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miércoles, abril 24, 2024
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Se define “obradorista”, nuevo presidente de El Colef

Víctor Espinoza Valle, es el quinto investigador en dirigir los destinos del Colegio de la Frontera Norte, y se pronunció por actualizar los programas de investigación y coadyuvar con el Gobierno de México. Aclara que no habrá destituciones y sólo se reorganizará la forma de trabajo. En entrevista, también hablo del Conacyt y de la relación de El Colef con el INE

A su llegada a la presidencia del Colegio de la Frontera Norte, el viernes 4 de marzo, Víctor Alejandro Espinoza Valle anticipó que los programas de investigación con que cuenta el organismo se actualizarán. Ello para efectos de “buscar el bienestar de la población” a nivel regional y en el país.


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Sobre los cambios que piensa implementar, el ex profesor-investigador del Departamento de Estudios de Administración Pública refirió a ZETA que no tendrán que ver con destituciones, sino simplemente con reorganizar la forma de trabajar.

“En términos de investigación los cambios se refieren más a la reorganización del trabajo, no se trata de que se vayan investigadores ni nada de eso, ni técnicos ni becarios, en ninguna de las áreas”, manifestó en entrevista.

Tras un proceso de “auscultación”, emprendido a partir de la emisión de una convocatoria, Espinoza Valle fue designado presidente de El Colef por la directora general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), María Elena Álvarez-Buylla Roce, en cuyo caso ha sido señalada de tratar de controlar líneas de investigación, así como de respaldar reducciones presupuestales y la desaparición de fideicomisos.


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En cuanto al nombramiento de Espinoza Valle, la bióloga ponderó la propuesta y el perfil de trabajo del académico, afirmando que su desempeño al frente del Colegio concurrirá a fortalecer la labor de la institución.

En el encuentro periodístico con este medio, Espinoza Valle se pronunció porque El Colef sea coadyuvante con el gobierno, en términos de prevenir riesgos o de contribuir a la erradicación de problemas en materia de servicios públicos, entre otras áreas a atender, a partir de los estudios que realiza la institución.

Aclaró que su pretensión de reconfigurar la dinámica de trabajo en ningún sentido responde a alguna disposición emitida por el Conacyt. En todo caso, dijo, deriva del Nuevo Programa de Ciencia, Tecnología e Innovación, encaminado a “que la ciencia sea útil”, premisa que tampoco implica que “la producción teórica” se descuide.

El doctor en Ciencia Política y en Sociología reveló que para actualizar el modelo de desempeño en El Colef, él propone “crear cuerpos académicos”, toda vez que en la institución hay casos de investigadores adscritos a un mismo departamento que “no tienen mucho en común en términos de los temas de investigación”.

De ahí que plantee, se adscriban a un cuerpo académico (para lo cual habrá de convocarse de manera formal, especificó), en el ánimo de concentrar en esa área el estudio de una misma problemática.

“Los investigadores verán las ventajas de adscribirse a un cuerpo académico, o quienes quieran seguir trabajando como lo han venido haciendo mucho más de manera individual, pero tendrán una ventaja los cuerpos académicos, que es nuclearlos a partir de los grandes problemas regionales y nacionales”, estableció.

“Se trata de potencializar el trabajo con miradas multidisciplinarias, creo que esto ayudará mucho a entender los problemas” relativos a “seguridad, ambiente, medio ambiente, agua, gobernanza, migración”, expuso.

Por lo que respecta a la docencia en el organismo, indicó que “camina bastante bien”, con un programa de posgrado en Nuevo León, otro en Chihuahua y ocho en Baja California, donde El Colef cuenta con sede en Mexicali y con su matriz en Tijuana.

Acerca de sus tendencias ideológicas y partidarias, el doctor en Ciencia Política y en Sociología dijo comulgar con la causa izquierdista y coincidir con la visión del Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aunque puso de manifiesto no pertenecer a Morena.

“De izquierda siempre he sido, siempre he comulgado, podría en general decir ‘lopezobradorista’ en términos del proyecto general, (pues) hay cosas que critico; pero morenista, no pertenezco a ningún partido, así me definiría, yo creo que es un momento de cambio importante para el país”.

Con todo, aseveró que su gestión en ningún sentido se traducirá a imposiciones de carácter ideológico.

“No conozco en la historia de las instituciones alguien que le diga no opines de esto o no realices tu investigación con la perspectiva que consideras pertinente, lo único que se exige es rigurosidad”, acentuó.

“Un libro del Colegio, para ser publicado requiere dos dictámenes positivos y esos dictámenes no los hace la comunidad del Colegio, sino de otras instituciones y son ciegos. Qué significa: que el que evalúa no se entera de quién es la obra, y quien es evaluado no se entera de quién lo evalúa”, manifestó. “No hay y no la habrá, ninguna censura, ni siquiera en los programas de posgrado, digamos, la perspectiva que el profesor quiera dar y hay diferentes perspectivas teóricas y metodológicas”, agregó Espinoza Valle.

 

PROCESO DE DESIGNACIÓN NO CONSTITUYÓ  “UNA ELECCIÓN”

Tras la designación de Víctor Espinoza Valle al frente de El Colef, María del Rosío Barajas Escamilla, profesora-investigadora del Departamento de Estudios Sociales y quien igualmente aspiró este año al cargo de presidente del organismo, propuso se revise “la normatividad vigente para elección de titular de los Centros Públicos de Investigación”. A su modo de ver, “no es claro el peso que sobre la decisión final tiene la opinión de la comunidad (académica)”.

A propósito, Espinoza Valle, quien figura como el quinto investigador en ocupar la presidencia del Colegio y se desempeñará en el cargo de 2022 a 2027, mencionó que de entrada el proceso de designación no constituyó “una elección”, toda vez que la institución académica no es un órgano autónomo.

“Para ser votación tendríamos que cambiar de estatus, tendríamos que ser centros autónomos, no lo somos; somos entidades paraestatales de la administración pública federal”, arguyó.

Reconoció que en esta ocasión el proceso fue diferente en el sentido de que bastó con que un integrante de la comunidad académica postulara a alguien para que procediera la postulación. “Antes sí, era con firmas, pero ahora cambió y dos o tres o uno te pueden postular, ya no sabes quién firmó la carta”, reveló.

En alusión a la observación de Barajas Escamilla, el designado profirió: “Lo que me llama la atención es que tú aceptas las reglas con las que participas, si no hubieras estado de acuerdo, pues no participas, hasta lo denuncias, creo que es un mal mensaje decir ‘participé, no quedé y ahora cuestiono el procedimiento que acepté’, porque lo firmaste”.

En cuanto a la dinámica que derivó en su nombramiento, detalló que cinco académicos fueron postulados para el cargo y que los miembros de la comunidad interna tuvieron oportunidad de emitir opiniones de manera anónima a favor o en contra de ellos, para que esa información se remitiera a un Grupo de Auscultación Externa y este propusiera una terna a la dirección del Conacyt.

Por otro lado, el académico dijo haber leído un comentario referente a que “se había impuesto el patriarcado” con su designación, tomando en cuenta que previamente habían fungido como presidentes Jorge Bustamante, Jorge Santibáñez, Tonatiuh Guillén y Alberto Hernández. Sobre esa presunción, dijo llamarle la atención que “quien designó fue finalmente una mujer”. De ahí que, a su juicio, “la crítica” debe estar enfocada a María Elena Álvarez-Buylla.

 

“PESO POLÍTICO”

A lo largo de su desempeño como directora general del Conacyt, María Elena Álvarez-Buylla, ha sido señalada de imponer su criterio en “las agendas de investigación”, hacer nombramientos sin someterlos a consideración de órganos internos, avalar “reducciones presupuestales” y respaldar la eliminación de fideicomisos.

A raíz de que el 29 de noviembre de 2021, el Consejo confirmó la designación de José Romero Tellaeche al frente del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), a Álvarez-Buylla se le cuestionó, pues supuestamente la opinión de académicos y trabajadores del CIDE no se tomó en cuenta para consumar el nombramiento.

En opinión de Espinoza Valle “en el caso del CIDE se siguió el mismo procedimiento del Colegio”, en el que “no hubo ilegalidad”.

Los investigadores del Centro “cometieron un grave error”, habida cuenta de que “no postularon a nadie”, las dos personas a quienes se consideró para ocupar la dirección “eran externos, que los puede postular la Junta de Gobierno o el Comité Externo”; afirmó.

“Ahí hay muchos intereses y tiene que ver con que el CIDE ha sido una institución diferente, porque ha tenido mucho peso político, muchos miembros de la planta académica son de los más conocidos periodistas o editorialistas, todos son del CIDE, Leo Zuckermann, María Amparo Casar, José Antonio Crespo, Carlos Bravo Regidor, Mauricio Merino, Beatriz Magaloni, los columnistas nacionales que además son anti lopezobradoristas”, estimó.

“En un tiempo” hubo “muchos recursos que se transfirieron de manera privilegiada al Centro y lo que vieron en el CIDE este grupo fue un peligro si no quedaba alguien que le diera continuidad, pero cometieron el error de no postular a nadie”, reveló Espinoza Valle.

Desde el punto de vista del nuevo presidente de El Colef, “siempre hay temas que van sirviendo para una oposición muy desarticulada, muy débil, que va agarrando temas en vez de plantear un proyecto distinto”.

En el caso de los integrantes del Foro Consultivo Científico y Tecnológico que se encuentran bajo investigación por presunto acceso irregular a recursos del Conacyt, Espinoza dijo coincidir con la versión de que incurrieron en “una violación muy grave”.

Bajo la administración de López Obrador, el Conacyt determinó dejar de proveer al Foro con los apoyos económicos que por Ley le otorgaba. El órgano autónomo, constituido como asociación civil, se amparó.

El Consejo procedió a una modificación estatuaria relativa al carácter constitutivo del Foro y, a raíz de ello, presentó denuncias en contra de quienes supuestamente se vieron involucrados en la obtención indebida de recursos (entre ellos el ex director del Conacyt, Enrique Cabrero Mendoza).

“Había mucha corrupción, mucho desvío de recursos, muchos lujos, se transferían recursos para otras cosas a otras instancias”, comentó Espinoza Valle.

“A lo mejor es un exceso de (Alejandro) Gertz Manero (fiscal general de la República) de cómo se presentó el caso (por el que se solicitaron órdenes de aprehensión contra 31 personas), pero yo no metería las manos al fuego por el Foro Consultivo”, asentó el nuevo director de El Colef.

 

SIN “CONFLICTO” CON EL INE

Independientemente de los episodios de fricción que ha habido entre López Obrador y el Instituto Nacional Electoral, Víctor Espinoza indicó que la relación de El Colef con el INE se va a mantener.

En 2021, AMLO se quejó de que el órgano electoral cancelara las nominaciones de Félix Salgado y Raúl Morón para contender por las gubernaturas de Guerrero y Michoacán, respectivamente (toda vez que los abanderados de Morena no reportaron gastos de precampaña). López Obrador propuso que el INE desapareciera a partir de una reforma y que el Poder Judicial absorbiese sus funciones.

Este año,  el Instituto dictó medidas para prohibir al mandatario referirse a la consulta de Revocación de Mandato, organizada para preguntar si AMLO debe renunciar a la Presidencia de México por pérdida de confianza; por otra parte, le ordenó retirar contenidos referentes a programas sociales y obra pública, pues en la antesala del ejercicio a celebrarse el 10 de abril, únicamente procede hablar de temas de seguridad, salud, educación y protección civil desde la esfera pública.

Espinoza dijo entender “los problemas que pueden tener un par de consejeros electorales”, a saber, Lorenzo Córdova Vianello y Ciro Murayama Rendón, a los que calificó de beligerantes. Al margen de ello, ponderó “la gran fortaleza del INE”, de la que mencionó, radica en “su servicio profesional”, consistente en “técnicos muy capacitados, que hacen su chamba con salario básicos, pero que (distritalmente) conocen las ciudades”.

A decir del entrevistado, “una cosa es la beligerancia de dos consejeros y otra cosa es la institución, y es una institución que va a seguir, que es fundamental”, advirtió.

En ese sentido, “vamos a hacer cosas juntos, tenemos proyectos, vamos a seguir desarrollando lo más que se pueda, no va haber conflicto ahí, no va haber distancia”, remató Víctor Espinoza Valle en alusión a los vínculos de El Colef con el INE.

Autor(a)

Eduardo Andrade Uribe
Eduardo Andrade Uribe
Licenciado en Comunicación por la Universidad Iberoamericana Ciudad de México; con certificado de terminación de la maestría en Cultura Escrita otorgado por el Centro de Estudios Sor Juana. Activo en semanario ZETA dese 2005.
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