La celebración de actos masivos en Rosarito, Ensenada y el Valle de Guadalupe alertaron a las autoridades de Salud sobre el incremento de casos de contagios de COVID-19, en la llamada tercera ola. Nosocomios incrementaron sus hospitalizaciones, pero los actos de entretenimiento no cesaron. Aun con personal médico que no se da abasto, gobierno le apuesta a la reactivación de la economía. Entre 7 y 10 días más, aumentarán casos activos COVID-19. En vacunación, Baja California ha sido rezagada por el gobierno federal
Baja California está viviendo el pico de la tercera ola de COVID-19, con incremento de casos activos, confirmados, hospitalizaciones, mientras que continúan las autorizaciones de eventos masivos que el Gobierno del Estado se empeña en minimizar, a través de la aplicación de los protocolos de higiene.
No obstante a que Tijuana lidera la lista de municipios con mayor cantidad de casos activos, por ser la ciudad más poblada del Estado, Rosarito y Ensenada han aumentado su incidencia por cada 100 mil habitantes en las últimas 2 semanas, aunque las autoridades de Salud niegan que se deba al Baja Beach Fest, así como a la Feria de Tijuana.
La semana pasada, Rosarito registró un máximo de 49 casos activos el 15 de agosto con 43.61 por cada 100 mil habitantes de incidencia; sólo 61 centésimas por encima de San Diego, California, y Ensenada con 182 casos el mismo día, con una incidencia de 38.71.
Una semana después, los números casi se han duplicado. El 20 de agosto el Quinto Municipio registró 83 casos activos, el máximo de la semana, con una incidencia de 73.87 por cada 100 mil habitantes.
Mientras que en Ensenada, el 21 de agosto tuvo 256 casos activos, también fue el día récord para la tercera ola en el Estado, con mil 466 de ellos, sólo 32 por debajo de la cifra más alta en todo lo que va de la pandemia de mil 498 casos el 23 de enero de 2021, justo en la segunda ola; de incidencia tuvo 55.61 por cada 100 mil habitantes, sólo por debajo de Rosarito.
Aun así, las autoridades estatales niegan que el incremento se deba a los eventos masivos autorizados últimamente como el Baja Beach Fest, las Ferias de Tijuana y Rosarito, así como los conciertos en el Valle de Guadalupe de la Banda MS y grupo Intocable.
Alonso Pérez Rico, titular de Salud en el Estado, comentó que con base en lo ocurrido en el evento de Lollapalooza, en Chicago, Illinois, donde se dieron cita 385 mil personas y sólo hubo 203 contagios, esperan que en la región sea hasta después de 21 días cuando se reporten.
“A pesar de que ya pasó su periodo de incubación, tenemos que seguir monitorizando y analizando. Estamos hablando de que hemos pasado, desde el primer viernes, 10 días. Haré lo mismo que hicieron en Chicago, se esperaron 21 días a partir del último del evento y analizaron qué cifras y datos duros había”, comentó el funcionario estatal.
Por otro lado, señaló que han estado en contacto con los organizadores de los eventos, y hasta el momento, no han tenido brotes, ya que no se ha visto reflejado en los hospitales y clínicas de fiebre.
INICIAN RECONVERSIÓN DE HOSPITALES
Sin embargo, las cifras van subiendo y las hospitalizaciones por igual. Desde el 18 de agosto se comenzó con la habilitación de Urgencias Pediátricas de la Clínica 1 del Seguro Social, ya que ya había 3 menores en aislamiento por COVID-19 y necesitaban estar listos en caso de que llegaran más.
Al mismo tiempo, dos pisos del Hospital General de Tijuana se dispusieron para atender a 50 pacientes con la enfermedad; asimismo, el área de Urgencias se dividió en dos, una para los pacientes COVID-19, y la otra sólo para las personas víctimas de heridas de arma de fuego.
A una semana del inicio de la reconversión, en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), se optó por habilitar Urgencias y preparar todo un piso en el caso de aumento de pacientes; la otra opción era dejar que la Clínica 20 se hiciera cargo de sus derechohabientes con el virus SARS-CoV-2, pero se descartó.
Desde julio y principios de agosto, personal de Salud de la Clínica 1 ha apurado sus tratamientos, consultas, cirugías y atenciones a los derechohabientes, con el fin de estar listos en caso de aumento de hospitalizaciones.
Entre médicos y personal de Enfermería platicaron a este Semanario estar cansados ante lo extenuante de la pandemia, por lo que debían estar listos si llegaba la tercera ola.
Sin embargo, para Pérez Rico la reconversión de hospitales obedece a la llegada de la “cuarta ola”, prevista a partir de diciembre de este año, junto con la llegada del invierno y otras enfermedades respiratorias y otras variantes antigénicas.
“Lo que no queremos es ver pisos vacíos, eso sería una injusticia, por decirlo de alguna forma. Lo que sucedió en la primera y segunda ola donde teníamos pisos vacíos y pacientes no COVID que requerían atención, pues ahora entendemos que este modelo de híbrido o mixto, que fue súper criticado, es lo que va a ser, es una necesidad para manejar el COVID”, expresó a ZETA.
Destacó que las hospitalizaciones y casos nuevos confirmados se debe a que se están haciendo más pruebas, pues entre la primera y segunda ola se hacían en promedio 350 pruebas, y ahora con el uso de exámenes antigénicos, se hacen hasta 700 al día: “Duplicamos la capacidad de poder diagnosticar y eso siempre es favorable”.
Asimismo, destacó que el invierno llegue con nuevas variantes, no sólo la Delta, sino la Lambda, en la que se está previendo que haya muchos casos y hospitalizaciones.
BC NO ES PRIORIDAD EN VACUNACIÓN FEDERAL
Después de que Baja California alcanzara el 78 por ciento de vacunados -80 por ciento considerando a quienes se inmunizaron en Estados Unidos-, dejó de ser prioridad para la Federación, en cuanto a la distribución del biológico.
El Secretario de Salud en el Estado señaló que hay otras entidades federativas que no han alcanzado ni el 40 por ciento de vacunación, por lo que se les está dando prioridad por encima de Baja California.
Respecto a las 8.5 millones de vacunas que Estados Unidos prometió enviar a México, es probable que ninguna se venga al Estado, “el que determina quién manda y cómo manda es el Gobierno Federal, a través del Comité de Vacunación Federal”.
Y continuó: “Para Baja California, el tener el 80 por ciento de esquema de vacunación completo nos pone como una de las entidades federativas con mayor índice de tasa de vacunación, entonces, no seríamos los primeros en la lista, porque hay estados que no tienen ni 40 por ciento de vacunación”.
PERSONAL DE SALUD, EXHAUSTO
Trabajadores del sector Salud, tanto del IMSS como de Isesalud, comentaron a ZETA sentirse cansados y preocupados ante la llegada de la tercera ola, el incremento de hospitalizaciones y la autorización de eventos masivos.
“El desgaste del personal de Salud está en su nivel más alto. Que abran todo y que sobreviva el que pueda”, mencionaron a este Semanario, en referencia al también hartazgo que hay entre ellos, “hay muchos brotes en las fábricas, los estamos recibiendo en las Unidades de Medicina Familiar”.
Alonso Pérez Rico coincidió con que el personal médico está exhausto, “no están cansados, están lo que le sigue porque van 15 meses de una batalla continua, constante, con miedo, nervios, cansancio, lágrimas, desgaste. Tenemos que aprender a vivir en esta nueva normalidad, en donde hemos comprobado que los eventos masivos llevados a cabo con esquemas de vacunación se pueden hacer seguros”.
Recalcó que, como médico operativo, es fácil decir que un evento masivo es incorrecto, sin embargo, como médico administrativo era cuestión de aceptar que esas personas de una u otra forma iban a venir a Baja California.
“Cómo y cuándo quieren que estén 10 mil personas, sin ningún protocolo, sin saber si están vacunados o no y nadie diciéndoles ‘ponte tu cubrebocas’, o en un evento donde sí se están cuidando, ése es el análisis que los no operativos tenemos que hacer”, defendió.
Pérez Rico precisó que tienen 400 contratos por parte del Insabi para el personal de salud, los cuales esperan se renueve para el próximo año.
Contradicciones en eventos masivos
Cuatro días antes del concierto de la Banda MS en Hacienda Chichihuas, carretera Libre Ensenada-Tijuana, la Secretaría de Salud de Baja California emitió un oficio de “no inconveniente” para la realización del evento.
En el documento OT/0533/2021, fechado el 17 de agosto, el Secretario de Salud, Alonso Pérez Rico, informó a Marlon Rafael Helu Figueroa, de Five Star Concerts, que después de haber realizado una revisión minuciosa del plan sanitario presentado para llevar a cabo el evento de la Banda MS “se concluyó que cumple con todos los lineamientos indispensables de seguridad sanitaria para prevenir y reducir el riesgo para contagio de casos de COVID-19”, con un aforo máximo de 6 mil personas.
Para esa fecha, los organizadores ya habían vendido miles de boletos; misma situación que en el otro evento a celebrarse el mismo día en la vinícola Barón Balché con el grupo Intocable; ambos también con permisos municipales.
Sin embargo, el 19 de agosto la Coordinación Estatal de Protección Civil, a cargo de José Salvador Cervantes, giró dos oficios a igual número de promotores informando que “una vez revisada la documentación entregada, esta coordinación no otorga la anuencia” por incumplir lo establecido en la Ley de Protección Civil y Gestión Integral de Riesgos del Estado de Baja California.
Aunque en ninguna parte de los oficios se menciona la palabra cancelado, sí se “exhorta” a los organizadores a no realizar los conciertos y se les advierte que en caso de hacer caso omiso se tomarán las medidas necesarias para proteger a los ciudadanos.
El vienes 20 de agosto, el tema fue retomado por el Secretario de Salud, en la transmisión matutina del Gobernador Jaime Bonilla. Pérez Rico dijo que ambos eventos no se llevarían a cabo, al no contar con anuencia de Protección Civil estatal “por situaciones técnicas”, que nunca aclaró.
Así, el funcionario que ha insistido en que la última palabra en autorización de actividades, eventos y aforos compete a la autoridad sanitaria, pasó por alto el no inconveniente firmado por él mismo el 17 de agosto.
Aunque los organizadores no fijaron una postura pública sobre el diferendo, a través de sus redes sociales insistieron en que los conciertos estaban 100 por ciento confirmados. La tarde de ese mismo viernes, según trascendió entre empresarios y organizadores de eventos, los promotores se reunieron con autoridades estatales para “destrabar” el tema.
Que siempre sí, con vigilancia de protocolos
Después de la incertidumbre generada por el gobierno estatal, el sábado 21 de agosto -día de los conciertos-, de nueva cuenta el Secretario de Salud apareció en la transmisión matutina del Gobernador, y ahí reculó: “Los dos eventos están autorizados”, respondió Alonso Pérez Rico tras ofrecer una disculpa “por la confusión y molestia”.
El manejo de la situación contrastó con lo ocurrido dos fines de semana consecutivos en el Baja Beach Fest de Rosarito; autoridades estatales y municipales salieron a defender la realización del evento que, según cifras oficiales, reunió más de 54 mil personas el primer fin de semana.
Para poder ingresar a los conciertos de MS e Intocable se montaron filtros de acceso en los que los asistentes, además de llevar su boleto, debían mostrar el certificado de vacunación o una prueba rápida negativa de COVID-19.
El 90 por ciento debió ingresar con comprobante de vacunación contra el virus, y el 10 por ciento restante con prueba rápida negativa. En el caso de Intocable, junto a la entrada del evento se montó una carpa que ofrecía pruebas rápidas por 700 pesos.
En la entrada se tomaba la temperatura, se ofrecía gel para las manos y se debía portar cubrebocas. Adentro la situación fue otra: mesas con hasta 12 sillas, sin sana distancia ni cubrebocas.
Según cálculos del gobierno municipal, el fin de semana del 21 al 22 de agosto se generó una derrama económica de 3.5 millones de dólares en el municipio.
El miércoles 25 de agosto, el Alcalde Armando Ayala preguntó a sus seguidores de redes sociales, en la transmisión Presidente en línea, “si usted considera que es tiempo de reactivar los eventos masivos en el municipio, siempre y cuando se cumplan con todos los protocolos sanitarios COVID”.
El resultado fue 57 por ciento a favor, 42 por ciento en contra y uno por ciento, indiferente. En lo que resta de agosto y hasta octubre se tienen programados siete conciertos en la zona.
Fue bastante atropellado: Agatón
Para la presidenta de la Comisión de Turismo en el Congreso del Estado, Claudia Agatón, lo sucedido el fin de semana de conciertos fue “bastante atropellado”; a promotores y asistentes primero se les dijo que sí, después que no, “ya no debe pasar”, insistió.
Consideró que en eventos en los que haya una relación salud-economía se deben dejar muy claros los puntos de partida.
Al respecto, el presidente de la Asociación de Vinicultores de Baja California, Leonardo Torres Lerdo de Tejada, comentó que la autorización y posterior negativa genera incertidumbre, un reflejo de lo que sucede actualmente en la zona vinícola.
No hay que profundizar mucho para ver que, ante una crisis sanitaria, organizar eventos masivos puede tener un impacto negativo en la salud por la aglomeración de personas, mientras que por otro lado el Valle de Guadalupe no cuenta con infraestructura para ello, por lo que se contraviene la actividad agrícola, reflexionó.
Mauricio Cantú, Secretario de la Mesa Directiva de Provino, afirmó que en el caso de las Fiestas de la Vendimia se tuvieron aforos muy pequeños, como en la gala del vino con 200 personas y la muestra del vino con 500, al aire libre y atendiendo los protocolos sanitarios correspondientes. Marcos Flores
