Citomegalovirus. Los citomegalovirus pueden causar infecciones de gravedad variable. A menudo se produce como un síndrome de mononucleosis infecciosa con ausencia de faringitis. La enfermedad grave se manifiesta con renitis, HIV, trasplante de órganos y pacientes con inmunodeficiencia. La enfermedad grave se observa en recién nacidos e inmunodeficientes. No existe vacuna ni tratamiento efectivo.
Conjuntivitis vírica. La conjuntivitis viral es una infección conjuntival aguda extremadamente contagiosa, que suele deberse a adenovirus. Los síntomas incluyen irritación, fotofobia y secreción acuosa. No existe vacuna.
Coronavirus. Los coronavirus son una extensa familia de virus que pueden causar enfermedades tanto en animales como en humanos. En estos, se sabe que varios coronavirus causan infecciones respiratorias que puede ir desde el resfriado común hasta enfermedades más graves, como el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS) y el síndrome respiratorio agudo severo (SRAS). El coronavirus que se ha descubierto recientemente causa la enfermedad por coronavirus, COVID-19. Ya hay vacunas.
Dengue. Ocasionada por cuatro virus emparentados, se transmite mediante la picadura del mosquito aedes aegypti, que se encuentra en regiones tropicales y subtropicales, como el archipiélago de Indonesia, México, el Caribe, Centro y Sudamérica, el sudeste asiático y África subsahariana. A pesar de estar emparentada con la fiebre del dengue hemorrágico, son dos enfermedades distintas, la segunda con más síntomas graves. En la actualidad, dos mil millones de personas viven en zonas vulnerables al virus del dengue. Existe vacuna para ser utilizada en zonas endémicas, entre los 9 y 45 años.
Diarrea por rotavirus. El rotavirus es un virus frecuente que infecta el recubrimiento interno de los intestinos. Causa vómitos y diarreas, sobre todo en los bebés y los niños pequeños. Existen dos vacunas contra el rotavirus; ambas son seguras.
Encefalitis. La mayoría de los casos de encefalitis son virales. Muchos de estos virus se transmiten a los seres humanos a través de la picadura de artrópodos que ingieren sangre, principalmente mosquitos y garrapatas; estos virus se denominan arbovirus (al ser transmitidos por artrópodos). La prevención de estas infecciones requiere evitar las picaduras de los mosquitos y garrapatas que se encuentran en animales. Existe una vacuna contra la encefalitis japonesa, utilizada en niños mayores de dos meses y a los visitantes de Asia. Existen dos vacunas para la encefalitis centroeuropea, una para la venezolana y ninguna para la de San Luis.
Fiebre amarilla. La fiebre amarilla es una enfermedad vírica aguda, hemorrágica, transmitida por mosquitos infectados. El término “amarilla” aluda a la ictericia que presentan algunos pacientes. Los síntomas son: fiebre, cefaleas, ictericia, dolores musculares, nauseas, vómitos y cansancio. Existe vacuna de una sola dosis, utilizada para los viajeros de zonas endémicas de África, Centro y Sudamérica.
Fiebre de Lassa. El primer caso reportado de infección en humanos fue el de una enfermera nigeriana, y fue descubierto en 1950; sin embargo, el virus se logró aislar hasta 1969. El contagio se da por el contacto directo con enseres domésticos contaminados por excremento de ratón de Benín. Existe una vacuna utilizada para los viajeros de África Occidental.
Atentamente,
Dr. José Fernando Jaramillo Cisneros.
Tijuana, B.C.
Correo: drferja@hotmail.com