El incremento de los precios en México seguirá durante 2022. Ante ello, el Banxico seguirá elevando su tasa de interés y afectará al crecimiento económico, prevén especialistas
En septiembre, la inflación en Baja California registró un alza mensual de 0.94 por ciento, ubicándose como la tercera entidad federativa del país con el mayor incremento. A tasa anual, la inflación se situó en 6.69%, cifra superior a la media nacional y la mayor desde 2019, señaló Roberto Valero, presidente del Centro de Estudios Económicos de Baja California.
En el caso específico de Tijuana, la inflación mensual creció 1.10% para ubicarse en 6.78% a tasa anual. En Mexicali, el aumento mensual fue de 0.76% y la inflación anualizada se situó en 6.61%, “lo más delicado es que los precios de los alimentos se encuentran en su nivel máximo en cinco años; como ejemplo, la calabacita ha subido 38%, el pollo 14% y la carne de res 11.24%”, expuso el especialista.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el precio de la canasta básica de consumo mínimo aumentó 0.78% mensualmente y 6.87% respecto a septiembre de 2020.
“Todos estos aumentos hicieron pedazos el incremento al salario mínimo que nos presumieron a principio de año. Hablamos que los trabajadores de dos salarios mínimos que tuvieron menor incremento salarial ya traen una pérdida adquisitiva importante, de casi 4%”, resaltó Valero.
Agregó que el llamado “impuesto de los pobres” le pega más a la población de menores recursos, inclusive obligándola a modificar sus dietas.
Ana, un ama de casa, comentó a ZETA que para enfrentar el alza de los alimentos compra productos en oferta: “Si por ejemplo, el pollo está en oferta, compro cuatro kilos y luego elijo cómo lo voy a preparar, pero no puedo llegar a decir ‘deme un kilo de carne, uno de pollo’ o lo que se me antoje, porque el dinero no me rinde”.
María Isabel, otra ama de casa, observó que los abarrotes han incrementado su precio entre 50 y 70%. Su familia, de cuatro integrantes, también resintió el aumento del costo del gas LP de principios de año, y aunque hace unas semanas “hubo un ligero descenso”, otra vez volvió a subir.
El sábado 10 de octubre, la Comisión Reguladora de Energía (CRE) informó que aumentaría el precio máximo del gas LP en México para la semana que está transcurriendo. En Tijuana y Playas de Rosarito, el precio máximo por litro es de 12.32 pesos, un alza de 16.6% respecto al 9 de agosto. En la misma proporción aumentó el precio del kilogramo, al llegar a los 22.81 pesos.
En Mexicali, el incremento del combustible fue de 1.82 pesos el precio del litro, y de 3.37 pesos el kilogramo en el lapso referido. El municipio con el precio más alto es San Quintín, donde el kilogramo de gas LP cuesta 28.94 pesos, y el litro, 15.62 pesos.
Roberto Valero comentó que la inflación de las gasolinas en Baja California incrementó alrededor de 7% a tasa anual. De ahí que, en algunas estaciones de servicio de Tijuana, el litro de la gasolina regular se comercialice en 19.99 pesos, el de Premium en 22.45 pesos y el de diésel en hasta 20.39 pesos.
Respecto al incremento de los energéticos, no se puede cumplir la promesa del Presidente Andrés Manuel López Obrador de no aumentar el precio de los combustibles, ya que el petróleo está subiendo a nivel mundial.
Para María Isabel, el panorama económico para el cierre del año y principios de 2022 “se ve difícil, sobre todo la cuesta de enero, que no nada más es enero, sino varios meses”, previó. Para sufragar los principales gastos, como el de la comida, su familia trata de ahorrar en otras cosas.
Especialistas consultados por ZETA indicaron que debido a que la inflación tiene un gran componente externo, el gobierno mexicano no debe engañar a la población ni intentar remediar una situación con soluciones de corto plazo que se sumarán a otros problemas del país.
Por razones políticas, los gobiernos tratan de que los efectos de la inflación sean mínimos sobre la base votante de la que dependen, de ahí que, como otros en el pasado, consideren otorgar subsidios, como sería el Gas Bienestar propuesto por el Presidente López Obrador.
Cuando estos apoyos son de corto plazo, ante una situación imprevista resultan razonables y justificados, pero cuando se habla de mantenerlos en el mediano y largo plazos, generan un problema que afecta la capacidad del Estado para brindar otros bienes y servicios, como salud y educación.
Es decir, los subsidios de largo plazo como el Gas Bienestar presionarán las finanzas públicas y generarán un problema adicional a los que ya se traen, como el de las jubilaciones. En suma, “ese modelo ya demostró que no es sostenible”, señaló Enrique Rovirosa, ex presidente del Colegio de Economistas de Mexicali.
“En general, a la sociedad mexicana no le está yendo bien no de ahorita, sino de muchos años atrás”, ya que el sistema de partidos político no lo permite ni lo permitirá, dado que “todos los partidos se han convertido en mafias de poder en búsqueda de atender sus intereses personales o de grupo, y los intereses de la mayoría del pueblo mexicano quedan en segundo plano”, aseveró.
Por otro lado, Roberto Valero, titular del Centro de Estudios Económicos de Baja California, advirtió sobre el aumento en el tipo de cambio en parte influido por los indicadores económicos de Estados Unidos, la época del año y la expectativa de la apertura de la frontera. En casas de cambio de Tijuana, el dólar se vendió hasta en 20.250 pesos al cierre del miércoles 13 de octubre.
Datos del Banco de México (Banxico) indican que si bien, la moneda mexicana se apreció 11.80 centavos el miércoles, el dólar siguió vendiéndose por encima de la barrera psicológica de los 20 pesos, al ubicarse en 20.7580 pesos. Mientras que en ventanillas bancarias de la Capital del país, el billete verde se comercializó hasta en 21.11 pesos.
En opinión de Valero, el alza en los productos está haciendo que los bajacalifornianos opten por tener más de un empleo ante salarios bajos que no alcanzan, “alrededor del 40% de los trabajadores en Baja California trabajan más de 48 horas, lo que quiere decir que tienen más de un empleo”.
ALZA EN PRECIOS DURARÁ TODO 2022
A nivel nacional, la inflación en México aumentó mensualmente 0.62%, para ubicarse en 6% a tasa anual. Cifra que duplica la meta del Banxico de 3% (+/- un punto porcentual). Recientemente el banco central ajustó al alza su pronóstico de inflación para el cierre de 2021, de 5.7 a 6.4% a tasa anual, y previó que los choques que han incidido en la inflación serán transitorios, por lo que el indicador podría comenzar a converger hacia el rango objetivo dentro de seis meses.
Sin embargo, Enrique Rovirosa consideró “difícil” que disminuya la inflación en ese lapso y estimó que esta continuará por encima de la meta del Banxico a lo largo de 2022, para convertirse en uno de los principales problemas económicos. “En un país donde más del 50% de la población es pobre, es de pensarse cómo vamos a resolver este problema”, sentenció.
A nivel interno, diversos factores estimularon el crecimiento de los precios en el país, como la implantación de algunas políticas que han puesto en alerta a ciertos sectores de la economía. Es decir, cuando la relación entre el gobierno en turno y los inversionistas no es del todo favorable, se traduce en un aumento del grado de riesgo para las inversiones nacionales y extranjeras, haciendo que los inversionistas consideren que deben tener una utilidad que compense ese riesgo.
Otros factores fueron los apoyos sociales a los grupos más marginados, el incremento de los salarios mínimos y las políticas de fomento a la inversión en la frontera a través de la reducción de la tasa del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y al Impuesto Sobre la Renta (ISR), así como los apoyos que el Banxico dio al sistema financiero para ayudar a la economía nacional ante problemas de recesión que traía consigo COVID-19, consideró el ex presidente del Colegio de Economistas de Mexicali.
“Se sabía que eso iba a afectar a los precios nacionales. No iba a ser de inmediato porque, cuando se está viviendo una situación recesiva, inicialmente los precios tienden a caer, pero cuando se da una reactivación -como se ha dado en 2021-, el rebote económico da lugar a que se hagan los ajustes por la disrupción que se tuvo por la pandemia con el bajo crecimiento en 2020”.
Lo anterior no es exclusivo de México, sino un tema global. Aquí viene la parte de la inflación importada, en la que también han afectado el apoyo económico otorgado por el gobierno estadounidense y la distorsión que estos han generado en el mercado laboral.
Además, destaca el rebote de los precios internacionales de los energéticos debido al aumento de la demanda.
Al 13 de octubre de 2021, el precio de la mezcla mexicana de petróleo reportó una ganancia de 60% en lo que va del año, al venderse en 75.85 dólares por tonel. En tanto, el precio del barril del petróleo de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ha incrementado 99.8% en los últimos 12 meses.
Por otro lado, derivado de la pandemia de COVID-19, se interrumpieron procesos productivos como el de los microchips para la industria automotriz, componentes electrónicos que también son utilizados en la fabricación de lavadoras, refrigeradores y microondas. “Ha habido una disminución de la producción, y en algunos casos hasta el cierre temporal de las cadenas productivas”, apuntó Rovirosa.
Adicionalmente, la pandemia originada por el virus SARS CoV-2 (COVID-19) generó una crisis de contenedores, ya que primero bajó la demanda de productos a causa del confinamiento, afectando la distribución que venían haciendo las líneas navieras que transportan mercancías.
En el último año, el precio del transporte marítimo se incrementó en más de 300%. “Ese incremento en el costo de transporte de productos terminados y materias primas, obviamente se tiene que reflejar en los precios”, remató Enrique Rovirosa.
EL PAÍS TENDRÁ MENOR CRECIMIENTO ECONÓMICO
Esta semana, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ajustó su pronóstico de crecimiento para la economía mexicana de 6.3 a 6.2% del Producto Interno Bruto (PIB). No obstante, el rebote es inferior a la caída de 8.5% del PIB en 2020, “la recesión más profunda experimentada en un siglo”.
La expectativa para 2022 también se ajustó a la baja, de 4.2 prevista en julio pasado, a 4.0%. Dato que estaría en línea con la proyección de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en el Paquete Económico de 2022, a avalarse en el Congreso de la Unión en próximos días.
Menos positiva es la expectativa del Banxico, que prevé un crecimiento de 6.2% para este año, y de 3% para 2022. Jonathan Heath, subgobernador del banco central, estimó que será hasta 2023 cuando la economía recupere los niveles de 2013 y haya una expansión, aunque “relativamente lenta”, debido a la falta de inversión privada.
Asimismo, descartó que actualmente el país viva estanflación, “estamos en un proceso de recuperación, estamos creciendo” por arriba del 6%.
Acorde con Enrique Rovirosa, la estanflación “viene de las dos palabras: estancamiento e inflación, es decir, que no creces, pero tienes inflación, es el peor de los mundos” y sería un problema más serio de lo que ahora se piensa.
El riesgo de que eso suceda radica en que, para contrarrestar la alta inflación, el banco central tendrá que elevar la tasa de interés, provocando un menor crecimiento económico, que a su vez repercutirá negativamente en la generación de empleo, “de modo que las cosas se van a complicar”, advirtió el economista.
El 30 de septiembre, el Banxico elevó 25 puntos base su tasa de interés, con lo que se ubicó en 4.75% ante una tendencia al alza de la inflación. En tanto, Moody´s Analytics señaló que para que la inflación regrese al objetivo del Banco de México, este tendría que elevar la tasa de interés en 6% durante el primer semestre del próximo año.
Otro riesgo que se avizora, es la quiebra de la empresa inmobiliaria Evergrande, que podría generar una crisis hipotecaria en China, detonando una crisis financiera global similar a la de 2008 y 2009, ya que el país asiático es la segunda economía mundial.