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martes, octubre 1, 2024
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CESPE carga deuda de mil 900 mdp

Datos del Grupo Interdisciplinario del Agua y la autoridad estatal indican que, a dos meses de la nueva administración encabezada por Marina del Pilar Ávila, la Comisión de Servicios Públicos de Ensenada enfrenta un déficit de entre .26 y 1.2 metros cúbicos, y un boquete presupuestario de 278 millones de pesos

La nueva administración estatal que encabeza Marina del Pilar Ávila Olmeda, enfrenta el reto de, por lo menos, sentar las bases para garantizar el abasto de agua en Ensenada.

Con una Comisión Estatal de Servicios Públicos de Ensenada (CESPE) sumida en la quiebra, redes de distribución y plantas de tratamiento obsoletas, a casi dos meses de haber iniciado la administración morenista, no se ha presentado un plan de acción para abatir la falta de agua en la ciudad.

Para poner en perspectiva el problema que enfrenta la CESPE, existe un déficit de entre .26 y 1.2 metros cúbicos -con datos del Grupo Interdisciplinario del Agua (GIA) y la autoridad estatal-, deudas por mil 900 millones de pesos y una pérdida presupuestaria de 278 millones de pesos.

A decir de Jaime Alcocer Tello, director de la CESPE, se requiere una inversión mínima emergente de 600 millones de pesos y otra de mil 640 millones de pesos para abatir el rezago en infraestructura y con ello mejorar el servicio.

La CESPE opera en una extensión territorial superior a 51 mil kilómetros cuadrados, 480 colonias y 43 poblados a lo largo de Ensenada y San Quintín. Su infraestructura se compone de 40 pozos en Ensenada, 50 en San Quintín, seis plantas de tratamiento, una potabilizadora, dos desalinizadoras, 43 cárcamos de bombeo y administra más de 161 mil cuentas.

La complejidad del problema fue aceptada por Francisco Alberto Bernal Rodríguez, titular de la Secretaría para el Manejo, Saneamiento y Protección del Agua de Baja California (Seproa), el miércoles 8 de diciembre, durante la conferencia matutina de la gobernadora.

En su participación ante medios de comunicación, afirmó que “es fundamental un saneamiento financiero de los organismos (operadores del agua)” para cumplir con su obligación de dotar de agua a todos. “Los ingresos actuales apenas alcanzan para el gasto operativo y la sobrevivencia de los organismos”, remató.

La demanda de agua en Zona Costa ha crecido, al pasar de 80 millones de metros cúbicos a 150 millones anuales, por el acueducto.

Al hablar de la deuda de los organismos, el funcionario indicó que asciende a 5 mil millones de pesos, ya sea por créditos bancarios, adeudos con proveedores y energía. De esos 5 mil millones, alrededor de mil 900 millones corresponden a Ensenada, sólo detrás de Tijuana.

DESALINIZADORA Y PLANTAS DE TRATAMIENTO

Otro factor que ha agravado la situación de abastecimiento, es la falla en la toma de agua de la planta desalinizadora operada por Aguas de Ensenada, ya que de los 250 litros por segundo que debería aportar, solamente surte 120. A ello se suma que la planta vende el agua en 26 pesos y la CESPE la comercializa a 16 pesos.

En reunión con integrantes de Compañías Mexicanas de la Industria de la Construcción de Ensenada (COMICE), a finales de noviembre, el director de la paraestatal informó que las reparaciones que se hacen a la planta desalinizadora desde mediados de año y que se habían anunciado concluir en diciembre, fueron pospuestas para enero de 2022.

Al respecto, el titular de Seproa, Francisco Bernal, comentó que hay temas atorados en la planta por el colapso de una tubería; pese a ello, se está planeando ampliar la capacidad de la planta, que en una segunda etapa, contempla una capacidad de 500 litros por segundo.

Mientras que en opinión de Wenceslao Martínez Santos, representante del GIA, la necesidad de iniciar la segunda fase de la desaladora se ha planteado tanto al seno del organismo, como a las autoridades estatales para que esté en marcha en 2023.

“Es una inversión que se paga, la infraestructura para la segunda etapa de la desalinizadora está dentro de las tarifas que se pagan a la empresa Aguas de Ensenada, por supuesto que necesitamos nuevas fuentes de agua y tenemos que aportar a la desalación”, sentenció el ex diputado federal y ex presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Ensenada.

Además de poner en marcha la segunda etapa de la planta, Martínez Santos se pronunció por la construcción de una segunda, con un costo cercano a 2 mil millones de pesos, para lo cual se debería buscar un esquema de Asociación Público Privada o de participación.

Sobre el tema de la planta de tratamiento El Gallo, Francisco Alberto Bernal Rodríguez, de la Seproa, reconoció que hay serios problemas con la contaminación de la bahía por la falta de tratamiento en dicha planta, pero también se debe atender la planta de El Naranjo.

En ese sentido, informó que la Comisión Nacional del Agua ya intervino para suspender la descarga desde la planta hacia Playa Hermosa -que se mantiene desde el verano y la convierte en la más contaminada del país, de acuerdo con muestreos de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios-, y clausurarla, significaría “no tener donde disponer aguas tratadas o maltratadas”.

 

SE REQUIEREN CASI DOS METROS CÚBICOS POR SEGUNDO: GIA

De acuerdo con Wenceslao Santos Martínez, representante de Grupo Interdisciplinario del Agua, para abastecer a casi medio millón de ensenadenses en lo doméstico, industrial y turístico, son necesarios dos metros cúbicos por segundo, y que haya agua 24/7 para todos los sectores.

Con las fuentes actuales, Ensenada recibe alrededor de 800 litros por segundo y, de acuerdo con cifras de la CESPE, actualmente se cuenta con 900 litros por segundo de los mil 165 que deberían aportar los pozos de La Misión, Maneadero, Ensenada, Acueducto Río Colorado-Tijuana, la desalinizadora y la presa.

Como parte de la agenda del GIA, ya se definió la necesidad de agua, falta revisar la infraestructura y las fuentes de abastecimiento; en paralelo, se deben analizar las fuentes de saneamiento, ya que actualmente, sin agua suficiente, hay un grave problema de contaminación, “y con el agua necesaria estaríamos peor”, observó Santos.

Por ello, se requiere de una inversión emergente para solucionar parte del abasto, también para el tratamiento de aguas residuales y así proyectar el crecimiento a corto, mediano y largo plazos.

“Sabemos que el tema del agua no se va a resolver probablemente en estos seis años de gobierno, pero quisiéramos dejar programadas acciones multianuales y multisexenales para que no quede nada más como un programa de salvación”, acotó.

PLANTEA CESPE AUMENTO DE 10 A 14% EN TARIFA

La Comisión Estatal de Servicios Públicos de Ensenada presentó a la Comisión de Hacienda y Presupuesto del Congreso del Estado, un aumento de entre 10 y 14 por ciento a las tarifas del agua doméstica y comercial, además del 1% de indexación más la inflación mensual, con lo que pretende recaudar 917.69 millones de pesos en 2022.

Como ejemplo, un usuario doméstico que consume de 0 a 5 metros cúbicos, pasará de pagar 72.48 pesos en 2021, a 89.43 pesos en enero del próximo año; y en diciembre de 2022, terminará pagando 105.11 pesos por la indexación de 1% y la inflación mensual.

En el caso de la tarifa no doméstica, por un consumo de 0 a 5 metros cúbicos, en enero iniciaría con 635.41 pesos, para aumentar mes a mes hasta llegar a los 746.84 pesos.

La tarifa doméstica se actualizará un 10% en los rangos de 0 a 15 metros y 14% en los rangos posteriores a 15 metros. La tarifa no doméstica se actualizará en un 14% en todos los rangos, además del 1% indexado más la inflación mensual, a partir del febrero de 2022.

Directivos de la CESPE y de la Secretaría de Hacienda justificaron el incremento propuesto, debido a que sólo de esa manera se puede sostener la prestación del servicio -no así los compromisos financieros- en lo que se encuentran soluciones integrales.

El planteamiento de la CESPE ha generado rechazo entre empresarios y población en general, ya que consideran injusto pagar más por un servicio con el que no cuentan de manera constante. Funcionarios de la paraestatal recordaron que desde hace 12 años no se actualizan las tarifas del agua en Ensenada, y pese a ello, se cuenta con el agua más cara proveniente de la desalinizadora y el flujo inverso.

Expusieron que la CESPE ya no es capaz de operar con las tarifas actuales, no se puede crecer ni dar mantenimiento a la red, y, aun con el aumento, los consumidores no pagarán lo que cuesta producir y entregar el agua en el puerto.

Por último, entre las posibles acciones para hacer más eficiente el servicio, el director de CESPE, Jaime Alcocer Tello, anotó que se debe comercializar el agua residual para tener un ingreso de entre 150 y 170 millones de pesos anuales, pero actualmente se obtienen entre 5 y 7 millones; además, sugiere invertir en recargas de los acuíferos, combatir el clandestinaje y regularizar los desarrollos habitacionales.

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Autor(a)

Marco A. Flores
Marco A. Flores
Egresado de la licenciatura en ciencias de la comunicación por la Universidad Autónoma de Baja California. Ha sido reportero y jefe de información en diversos medios impresos, digitales y radiofónicos desde el 2007. Reportero del Semanario Zeta desde el año 2018.
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