América Latina se encuentra entre las tres primeras regiones del mundo en varios mercados delictivos, como el tráfico de armas, delitos contra la flora y la fauna, así como el trasiego de marihuana y cocaína. Sumado a estos delitos, México y Panamá obtuvieron una de las puntuaciones más altas en la trata y el contrabando de personas. México tiene un mercado de armas bien consolidado, que sirve de conducto hacia y desde Estados Unidos; devastador en los niveles de la violencia.
México alberga delitos medioambientales, como la industria maderera, el tráfico de especies silvestres y el contrabando de combustible. No tiene explicación política, del reclamo parlamentario europeo. Es el crimen organizado el que está asesinando a mujeres, jóvenes y periodistas. La agresión la alimentan los países productores de armas a todo el mundo: USA, China, Rusia, Alemania, Francia, Reino Unido, Bélgica e Italia.
En un contexto de desigualdad y miseria, México se ha militarizado desde hace dos décadas, movidos por la maquinaria empresarial financiera que controla los cárteles, el descontrol del ejército y miles de desertores del aparatos de seguridad pública, sus dobles agentes (delincuentes-policías) y el contrabando abierto de armas en el mercado negro de armas de grueso calibre.
La ausencia de una cultura de respeto a la vida motiva la tragedia de la pobreza. Veamos los datos duros oficiales: La inversión militar de Estados Unidos sigue en crecimiento (5.3%). Washington dedicó a la guerra $732.000 millones de dólares, 38% global.
Representa un 15% menos que la de diez años antes, cuando el Pentágono desplegó decenas de miles de tropas en Afganistán e Irak. Su rival, China, también incrementó el gasto un 5,1% hasta los 261,000 millones. Pekín ha aumentado su inversión cada año desde 1994, en un porcentaje similar al crecimiento de su PIB. Entre EUA y China, alcanzan el 52% de la inversión mundial en armamentos, los sigue de lejos India con 3.7% y Rusia con el 3.6% de su PIB mucho menor.
Otra mordedura de lengua europea. Por la venta de armas de Alemania a México, multan a Heckler & Koch por exportar miles de rifles a México, vinculados a Ayotzinapa. El G36 es uno de los rifles de asalto más usados en el mundo. Un tribunal en Alemania condenó a la armamentística Heckler & Koch a una multa de $4.2 millones.
El tribunal determinó que entre 2006 y 2009, los años de la guerra contra el narcotráfico emprendida por Felipe Calderón, Heckler & Koch infringió las reglas de exportación de armas alemanas. Los fusiles de una fábrica alemana de armas terminaron vinculados con la tragedia de 43 estudiantes de Ayotzinapa. La firma envió cerca de 5,000 rifles de asalto G36 y otras armas más pequeñas a regiones en conflicto de México. Los jueces concluyeron que la empresa violó la Ley para el Control de Armas de Guerra, que restringe la exportación de armamento fabricado en Alemania a Chiapas, Chihuahua, Zacatecas, Sinaloa y Guerrero.
EE UU elevó sus ventas un 15% y fortaleció su posición hegemónica; casi el 40% del armamento importado en el quinquenio analizado (2016-2020) fue de fabricación estadounidense. Las exportaciones de Washington ya son casi el doble que las de Moscú, tras unos años, a principios de la década pasada, en los que estuvieron a punto de igualarse. Entre los 96 compradores de armas a EE.UU., destacan los incrementos en las adquisiciones de países con políticas extremadamente expansivas y agresivas: Israel (335%) y Qatar (208%).
Las importaciones de armamento de Venezuela se desplomaron un 93% en los últimos cinco años con respecto al quinquenio anterior. El que fuera el mayor comprador de armas de América Latina durante cerca de una década, ha reducido casi por completo sus adquisiciones desde 2008 y 2013. Las compras de México se redujeron un 15%, tras varios años de fuertes incrementos, principalmente para combatir al narcotráfico.
La pandemia ha impactado tanto en la distribución como en la firma de nuevos acuerdos, pero el valor anual del comercio mundial de armas superó $75,000 millones de euros en los últimos años.
No tiene derecho a recomendar alejarse de México, si trafican anualmente casi un millón de armas filtradas por el sistema corrupto de aduanas. Así llegan los pagos trueque, compensatorios de toneladas de droga.
Con cinismo “protestan”, y consumen cocaína de Asia, Colombia, México y Centroamérica. Es hipocresía y doble moral. Ellos son corresponsables de la violencia y ríos de sangre que se registra diariamente. Los crímenes de jóvenes y feminicidios no se hacen, son resorteras.
P.D.- ¿Por qué USA y Europa no reclaman a China la fabricación de precursores químicos de anfetaminas?
M.C. Héctor Ramón González Cuéllar es académico del Instituto Tecnológico de Tijuana.
Correo electrónico: profe.hector.itt@gmail.com