El miércoles 15 de junio, la Reserva Federal de Estados Unidos (FED, por sus siglas en inglés) anunció la decisión de elevar en 75 puntos base la tasa de interés de los fondos federales como medida para frenar el espiral inflacionario en el país vecino, que ha alcanzado máximos históricos no vistos desde hace 40 años, de acuerdo con el Departamento del Trabajo.
Esta medida hizo que el peso mexicano se recuperara 1.01%. Así, el tipo de cambio cerró la jornada en 20.4383 unidades por dólar, a diferencia de las 20.6371 unidades registradas el martes. Esto contrastó con la jornada volátil del jueves 16, en la que la divisa nacional primero cayó a su segundo peor nivel en mayo, para al final recuperar terreno una vez más.
“Evidentemente, el alza de 75 puntos de base de hoy es poco frecuente e importante. Un incremento de 50 puntos base o 75 puntos base es muy probable en próxima reunión”, dijo el presidente de la FED, Jerome Powell.
La casa de bolsa Valmex, analizó esta estrategia: “En nuestra opinión, el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) subirá la tasa en julio nuevamente en 75 puntos básicos, para llevarla a un rango entre 2.25% y 2.50%”.
Y agregaría: “Hacia adelante hay que recordar que el objetivo del Comité es controlar y disminuir la inflación hacia la meta de 2%, pero evitando que la economía estadounidense caiga en recesión, es decir, ser flexibles”.
Victoria Rodríguez Ceja, gobernadora del Banco de México (Banxico), aseguró que en la próxima reunión del organismo, a celebrarse el 23 de junio, se estudiará y discutirá el rumbo que tomó la FED.
“El anuncio acaba de salir, tendremos que incorporarlo al análisis que estará realizando toda la Junta de Gobierno en estos días, rumbo a la próxima decisión que tendremos la próxima semana; por supuesto será un elemento importante, pero no el único”, explicó durante la presentación del reporte de Estabilidad Financiera del mes en curso.
“Como hemos señalado, el Banxico y miembros de la Junta coincidimos todos en que el objetivo prioritario del Banco es cumplir con nuestro mandato constitucional y anticipábamos que, en caso necesario, si hubiera condiciones adicionales que nos tuvieran que llevar a algún incremento adicional respecto al histórico que han tenido las tasas, estaríamos dispuestos a hacerlo”, subrayó la directiva, precisando la importancia de actuar acorde con la política de control de precios del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Al unísono, el incremento en la tasa de interés hace más atractivos los instrumentos de ahorro en dólares, debido a que ofrecen un mayor rendimiento, por lo que el peso podría resultar presionado por esto. Otro efecto negativo podría ser la deuda pública, dado a que se sufrirá una disminución del diferencial de casas de Banxico con la FED.
Una manera de contrarrestar dichos efectos ya fue anticipada por el subgobernador del Banco de México, Jonathan Heath, quien sostuvo que, por mayoría, el banco central subirá su tasa en 75 puntos base.
