En unos días más, el 1 de octubre, habrá relevos en tres de las alcaldías de nuestra Baja California, porque fueron reelectos la alcaldesa de Rosarito y el alcalde de Ensenada. Si bien Aracely Brown Figueredo no unifica a sus gobernados en alabanzas sobre su capacidad (podría asegurarse que está entre azul y buenas noches) lo que es el de Ensenada, se lleva las palmas por su ineficiencia, incapacidad y desconocimiento sobre la administración pública y/o el arte de gobernar.
Solamente estando deschavetada alguna persona de Baja California, puede desear que los próximos mandatarios de los 5 municipios (recordando que San Quintín está con un Consejo Municipal que suponemos no fue relevado, porque tiene poco tiempo) no hagan bien las cosas, por el bien de sus gobernados.
Claro que la ciudadanía está pendiente de sus actuaciones; y pronto las redes sociales, donde todos pueden opinar y hasta insultar, sin que tengan que rendir cuentas, se llenarán de opiniones. Nos gusta más saber las opiniones de la ciudadanía que en forma directa, hace los comentarios.
Resulta más que irónico que los que se van, especialmente Amador, el cuasi perfecto según su autodiagnóstico, hayan insistido, junto con el mini gobernador, que en el pasado los panistas no hicieron nada bueno. Salvo el lamentable caso de Kiko, si se revisa los logros, ninguno otro superó en ineficiencia, abuso de autoridad y destrucción como Bonilla.
Antes de que llegara el grupo político de AMLO, no se estilaba hacer encuestas nacionales, pagadas por supuesto, para recibir nombramientos de “el mejor”, “el muy-muy”, “el perfecto”. Al rato nos dirán que el actual gobernador recibirá “Honoris Causa” de la república. Y por eso está invitado a integrarse al gabinetazo federal que hoy padecemos.
Es un hecho, los que hoy nos gobiernan son tan considerados con ellos mismos que solo ven la paja en el ojo ajeno y no la viga que traen en el propio. Para calificarse son generosos; desde el púlpito de Palacio Nacional se llenan de elogios, y en contraparte, critican sin cansarse a los que dicen verdades contra ellos.
Lo más grotesco es que el Presidente siga insistiendo que no es verdad que la muerte de niños con cáncer sea por falta de medicamentos, que los padres son grandes mentirosos pues medicamentos hay para dar y prestar.
Nota 1. El béisbol fue en Tijuana el deporte preferido de niños y adultos. Por eso nos enorgullece el espectacular triunfo del equipo Toros, campeones de la Liga Mexicana de Béisbol. Gran motivo de orgullo y alegría para nuestra ciudad.
Nota 2. Aremi Fuentes, olímpica que llenó de orgullo a Chiapas (donde nació) y a Baja California (donde se forjó como deportista), ganadora medalla de bronce, fue engañada por el gobernador Bonilla, quien presumió la entrega de un cheque como estímulo; pero Aremi asegura que es de cartón, no sirve, no tiene fondos.
Nota 3. Por 18 años el M. C. Saúl Castro Verdugo trabajó para hacer de nuestro estado un ejemplo de éxito en el deporte. En dos años, el que lo relevó como director del INDEBC acabó con todo lo logrado. Ojalá que la próxima gobernadora nombre a una persona con capacidad, historia de éxito y apasionada del deporte.
Luz Elena Picos es directora de Red Social de Tijuana.
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