Manuel Mendívil tiene más de 12 años dedicándose a actividades altruistas en Baja California Sur. Durante 2020 y 2021, su intervención en la sociedad civil durante la pandemia lo convirtió en uno de los héroes ciudadanos que colaboraron para salvar vidas de personas enfermas de COVID-19. Más de 150 familias recibieron su apoyo con el préstamo de tanques de oxígeno para tratamiento de pacientes.
En los picos críticos y los momentos de calma aparente de la crisis sanitaria, enfocaron la atención a personas que necesitaban un tanque de oxígeno para llegar al hospital, y en bebés prematuros.
“Tuvimos quince tanques en rotación constante para el apoyo de quienes lo necesitaban, debido a la alta demanda, pero también a la solidaridad de personas y de nuestra propia iniciativa”, compartió Manuel, quien comenzó su intervención social en la pandemia cuando se paralizaron las actividades en el confinamiento, momento en que se percató de la situación de precariedad que atravesaba el personal de salud de BCS.
Por medio de su asociación civil, invitaron a la ciudadanía y empresarios de la entidad para lograr apoyo financiero y en especie para las y los trabajadores del sector.
La iniciativa permeó entre agrupaciones y el apoyo a hospitales dejó de ser el foco rojo, lo cual le permitió enfocar sus esfuerzos en la población. La crisis que provocó la pandemia le llevó a invertir en tanques de oxígeno de 682 litros (portátiles) para el apoyo, principalmente, de quienes no podían costear el equipo. El único requisito: devolverlo lleno para que el apoyo llegara de inmediato a la siguiente familia.
“Algo tan vital como el aire que respiramos y que se ha convertido en un lujo ante esta pandemia, donde el hecho de requerir de oxígeno se convirtió en un pesar financiero y trámite engorroso con la angustia y la urgencia a cuestas, con depósitos obligados para la renta de tanques, hasta cantidades exorbitantes ante la necesidad de recarga de los mismos”, expresó Manuel Mendívil.
¿Cuál es el mensaje que envía el activismo en tiempos de pandemia? Manuel responde:
“La idea de que siempre se puede hacer algo por los demás, aun con miedos o incertidumbres, se debe alzar la mano y sumar esfuerzos, porque la indiferencia nos hace parte del problema”.
Recalcó que las autoridades deben ser claras, firmes y congruentes en las medidas para combatir la pandemia, sin embargo, la ciudadanía no puede esperar que el gobierno asuma la responsabilidad en una problemática que implica labores titánicas.
“¿Lo más satisfactorio de mi labor? Saber que, a pesar de las condiciones, los riesgos y las adversidades, hemos intentando hacer lo correcto en tiempos complicados, el dar un paso al frente y el contar con el agradecimiento de las personas, las conexiones que se han dado por medio de esta labor; hemos llorado de felicidad y también de dolor, no todas las historias son de logro”, reconoció Mendívil.
En los últimos dos años, Manuel se ha cruzado con todo tipo de historias, con desenlaces felices y otros con pérdidas de familiares, incluso hubo quienes se beneficiaron del programa y simplemente no regresaron los tanques, válvulas o carritos transportadores; o a quienes no les importaba regresarlos vacíos, sabiendo que era el único requisito.
Pese a estos sinsabores, que le provocaron una enorme frustración e impotencia ante el egoísmo e indiferencia de esas personas, Manuel Mendívil sigue con la intención y las ganas de seguir ayudando a quienes lo requieran. Por ello, ZETA lo reconoce como un Personaje Destacado 2021.