Felipe Avitia Serellana alias “Boca de Bagre”, presunto líder operativo del Cártel de Sinaloa, y tres personas más, dos mujeres y un hombre, fueron vinculados a proceso por delitos estipulados en la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos.
Fue el Ministerio Público de la Fiscalía General de la República en Baja California, quien obtuvo del Juzgado de Distrito Especializado en el Sistema Penal Acusatorio con sede en Tijuana, el auto de vinculación a proceso.
Información publicada con anterioridad por ZETA, refiere que Felipe Avitia y tres personas más, fueron detenidos el 2 de octubre por elementos de la Guardia Estatal de Seguridad, en las inmediaciones del poblado Primo Tapia, en Playas de Rosarito en portación de dos armas de fuego cortas, tres armas largas, tres cargadores y 74 cartuchos útiles de diversos calibres; asimismo, fue asegurado un vehículo.
Según un comunicado, difundido el domingo 3 de octubre por la GESI, Avitia operaba en Playas de Rosarito donde vendía droga y hacía ejecuciones de integrantes de células delictivas de carteles contrarios.
El inicio de su carrera criminal fue en 2015 dentro del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en el municipio de Tijuana, donde desplazó al Cártel Arrellano Félix de distintos puntos de venta de droga al menudeo, lo que ocasionó el aumento de la violencia y narcomantas en las que ambos cárteles se amenazan mutuamente dejando evidencia de sus ejecuciones.
Más tarde, a inicios de 2019, se documentó la creación de un nuevo grupo delictivo identificado como La Poderosa Nueva Línea en la ciudad de Tijuana, identificando como jefe de la zona a Gustavo Germán Ayala, alias Tavo y/o Patachín, quien tenía como principal colaborador a David López Jiménez, alias Lobo y/o Cabo 20 y “Boca de Bagre”, como jefes de sicarios.
Posteriormente, “Boca de Bagre” fue identificado como jefe de sicarios para el Cártel de los Arellano Félix (CAF) tras su detención el 22 de mayo de 2019 por elementos de la extinta Policía Estatal Preventiva en la colonia Valle Verde delegación Sánchez Taboada, en Tijuana.
El 1 de junio de 2019 fue vinculado a proceso por la probable comisión de diversos delitos contra la salud y delitos estipulados en la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, en Tijuana. Además de ser acusado de cometer asesinatos y secuestros en la frontera.
Algunos de sus antecedentes delictivos son sus detenciones por parte de Policía Municipal de Tijuana por robo total de vehículo (2008), causar molestias (2004), realizar actos que inducen a los vicios (2015), averiguación previa por el delito de compra, suministro, trafique vehículos de motor robados (2008), así como registra en penitenciario por el delito de posesión de droga, y portación de arma de fuego de uso exclusivo del ejército (2019).
Después de la detención que se llevó a cabo en Mexicali el año pasado, Avitia Sarellana fue liberado en diciembre de 2020 para regresar a operar a Tijuana, pero esta vez bajo las órdenes de Alfonso “Aquiles” y René “La Rana” de los hermanos Arzate.
Para establecer su zona de operación en el municipio de Playas de Rosarito para dedicarse a la venta de droga, además de dedicarse al narcomenudeo y también ejecuciones de integrantes de células delictivas de carteles contrarios.
El dos de octubre también fueron detenidos y vinculados a proceso José Antonio Castro Machado, alias “Toño”, “Muerto”, “Pepe” y/o “Tony”; Perla Yaneth Romero Miranda, alias “Jeysson”, de 24 años, originaria de Tijuana, Baja California; Mónica Alejandra Delgado Garciglia, de 29 años
Cabe destacar que el Juez Especializado estableció como medida cautelar prisión preventiva oficiosa para los procesados y fijó un plazo de dos meses para el cierre de la investigación.
