La tasa de vacunación en Baja California ya llegó a 91% con la inmunización a menores. Actualmente hay más contagios y menos defunciones. Sin embargo, la movilidad en la ciudad ha propiciado que la ocupación hospitalaria siga en aumento y, de continuar, volverán a cerrar los servicios para la atención de otras enfermedades, informó Néstor Hernández, titular de la Unidad de Evaluación y Seguimiento de la Secretaría de Salud
Después del fracaso hospitalario durante la segunda ola de COVID-19, la esperanza y disminución en los indicadores se hizo presente con la vacunación masiva. Sin embargo, la llegada de la variante Ómicron, el descuido en las medidas sanitarias, el cambio de administración que cambió el ritmo en las jornadas de vacunación y la tercera ola de contagios que se unió la cuarta, han llevado de nuevo a Baja California a un nuevo estatus de riesgo.
Al final de la pasada administración, el 31 de octubre de 2021, la entidad tenía 3 mil 440 casos activos, 69 mil 467 confirmados y 9 mil 639 defunciones a causa del virus SARS-CoV-2.
Al cierre de esta edición, la cifra llegó a 89 mil 756 casos confirmados en total a un año y nueve meses de que inició la pandemia en la región, así como 10 mil 788 muertes. Esto significa que, en dos meses de administración de Marina del Pilar Ávila Olmeda y su secretario de Salud, José Adrián Medina Amarillas, hubo 20 mil 289 más casos confirmados y mil 149 más muertes.
La vacunación a la población civil inició en febrero de 2021 con los adultos mayores, sin embargo, fue a partir del 17 de junio que se comenzó a inmunizar al grueso de la población, a los mayores entre 18 y 39 años. Desde entonces, la cifra de contagios y casos activos comenzó a disminuir.
La tercera ola de COVID-19 llegó al país a partir de agosto, y mientras en el resto de los estados los contagios y las muertes iban al alza, en Baja California la situación parecía controlada. La versión oficial fue que a partir del 7 de julio se había alcanzado la inmunidad de rebaño.
El pico de la tercera ola llegó a BC a mediados de septiembre, cuando la vacunación ya había llegado al 80%, aun así, los contagios volvieron a incrementarse.
En octubre, durante el último mes de Alonso Pérez Rico al frente de la Secretaría de Salud, los casos activos llegaron a puntos récord con más de 3 mil 600, con más de mil casos en Mexicali y Tijuana, lo que sucedió a pesar de que el ritmo de la vacunación era constante y fluido en distintos puntos de los municipios.
MÁS CONTAGIOS, MENOS DEFUNCIONES
Néstor Hernández, titular de la Unidad de Evaluación y Seguimiento de la Secretaría de Salud en el gobierno de Marina del Pilar Ávila, expresó a ZETA que si bien se han registrado más contagios en los últimos dos meses, la cantidad de defunciones es menor en comparación con 2020.
“En diciembre del año pasado teníamos 7 mil 801 casos y mil 468 defunciones, en diciembre de 2021, tenemos hasta el momento 6 mil 499 casos y 479 defunciones; ahora hablemos de noviembre: en 2020 teníamos 5 mil 643 casos y este año 11 mil 477, el doble de casos, pero el año pasado, en defunciones tuvimos 616 y este año tuvimos menos, ciertamente casi el mismo número, 599”, señaló.
Aunque se tiene el doble de casos, las defunciones se mantuvieron casi en la misma cifra, a pesar que en 2020 aún no llegaba la variante Delta, actualmente predominante en todo el mundo.
“La variante Delta se empezó a presentar durante este año y es más peligrosa, más infectiva y con mayores daños en la salud, sí nos llega a causar una problemática importante, por eso estamos hablando del cambio que tenemos respecto al año pasado, que es gracias a la vacunación, el cual se cumplió con el objetivo”, citó.
VACUNACIÓN YA NO ES MASIVA
En ese sentido, el también integrante del Comité Científico de Salud, recalcó que la dinámica de vacunación cambió, pues ya no es masiva, ya que la pasada administración se despidió con el 80% de personas inoculadas. En ese contexto, Néstor Hernández refirió que “no se bajó el ritmo de vacunación masiva que se estaba registrando, sino que se cambió la estrategia”, por lo que el objetivo de esta nueva administración es vacunar a los rezagados y reforzar a aquellos que ya tienen su esquema completo.
Hasta el martes 28 de diciembre de 2021, hay 2 millones 246 mil 953 esquemas de vacunación completos, equivalentes al 91%; asimismo, en el grupo etario de 18 a 19 años se han inmunizado a 101 mil 311 personas; de 15 a 17 años, 149 mil 944; y de 14 años van 140 mil 156, además de 8 mil 081 mujeres embarazadas con esquema completo, que son los grupos que iniciaron vacunación junto con esta administración.
“Hablamos de distintas situaciones, porque la vacunación anterior era vacunar en masa y ahorita es vacunar, más que nada, a grupos específicos”, justificó el funcionario.
Por su parte, la doctora Remedios Lozada Romero, jefa de la Jurisdicción Sanitaria Número 2 en Tijuana, habló de circunstancias, condiciones y dificultades diferentes, como el cierre de año, que hay menos personal, clima frío y lluvioso y menor presupuesto para mobiliario para otras sedes.
Al respecto, funcionarios estatales que pidieron no ser identificados, informaron que el Instituto de Movilidad Sustentable (IMOS) es uno de los más solicitados por la población de la Zona Este, ya que no se han habilitado puntos como la Escuela Primaria “Miguel F. Martínez”, la Monumental Plaza de Toros de Playas de Tijuana, el Baja Center de Rosarito o la Universidad Autónoma de Baja California (UABC).
Detallaron que esto se debe no sólo al recorte presupuestal, donde José Adrián Medina Amarillas tuvo que conseguir un préstamo de 23 millones de pesos para saldar las deudas correspondientes a noviembre y diciembre, y, por lo tanto, ya no hubo para pagar mesas, sillas, carpas y alimentos del personal.
Además, los dueños o directivos de algunas sedes ya no estuvieron dispuestos a colaborar por cuestiones de agenda, pues los días de las jornadas de vacunación no coincidían con los eventos o clases programadas por las anteriores sedes de vacunación.
OCUPACIÓN EN AUMENTO
Al cierre de esta edición, la ocupación hospitalaria había disminuido en la Secretaría de Salud al 75%, con 148 camas ocupadas de 195 disponibles; así como 66% en el Seguro Social con 224 camas ocupadas de 336 destinadas a pacientes COVID.
Sin embargo, desde principios de diciembre, la ocupación en Isesalud variaba entre 85 y hasta 90%, mientras que el IMSS ha llegado a 85, razón por la que se volvió a habilitar la unidad hospitalaria de la UABC en Mexicali y, ante la negativa de Zonkeys, que previamente prestó sus instalaciones como hospital auxiliar, ahora reforzarán el Centro de Salud Florido-La Morita, con 30 camas para pacientes en recuperación; además de rehabilitar el cuarto piso del Hospital General ante el incremento de pacientes.
Médicos allegados a ZETA puntualizaron que el aumento es real, y aunado a que el personal de salud es escaso, tanto por cansancio, vacaciones y/o enfermedades, los contagios siguen al alza.
Desde la Secretaría de Salud, Néstor Hernández advirtió que, de continuar esa tendencia, volverán a cerrar servicios hospitalarios que recién se estaban abriendo para atender a pacientes de otras enfermedades, sin embargo, lo inmediato es trabajar con la capacidad que aún tienen y con las unidades hospitalarias externas.
“ÓMICRON NO ES TAN PELIGROSA”: SECRETARÍA DE SALUD
Óscar Efrén Zazueta Fierro, jefe de Epidemiología de la Secretaría de Salud, dio a conocer que la peligrosidad de la variante Ómicron radica en su capacidad de contagio, sin embargo, sus síntomas y efectos realmente no son de gravedad, a diferencia de la Delta.
La capacidad de contagio de la Delta es de .6, es decir, que por cada persona contagiada, infecta de seis a ocho más; mientras que la Ómicron, de cada persona infectada, traspasa la enfermedad a entre ocho y nueve personas. Aun así, la primera ha sido más letal y seguirá siendo de mayor cuidado.
“Hasta el momento no hemos detectado la variante Ómicron en el Estado, pero realmente es cuestión de tiempo, porque ya la localizamos en el Estado vecino de Sinaloa y el condado vecino de San Diego, como dispersión comunitaria, así que nos va a llegar por el centro y por la frontera Norte, seguramente”, mencionó Zazueta.
Sólo el 10% de los casos graves hospitalizados y que tengan antecedente de viaje, y personas que se hayan infectado a pesar de la vacuna, se envían al laboratorio del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica, así como a algunas universidades de San Diego, California para detectar nuevas variantes.
“Hablando de gravedad, la variante Delta es mucho, mucho, mucho más grave que la Ómicron; Delta se asocia a una mayor tasa de seguridad, mayor tasa de hospitalización y mayor tasa de defunción, en ese sentido, Ómicron es más noble”, detalló el epidemiólogo, para concluir:
“La única razón por la que la variante Ómicron ha generado mayor alerta, ha sido por la transmisibilidad, sin embargo, la duración de la enfermedad es menor. Es decir, una persona enferma por Ómicron dura menos tiempo con la enfermedad y menos tiempo infeccioso, entonces, eso lo vemos como algo positivo”.