Luego de haber perdido su patrimonio
tras los deslizamientos de tierra en
Lomas del Rubí en 2018, los afectados
fueron reubicados dos años después a
la colonia Lomas de la Esperanza, al
sur de Tijuana. En el sitio se edificaron
135 viviendas, que presentaron vicios
ocultos a los tres meses de ser habitadas.
“Nos dieron casas en obra negra”, dicen
En febrero de 2018, en la colonia Lomas del Rubí en Tijuana se registró un deslizamiento de tierra en donde alrededor de 600 personas perdieron su patrimonio. Tras una lucha de dos años, los damnificados fueron reubicados a la colonia Lomas de la Esperanza, en donde se construyeron 130 pequeñas viviendas que a los tres meses de ser habitadas presentaron vicios ocultos.
El apoyo de los hogares provino de la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi), institución de Gobierno Federal con un subsidio por 240 mil pesos y una contribución de fundación Banorte por 40 mil pesos para cada casa. Fue la asociación civil Corazón Urbano, la ejecutora de la obra.
El 30 de abril de 2021, a 125 familias de Lomas del Rubí, que perdieron su casa y lograron comprobar con título de propiedad, les otorgaron una vivienda de 120 metros cuadrados y 95 de construcción, prácticamente en “obra negra”.
Las viviendas se componen de dos recamaras, un baño, un pequeño espacio que funciona como sala, comedor y cocina. Piso de concreto, paredes sin emplaste, falta de impermeabilización, sin barda perimetral ni muro divisorio entre las casas.
Sin embargo a los tres meses de que fueron habitadas, las casas presentaron fisuras, grietas, humedad y cuarteaduras, entre otros problemas.
Son entre 35 y 40 casas las que presentan daños, que desde su aparición los moradores denunciaron ante Conavi y la Secretaría de Bienestar federal.
Entregaron casas mal hechas
Mariana Morales Alvarado, una de las afectadas, señaló que tras los deslizamientos en el Rubí ,en donde su familia formó su patrimonio hace 35 años y lo perdieron todo, fue un logro que el gobierno les otorgara una vivienda; aunque a la fecha no se les haya otorgado un título de propiedad.
“Allá teníamos todo (Lomas del Rubí) ya habíamos hecho nuestra inversión allá; desgraciadamente pasó lo del deslizamiento y tuvimos que dejar el sitio. Por dos años pagamos rentas que oscilaban entre 350 y 400 dólares, y cuando se nos dio la casa en Lomas de la Esperanza fue un alivió, un descanso para nosotros; estábamos muy endeudados. Pero cuando llegamos a habitar las casas, nunca nos imaginamos que las tragedias nos vinieran siguiendo”.
Relató que a los pocos días de ocupar la casa, tuvieron que invertir en el remozamiento pues prácticamente fue entregada “en obra negra”.
“Aquí todo es más caro, el material y la mano de obra, económicamente no podemos. Hay familias que han invertido entre 30 y 50 mil pesos, porque se tuvo que mandar emplastar la casa, impermeabilizar, porque se nos trasmina todo; si llueve se nos mete el agua. Ya hay grietas, cuarteaduras, son muchas cosas que no hemos estado tranquilos, y esa inconformidad ya se les dijo a Conavi y Bienestar, quienes vinieron a realizar una inspección después de muchas exigencias”.
Otro de los temores de los vecinos es que aunque las casas cuentan con una garantía, ésta vence el 30 de abril, y en muchos de los casos esta indemnidad no ha sido solventada.
“También nos preocupa que el talud no está arropado y se vaya a colapsar y caer en la casas. Sobre las vialidades hay alcantarillas sin rejillas, lo que representa un peligro para niños y mascotas. Además de la inseguridad que hemos enfrentado en la zona, desde el robo de un auto hasta juguetes y bicicletas de los niños”.
Morales Alvarado mencionó que tras las irregularidades en las casas, los vecinos solicitaron una opinión técnica a la empresa Construcciones y proyectos Sicap, que les reveló lo siguiente:
“La falta de emplaste en viviendas, presencia de grietas en muro, falta de suministro de material para instalación de chaflán con impermeabilización, encharcamientos en techos, asentamiento diferencial en viviendas causa de grietas y fisuras en muros de vivienda, falta de supervisión en instalación de Servicios Públicos (Agua, Luz, Drenaje), falta de cuneta en pie de talud para escurrimiento de agua, daño de viviendas por asentamiento ocasionando grietas y fisuras, daños en vivienda por filtración de humedad”. [sic]
Tras la opinión técnica, la empresa emitió como recomendación realizar estudios de mecánica de suelos de las viviendas afectadas, así como proteger y estabilizar el talud de lado oeste, reparar fisuras y grietas de losas y muros para evitar filtración de humedad, proporcionar el mantenimiento adecuado en impermeabilización de viviendas afectadas por humedad en la azotea, estabilizar el suelo de las viviendas afectadas, de acuerdo a lo que arroje el estudio de mecánica de suelos.
“Cuando nosotros solicitamos a Conavi que viniera a realizar una inspección era porque teníamos bases de que las casas estaban mal. Presionamos a los funcionarios diciéndoles que los íbamos a denunciar porque no era justo que alzaran banderas el día de la entrega de las casas, y luego ya no hayan hecho nada”.
Los vecinos manifestaron que nuevamente solicitarán una opinión técnica de estructura “para que nos diga cuál es el problema de estas casas. Si es un asentamiento de falla geológica, que si no está bien compactado o la calidad con la que fueron hechas las casas; ya que tengamos e informe, lo vamos a exhibir y decirle a la gente que así son los proyectos de bienestar social y Conavi”.
“Nosotros no queríamos ser una carga del gobierno, siempre se les dijo; queríamos que nos ayudaran para que el que nos tumbó nuestras casas, que es grupo Melo, nos pague, nos reconstruya; pero nada le hicieron a Melo. Como afectados de Lomas del Rubí queremos esa justicia que le hemos estado exigiendo desde 2018. Hay un culpable. Y a estas alturas ya hay muchos. Lomas del Rubí se sigue colapsando, mientras sigue avanzando el fraccionamiento de Valle del Pedregal; ahí es donde vemos la impunidad. Somos unas personas que venimos de una tragedia para enfrentarnos a otra, es una cicatriz que nos marcó para toda la vida”.
No son problemas estructurales: Conavi
Vianey Padilla, titular de Conavi, dijo a ZETA que los beneficiarios les han externado su preocupación por los problemas que están enfrentando en Lomas de la Esperanza.
“Nosotros les hemos comentado que las fisuras que tienen las viviendas, no llegan a ser grietas y se deben a un tema de asentamiento común en terrenos que tuvieron una compactación no tan buena, pero que no llega a ser un problema estructural. Las viviendas en su estructura cumplen con todas las normas del municipio, de construcción. Estas fisuras surgen porque la vivienda tiene los refuerzos verticales. Por norma, en Baja California no estamos obligados a colocar refuerzos horizontales, eso hace que con los asentamientos pueden surgir fisuras”, comentó.
Padilla comentó que la dirección de Análisis de Riesgos y Seguridad Estructural de Conavi, realizó un recorrido en Lomas de la Esperanza para generar una opinión técnica.
“El ingeniero Luis Felipe García nos adelantó en las observaciones es que no existe un daño estructural, pero la información la estamos esperando de manera más formal, por escrito”.
La titular de Conavi comentó que la empresa Corazón Urbano ha atendido algunas solicitudes de reparación, pero hay familias que han realizado trabajos por su cuenta, sin acatar las recomendaciones que se les ha hecho.
“A la gente le crea mucha inseguridad ver fisuras en su vivienda, pues ellos vienen de una tragedia grave que les cambió la vida por completo; sin embargo hay personas que no son expertas en el tema y les dicen que con esas grieta se les va a caer su casa. La verdad es que tenemos el indicio de que no es un tema de riesgo estructural. Pero estamos esperando el análisis real y la opinión técnica que se va a compartir con los residentes”, acotó.
Cuarteaduras son normales en una vivienda que se está asentando: Ruiz Uribe
El delegado Único Federal Alejandro Ruiz Uribe confirmó que se han presentado cuarteaduras en algunas viviendas de Lomas de la Esperanza, pero no son estructurales.
“Es la segunda revisión que se hace, en la primera revisión las casas están normales, son cuarteaduras que no son estructurales… son normales en una vivienda que se asienta. Ya fui a visitarlas pero tampoco soy ingeniero, lo que sí puedo decir es que las casas tienen un seguro, para cualquier caso que tuviera un problema mayor, que parece que no lo hay; pero si lo hay, hay un seguro que cubriría la reposición de la casa”, declaró.