Aunque no se conocen todos los detalles de los resultados de las investigaciones ejecutadas en contra del gobierno que estuvo en manos del PAN, el titular del Ejecutivo anticipa que habrá consecuencias en breve
El gobernador del Estado de Baja California Sur, Víctor Castro Cosío, anunció que tras concluir las auditorías realizadas después de la entrega-recepción de gobierno, preparan demandas contra quienes consideren implicados de la administración de su antecesor, Carlos Mendoza Davis.
Adelantó que los recursos legales que preparan se presentarán ante las instancias correspondientes después de que se lleve a cabo la consulta de Revocación de Mandato, es decir el 10 de abril.
Aseguró que no buscarán chivos expiatorios, pero sí certificar y aplicar lo conducente donde haya responsabilidad.
“Recuerden que hicimos una auditoría y estamos por ingresar estos meses los expedientes a donde corresponda, en donde consideramos que hubo desvío y que sea la autoridad… Ya sobre la función pública, no me corresponde a un servidor las sanciones o procedimientos que tiene que aplicar. Yo estoy totalmente de acuerdo en contra de la corrupción, que quede claro”, dijo a medios de comunicación.
Cabe recordar que a finales de diciembre ZETA requirió al Gobierno del Estado, mediante la solicitud de transparencia con folio 030075821000039, mostrar detalles de la empresa que llevaba a cabo la auditoría externa al gobierno de Mendoza Davis (2015-2021).
No obstante, el subsecretario de Administración, José Saúl González Núñez, solicitó la reserva de la información con fundamento en el artículo 108 de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información.
En un hecho sin precedentes, la administración de Castro motivó la restricción excepcional de la información por razones de interés público.
Por otra parte, Víctor Castro ha dado algunos detalles de los resultados de la auditoría. Entre ellos, menciona que la oficina de su antecesor realizaba gastos excesivos; expone que en un semestre, la oficina de Mendoza usó más de 70 millones de pesos, cuando en el mismo periodo su gobierno lleva 22 millones de pesos.
Asegura que su antecesor le dejó un hueco financiero por más de dos mil millones de pesos, que su administración no puede cubrir ni dejando de pagar a todos los trabajadores del Gobierno del Estado.
El gobernador subrayó que no califica a los panistas de corruptos, sino de “pasados”, y que es complicado acusar, aunque todo está documentado.
Con respecto al reporte de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) que indica un posible daño a la hacienda de Baja California Sur por dos mil 465 millones de pesos durante el gobierno de Mendoza, el mandatario señaló que ese tema será resuelto por las autoridades correspondientes.
“La autoridad competente dirá lo que procede; yo ahí no sé qué sanción le corresponde a alguien que hizo mal uso de los recursos del pueblo”, finalizó.