Este martes se reunieron de nuevo en el salón de sesiones, sin embargo, la munícipe tijuanense no había emitido convocatoria para reanudar los trabajos edilicios
Tras el receso que la alcaldesa de Tijuana, Karla Patricia Ruiz Macfarland, decretó el día de ayer, lunes 27 de septiembre, a propósito de la sesión extraordinaria de cabildo número 58, buena parte de los regidores permanecieron en el salón de sesiones hasta las 12:00 de la noche, a la espera de que se reanudara tal actividad.
Ni la munícipe tijuanense ni el secretario general de gobierno, Joel Fabián Guardado Reynaga, reaparecieron en el recinto, en el que habían dado inicio a la reunión destinada a aprobar el protocolo para la toma de posesión de la alcaldesa electa, Montserrat Caballero así como la regularización de bibliotecas municipales. La síndico procuradora, María del Carmen Espinoza Ochoa, en ningún momento se presentó a la sesión.
El receso procedió en razón de que la regidora Mónica Vega Aguirre propuso incluir un tema relativo a dejar sin efectos el acuerdo sobre la transferencia a la Administración Pública Municipal del Servicio de Agua Potable, el cual fue tomado por el cabildo el 31 de octubre de 2013 (durante el XX Ayuntamiento) y publicado en el Periódico Oficial del Estado el 3 de agosto de 2021.
El regidor Luis Antonio Quezada Salas y el secretario de gobierno, Joel Fabián Guardado Reynaga, se mostraron en desacuerdo con que en caso de ser aprobado para su discusión, el asunto se abordara con carácter de prioritario, tal como había planteado Vega Aguirre.
La alcaldesa intervino para disponer que si así quedaba acordado por el cabildo del XXIII Ayuntamiento se enlistara como punto 3.4 (cuando Vega Aguirre proponía incluirlo como 3.1). Sin embargo, a petición de la regidora Edna Mireya Pérez Corona, Ruiz Macfarland concedió otorgar el receso, en el ánimo de reanudar la sesión ese mismo día, pues precisó que la suspensión se extendería sólo por 10 minutos.
El regidor José Refugio Cañada García refirió a ZETA que luego de que el receso se decretara a las 16:00 horas hubo ediles que estuvieron esperando hasta las 12:00 de la noche.
Detalló que de acuerdo con el reglamento interno del cabildo, la alcaldesa tiene un lapso de 24 horas, contadas a partir de que se suspendió la reunión de trabajo, para volver a convocar y de esa manera reanudar la sesión. A decir de Cañada García, los regidores que se quedaron esperándola, elaboraron un posicionamiento a fin de solicitarle que convoque de nuevo antes de que venza ese período.
El entrevistado explicó que en caso de que Ruiz Macfarland no emita la convocatoria, el presidente de la Mesa Directiva del Congreso del Estado, Juan Manuel Molina García, deberá tomarle protesta al nuevo cabildo, el 1 de octubre a las 00:01 horas. Afirmó que existe la posibilidad de que la presidente municipal ya no convoque para reanudar la sesión extraordinaria, toda vez que “ayer ya no regresó”.
Según indicó la regidora Mónica Vega Aguirre a este semanario, es lamentable que haya quedado pendiente la aprobación del protocolo para la toma de posesión establecido en la Ley de Régimen Municipal, “con tal de no debatir un tema que es de interés público y de los tijuanenses (ello en alusión a la disputa por la municipalización del organismo operador del agua). La edil asentó que para las 13:40 horas de este martes 28, en el salón de sesiones había regidores atentos por si la presidenta municipal regresaba “a presidir la sesión”, para cuyos efectos no había convocado.
“Los regidores aquí estamos, esperando y dispuestos a seguir con el desahogo del orden del día”, remató Vega Aguirre.