Elementos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés), han aprehendido, durante los últimos dos meses, a dos hombres de Yemen identificados en la lista de vigilancia de terrorismo del Buró Federal de Investigaciones estadounidense (FBI, por sus siglas en inglés), lo que les impide, por ejemplo, volar en avión.
El primer arresto ocurrió a las 01:10 horas del pasado 29 de enero, a alrededor de 5 kilómetros al oeste de la entrada de Calexico, California -ciudad fronteriza situada en el condado de Imperial, que limita con Mexicali, Baja California), según lo informó la Oficina de Adunas y Protección Fronteriza estadounidense.
El hombre de origen yemení, de 33 años de edad, escaló un muro metálico de aproximadamente 10 metros de altura, ya que según las autoridades estadounidenses, quería cruzar hacia Estados Unidos desde la colonia Cachanilla, ubicada al poniente de Mexicali.
Los agentes de la CBP encontraron una tarjeta SIM de teléfono celular escondida debajo de la plantilla del zapato del hombre, quien fue remitido a las autoridades del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE.UU. (ICE, por sus siglas en inglés).
Luego, a las 11:30 horas del pasado 30 de marzo, agentes de la CBP arrestaron a un hombre por ingresar de forma a Estados Unidos, a 3 kilómetros del mismo punto que el primer caso. La persona, de 26 años de edad, está detenida bajo custodia federal, a la espera de su deportación.
“Parte de la misión de la Patrulla Fronteriza establece que protegeremos al país de los terroristas […] Estas aprehensiones en nuestra frontera ilustran la importancia de nuestra misión y por qué debemos de estar vigilantes de nuestra misión todos los días de proteger a este gran país”, dijo Gregory K. Bovino, agente jefe de patrulla de la CBP, en un comunicado que compartió en su cuenta de la red social Twitter.
#BREAKING🚨#USBP agents arrest 2 Yemeni illegal aliens with #terrorist ties attempting to illegally enter the U.S. at the southern border.
Both men are on the @FBI Terrorism Watch List & the No-Fly List.🚫
Border Security is #NationalSecurity.
✅https://t.co/oX5opZ5fjz pic.twitter.com/qY5rjdy2ZY
— USBP Chief Patrol Agent Gregory K. Bovino (@USBPChiefELC) April 5, 2021
El 25 de junio del 2019, cuatro presuntos terroristas del Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) fueron detenidos en Nicaragua, según lo informó la Policía Nacional del país centroamericano. Los hombres portaban un “Permiso de Ingreso y Permanencia Transitoria” para atención de migrantes, emitido por autoridades de Costa Rica, detalló la corporación nicaragüense.
“Ingresaron de manera ilegal procedentes de la República de Costa Rica, por paso fronterizo no habilitado, conocido como La Guasimada, en el municipio de Cárdenas, departamento de Rivas”, dijo la institución en un breve comunicado. Los detenidos, de entre 26 y 41 años de edad, mostraron documentos que los identificaban como ciudadanos egipcios e iraquíes.
La Policía Nacional nicaragüense explicó que, al concluir las investigaciones, las cuatro personas fueron trasladadas a la Dirección General de Migración y Extranjería, del Ministerio de Gobernación, para su deportación y entrega a las autoridades de Costa Rica.
Durante su conferencia de prensa matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que estaban atendiendo una alerta lanzada por el Gobierno de Estados Unidos sobre la posible presencia de tres miembros de Estado Islámico en Centroamérica.
La alerta originalmente se había emitido por la presencia del iraquí Mohamed Al Jabury, y de los dos ciudadanos egipcios, sin embargo, Nicaragua reportó la captura de un segundo ciudadano de Irak, en este caso Mohamed Yaboob.
Días antes, la Policía Federal mexicana recibió una alerta de parte del Departamento de Seguridad Interior estadounidense (DHS, por sus siglas en inglés), respecto a la posibilidad de que tres integrantes del grupo terrorista Estado Islámico podrían intentar cruzar por México para llegar a EE.UU.
Sin embargo, Alfonso Durazo Montaño, entonces titular de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SSPC), precisó que era “frecuente recibir ese tipo de alertas y que ello “no significa necesariamente que estén pretendiendo entrar al país [los presuntos terroristas], significa que tienen identificados sus movimientos sin precisar la dirección o el país al que se dirigen”.
“Y por supuesto que ante la eventualidad de la pretensión de entrar al país serían obviamente detenidos en virtud de esta alerta. No es una alerta dirigida a México, es una alerta internacional”, sostuvo el ahora ex funcionario federal mexicano.
A finales de noviembre del 2015, el diario The New York Times (NYT) publicó un reportaje de que en EE.UU. se encontraban preocupados porque miembros de grupos afines al Yihad, (muyahidines o yihadistas), así como los chiitas de Hezbollah, podrían encontrarse en territorio mexicano y de allí, en una frontera “sumamente porosa”, intentaran cruzar de forma ilegal a su territorio, perpetrando posibles actos terroristas en contra de su población.
Otro aspecto que a las autoridades estadounidenses les causaba temor, según el NYT, es que existían indicios de que estos grupos subversivos se encontraban aliados con los narcotraficantes mexicanos, lo que los hacía doblemente peligrosos.
Todo ello aderezado con “un ambiente políticamente cargado […] ya que muchos funcionarios republicanos y algunos demócratas de todo el país sostienen que los militantes [del Yihad o de Hezbollah] podrían estar escondidos entre las personas que huyen de la guerra civil de Siria y de otros conflictos”.