La Federación Mexicana de Golf A.C. manifestó su “total desacuerdo y rechazo” a la declaratoria de utilidad pública con la que el gobierno de Baja California -encabezado por Jaime Bonilla Valdez- inició el proceso de expropiación del Club Campestre de Tijuana.
Lugar que surgió en 1948 con el objetivo de que fuera un espacio para practicar ese deporte, entre otras actividades sociales y deportivas, y cuyo terreno e instalaciones la administración de Jaime Bonilla Valdez pretende expropiar y convertir en un parque público.
En opinión de la Federación Mexicana de Golf dicha declaratoria publicada el 13 de abril pasado “atenta flagrantemente contra el derecho a la propiedad privada consagrada” en la Constitución mexicana.
El Club Campestre de Tijuana es una asociación que da servicio a diversos ciudadanos de la ciudad, independientemente de aportar diversos beneficios sociales en la zona, tales como derrama económica, creación importante de empleos directos e indirectos para la población.
Así como beneficios ambientales por absorción de carbona y recolección de aguas pluviales, indicó la Federación Mexicana de Golf en un comunicado de prensa, difundido este 16 de abril de 2021.
“Tenemos plena confianza en que la declaratoria de utilidad pública se resolverá en términos de los procedimientos legales correspondientes y ante el Poder Judicial, anticipando nuestro pleno respeto para ellos y seguros de que se resolverá el asunto conforme a derecho y no conforme a consignas o caprichos de nadie”.
Por último, manifestó su respaldo total al Club Campestre de Tijuana, a sus golfistas y a todos sus socios o asociados en general. “Estaremos pendientes y dando puntual seguimiento” a los procedimientos para que los mismos se lleven a cabo conforme a derecho y se restaure el Estado de Derecho que debe prevalecer en Baja California y en el país, concluye.