de México
El municipio de San Quintín (SQ) tiene alrededor de 130 mil habitantes. Hoy es mayor la conciencia de los trabajadores del campo; solo se dialogó con el gobierno federal, mientras los empresarios permanecen ausentes en el acercamiento, pero con un plantío de 8 mil hectáreas de fresa, frambuesa y zarzamora con demandas de agua que sacrifican sin el menor respeto a la población trabajadora:
Sindicato Nacional Independiente de Obreros agrícolas. El PRD actuó como esquirol al crear un sindicato alterno que no tenía jornaleros, sino esquiroles, integrado de pequeños comerciantes y profesores. Ese fue el papel de Miguel Ángel Mancera. La empresa más fuerte que explota y ha secuestrado la producción del Valle de SQ es Driscoll’s (BerryMex); las empresas le cerraron la puerta a líderes, los despidieron para dejarlos sin estatus de trabajadores. El precio al menudeo de una caja de fresa es $50 dólares; equivale al salario de una semana de un jornalero.
Producción. Las jornadas de los trabajadores son de 12 horas sin prestaciones, con un salario integrado que implica que les deberían pagan todas las prestaciones que la ley obliga a los patronos. A los jornaleros les pagan desde 16 hasta 20 pesos por caja recolectada. Ellos la comercializan en $1000. La transnacional gana 50 veces a cada caja de producción. El salario de un jornalero mixteco en California es de al menos 16 mil pesos por semana, y producen lo mismo, agachados toda la jornada, dado que las plantas tienen una altura menor a un metro.
Trabajo infantil. Aún trabajan en los plantíos niños de 13 a 16 años (adolescentes); los más recientes son traídos de Puebla. La empresa BerryMex impone condiciones de monopsonio en compra a los rancheros y son únicos exportadores de estos productos; siguen usando -desde siempre- pesticidas que enferman la piel y los pulmones de los campesinos, fumigan desde aviones. Los jornaleros son 50% mujeres y 50% varones; las damas son más productivas, rápidas y finas en sus movimientos de corte.
Agua potable. El exceso de campos cultivos está ocasionando la carencia de agua para consumo humano: 8,000 hectáreas de cultivos causan sobreexplotación de mantos acuíferos, hay una ambición descontrolada sin límites de la ley. Existen pozos clandestinos en la cuenca del arroyo de Santo Domingo que desperdician agua. Este recurso vital está en manos de un monopolio agrícola. La Driscoll’s del Valle de SQ es la Constellation Brands que repudiaron y expulsaron en el Valle de Mexicali. La población solo tiene dos horas de agua mensuales, pero la Cespe les cobra por esa miseria $143.00 pesos; denuncian los colonos que los pozos ricos en mantos se los dan a los productores, los que se están secando a la Cespe. Una pipa cuesta $1,000 pesos; un tambo de 200 litros, $80 pesos.
Educación. El INEA en Colonia Vicente Guerrero es insuficiente para la atención a los adultos mayores analfabetos, que no son pocos. Siguen las violaciones tanto en el rancho de los Pinos como en el porfiriato. Esos espacios son campos convertidos en cárceles. La fundación de escuelas ha corrido por iniciativa de las comunidades con la construcción de aulas, producto de la autogestión, la organización propia de los pueblos originarios ante la ausencia del Estado. Reciben apoyos de las iglesias evangelistas norteamericanas, pero fundamentalmente es una inversión de trabajo de las comunidades para la educación de las nuevas generaciones bajo el esquema de Tequio y Fainá.
La creación de la universidad intercultural es un proyecto del gobierno federal en sociedad con el Gobierno del Estado: oferta educativa de ingeniería en innovación, ingeniería agroalimentaria. Está en proceso de construcción y actualmente funciona en una escuela primaria. Cada vez hay más hijos de jornaleros que son universitarios y están preparándose para los retos.
Salud. El personal de especialistas del Imss Bienestar es insuficiente (como los medicamentos); se requieren dermatólogos o especialistas de la piel, que se encuentran hasta Ensenada les falta un banco de sangre. Las empresas deben de generar a los trabajadores un pase para ser atendidos en el Imss; si en una emergencia no llevan más que su dolencia, no se atienden.
M.C. Héctor Ramón González Cuéllar es académico del Instituto Tecnológico de Tijuana.
Correo electrónico: profe.hector.itt@gmail.com